XXXV - Grandes Hitos de la Arquitectura Universal - Califato de Córdoba - Almanzor - La arqueta de Leyre - La Mezquita-Catedral de Córdoba, pincha aqui
La Taifa de Granada, fue un reino independiente musulmán que surgió en al-Ándalus en 1013, a raíz de la desintegración que venía sufriendo el Califato de Córdoba desde 1009, y que desapareció al ser conquistado por los almorávides en 1090, perteneciendo cronológicamente a los primeros reinos de taifas.
Reinado de Zawi ben Ziri (1013 -1019)
Reinado de Habús ben Maksan (1019-1038)
Reinado de Badis ben Habús (1038-1073)
Reinado de Abd’Allah ben Buluggin (1073 -1090)
La división del poder andalusí facilitó la ampliación de las
fronteras de los estados cristianos que fueron consolidando
su expansión, y propició la invasión de los almorávides (1086),
dinastía musulmana del norte de África
Los ziríes fueron una dinastía bereber originaria de la Cabilia , aquí el pueblo de la dinastía ziríes una región montañosa de Argelia, que desde el siglo X gobernaron la región de Ifriquiya, primero como vasallos de los fatimíes y, a partir de 1048 y hasta 1163, como emires independientes.
Una rama de los ziríes, encabezada por Zawi ben Ziri, se trasladó a al-Ándalus para servir como mercenarios a las órdenes de Almanzor y, en 1013, fundaría la Taifa de Granada, un reino independiente musulmán que surgió en al-Ándalus a raíz de la desintegración del Califato de Córdoba.
La alcazaba es, fundamentalmente, una palabra de origen árabe que hace alusión a un tipo de ciudadela fortificada con murallas o baluartes, que difiere del castillo por presentar en su interior una medina.
Por extensión, el término zirí se aplica también al arte y a las construcciones civiles realizadas en época de esta dinastía en las zonas de al-Ándalus que dominaron (Granada y Málaga). Entre ella destacan la alcazaba Cadima en el Albayzín, parte de la antigua muralla de Granada y la Alcazaba de Málaga.
Constituye uno de los núcleos antiguos de la Granada musulmana, junto con la Alhambra, el Realejo y el Arrabal de Bib-Arrambla, en la parte llana de la ciudad.
La historia de la Alhambra está ligada a su ciudad, Granada. Nos damos cuenta de esto con solo observar dónde está el complejo palaciego, sobre la colina Sabika, uno de los puntos más altos de la ciudad. Como es de imaginar, esta situación geográfica no es baladí, ya que con ella se buscaba el máximo control de todo lo que aconteciera y al mismo tiempo servir como símbolo de poder y ostentación.
A pesar de que se tienen registros de la ocupación de este lugar desde tiempos romanos, los primeros indicios de un emplazamiento militar en la colina datan del año 666. Más tarde, cuando Muhammad I Al-Ahmar, fundador de la dinastía nazarí, se hizo dueño de distintos territorios en Al-Andalus, la Alhambra pasaría asemejarse más al conjunto palaciego que todos conocemos actualmente.
En el siglo XI, al instaurarse Granada como la capital del Reino de Taifas y con el establecimiento del reino nazarí en Granada, este emplazamiento militar pasó a ser la residencia real y además se empezó la construcción del primer palacio de este monumento arquitectónico. Muhammad I Al-Ahmar fue el primer sultán en trasladar su residencia a esta colina y le seguirían 23 más hasta la Reconquista cristiana de 1492.
Durante todo el siglo XIII y XIV y principios del XV, el conjunto de la Alhambra pasa a ser una ciudadela de altas torres y murallas. Podemos hablar de que la construcción e historia de la Alhambra fue progresiva pues se ajustó a las necesidades de sus huéspedes durante más de cien años, pero siempre conservando su estilo ornamentado y lujoso.
El nombre de Alhambra significa literalmente “la roja” y se dice que viene dado por el color rojo que adornaba paredes y techos, pero también por el apellido del primer sultán de Granada, Muhammad I Al-Ahmar. Uno de los componentes principales de las distintas partes de la Alhambra fue la arenisca roja con partículas ferrosas que aun hoy resplandecen en color rojo al ser iluminada por la noche.
Con la muerte de los Reyes Católicos, la ciudad y su Alhambra quedó postergada y languideciendo y ni el intento de Carlos V de construirse un palacio en su interior consiguieron devolverle su antaño esplendor. En 1812 los franceses volaron parte de la Alhambra y solo la suerte y un español inválido evitaron su total destrucción. Según se cuenta, al tener que retirarse los franceses de Granada, volaron todas las defensas que pudieran ser útiles a los españoles, incluidas las de la Alhambra. Cuando ya la voladura había comenzado, un cabo de inválidos de nombre José García logró con gran peligro para su vida cortar la mecha que se acercaba a los palacios nazaríes con lo que el proceso destructivo resulto fallido en gran medida.
Tal vez fuera el norteamericano Washington Irwing (* 1783 † 1859) quien más haya contribuido a redescubrir la Alhambra de Granada, pues siendo secretario del Consulado de Estados Unidos, tuvo la oportunidad de residir en la Alhambra (en las habitaciones de Carlos V) y recopilar una serie de cuentos y tradiciones que plasmó en un libro publicado en 1829 y que lleva por titulo "Cuentos de la Alhambra". El éxito del libro fue tal, escrito en una época de pleno romanticismo que la Alhambra pasó las fronteras y hoy día es visitado por gentes de todo el mundo, siendo el segundo lugar más visitado de España después de la Sagrada Familia de Barcelona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario