lunes, 1 de noviembre de 2021

Periodo Geometrico - La Ilíada - La Odisea - Homero - La guerra de Troya

Listado de los Doce Olímpicos - Nacimiento del arte griego - Teoría de la generación del mito, PINCHA AQUI

El periodo geométrico es una etapa arqueológica de Grecia que comprende desde el 900 hasta el 700 a. C. Toma su nombre del estilo decorativo de la cerámica, en la que predominan los vasos sin fondo usados en rituales funerarios. Igualmente son habituales los temas relacionados con la muerte.

Píxide geométrica con tapa en forma de caballo.
Puede decirse que el estilo geométrico se extendió por la mayor parte del mundo griego, aunque alcanza su mayor calidad en Atenas. Sin embargo se desarrollan escuelas regionales con importantes peculiaridades entre las que destacan la escuela de Tebas, Beocia, Corinto y Argos.

Los griegos, que tenían un estrecho contacto comercial con el Levante, adoptaron el alfabeto fenicio, añadieron sonidos vocálicos y crearon así el alfabeto griego, en el que se basa el alfabeto latino moderno.

Homero

  • Lugar de nacimiento: Grecia Antigua
  • Fecha de nacimiento: Siglo VIII a.C
  • Murió: Siglo VIII a.C
  • Libros destacados: La Ilíada, La Odisea, más libros...

Busto de Homero. Mármol, copia romana de un original helenístico del siglo II a. C., Museo Británico, Londres.

Homero fue un poeta de la Antigua Grecia que nació y vivió en el siglo VIII a.C. Es autor de dos de las principales obras de la antigüedad: los poemas épicos La Ilíada y La Odisea.

Muchos historiadores y arqueólogos no han llegado a la conclusión sobre si Homero realmente existió o se trata de un personaje legendario, pues no hay pruebas concretas de su existencia. Sus obras pueden haber sido escritas por otros autores antiguos o tal vez son apenas recopilaciones de tradiciones orales del periodo de la época de la Antigua Grecia.

La vida de Homero es una mezcla de leyenda y realidad. De acuerdo con la tradición, Homero era ciego y pudo haber nacido en cualquier localidad de la Antigua Grecia: Esmirna, Colofon, Atenas, Quios, Rodas, Argos, Itaca o Salamina.

Pese a que son diversas las versiones sobre la vida del poeta que han llegado hasta nuestros días, su contenido, incluida la famosa ceguera del poeta, es mítico y propio de las novelas. La más remota como inverosímil, adjudicada falsamente a Heródoto, data del siglo V a.C, en ella, Homero es presentado como el hijo de una huérfana seducida, de nombre Creteidas, que lo dio a luz en Esmirna en la desembocadura del río Meles y que le puso por nombre Melesígenes. Se dice que pronto destacó por sus cualidades artísticas, y que comenzó una vida libre y poco convencional. Se cuenta que una enfermedad lo dejó ciego, y desde entonces pasó a llamarse Homero.

Sobre la muerte de Homero también hay mucho misterio. De acuerdo con documentos históricos del siglo V a.C., él habría muerto en la isla de Íos. Investigadores modernos afirman que no hay ningún dato seguro de las fuentes de antigüedad que hablan sobre Homero. De acuerdo con los historiadores modernos, en caso que haya existido, es probable que haya nacido y vivido en la zona colonial griega del Asia Menor. Esta conclusión se extrae a partir de las características lingüísticas de sus obras y las tradiciones abordadas que son típicas de la región jónica.

Algunos investigadores modernos afirman también que a partir de sus obras, es posible concluir que Homero tenía mucho contacto con la nobleza de la época. Aún persiste el debate sobre si Homero fue una persona real o bien el nombre dado a uno o más poetas orales que cantaban obras épicas tradicionales.

Fuente: El Resumen.com

La Ilíada es, fundamentalmente, una epopeya griega y el poema de género épico más antiguo escrito de la literatura occidental. Nos narra la embestida de los aqueos a la ciudad de Troya con la intención de rescatar a Helena de Esparta, esposa del rey Menelao, la cual fue secuestrada por Paris, príncipe troyano. A raíz de este suceso, se desató un conflicto bélico entre aqueos y troyanos que se dilató diez años.

El argumento del épico poema se centra en un episodio de cincuenta y un días que tuvo lugar en el último año de la llamada guerra de Troya.

El poema inicia con la cólera funesta de Aquiles, un guerrero griego que decide mantenerse al margen del conflicto troyano después de enfadarse con Agamenón, líder del ejército aqueo, por haberle arrebatado a su esclava Briseida. Y muy por detrás queda lo absurdo y lo incomprensible de la historia de los amores y el rapto de Helena.
La guerra es el eje central de la Ilíada. Expone su horror y su miseria. En ella no solo hombres heroicos, lejanos y guerreros luchan en el campo de batalla, también lo hacen dioses parciales e imperfectos que dirigen y alientan la masacre para favorecer a un bando u otro, o quizás, a ellos mismos.

La Ilíada nos entrega una idea derrotista del hombre, un ser desamparado, falto de recursos que no puede escapar de la determinación de los dioses. Nos muestra un mundo predestinado y para siempre: las Moiras hilan impasibles el destino, el pedazo de vida que le toca a cada uno; no hay retrocesos ni adelantamientos y en cualquier momento, cuando el hilo se rasga termina la vida. Al entrar en la épica se irrumpe en un mundo de lo fijo e inmutable, de lo inevitable: Héctor morirá inevitablemente a manos de Aquiles y Troya será destruida.

El lector de la Ilíada podrá advertir que aquellos héroes descomunales ya no son seres lejanos, de otro tiempo, inaccesibles, sino que son el reflejo de la humanidad, y que el poema es la descripción de la inacabable tragedia de la condición humana. La Ilíada habla magistralmente de qué es el hombre y qué es el mundo.

La Odisea es, junto con la Ilíada, el poema épico más importante de la antigüedad clásica, y representa el resquebrajamiento de la rigidez y de lo inmutable de la épica anterior.

El argumento se centra en el regreso de Odiseo a su patria, la isla de Ítaca, de la cual era rey, después de finalizada la guerra de Troya, una travesía que le llevaría diez años, sumados a los diez años que había estado luchando. Está constituido con la fusión de tres relatos: la Telemaquia, historia del hijo que busca a su padre perdido; la primitiva Odisea, historia de los viajes de Ulises; la venganza de Odiseo, el drama de los pretendientes.

Ulises y las Sirenas en un cuadro de Herbert James Draper
Herbert James Draper (Londres, 1863 – 1920) fue un pintor inglés de la era victoriana.

La épica encarna una época especial de Grecia: la edad en que comienza la gran cultura helénica, después de una edad oscura, una especie de breve Edad Media, que sucedió al desplome de la antigua civilización del Mar Egeo bajo el ímpetu de los pueblos invasores. Aquella edad de lucha es la que aparece transfigurada en su precursora, la Ilíada, que es, esencialmente, el poema de la guerra.

Aquí, en la Odisea, el combate heroico ha quedado atrás. Este poema está centrado en la vida, en las posibilidades del hombre. Representa el principio de los tiempos nuevos: la época de las ciudades helénicas, en la que se alberga y apacigua la vida y en la que los intereses dominantes del hombre son el hogar, los bienes y el trabajo.

En el poema imperan la sensatez y la reflexión. Podemos decir que las Moiras siguen hilando el destino de los mortales, sin duda, pero también se puede advertir que esos mortales, con ingenio y tenacidad, intentan hilar ellos mismos su propio destino. El hombre se vale del engaño cuando las cosas le van mal o para lograr algo que le es necesario pero difícil; cuando se encuentra atrapado ya no se deja vencer, impotente, sino que trata de salir del atasco, ya sea a través de la reflexión o la maquinación. Y la mujer, una presencia definitiva en la Odisea, también es capaz de la reflexión y se vale de medios que resultan plenamente adecuados a las circunstancias. El mundo ya no es simplemente, sino que se hace; es fruto del ingenio y de los recursos del hombre. El héroe, vencedor de la muerte, engañador, nos conduce, ya sea por las sendas del mar o por las de su mente, en el laberinto de la reflexión a la superación final de tantos obstáculos.

El lector de la Odisea podrá percibir que Ulises no es siempre igual a sí mismo, al contrario, se transforma. Vemos un héroe dúctil, que se adapta a la situación y que es capaz de cambiar. Será perpetuamente el antecesor del protagonista de la novela de transformación o metamorfosis; por eso el poema ha sido reconocido, prematuramente, como una novela y por eso algunos críticos la consideran la primera obra realista de la literatura occidental. Tal es así, que temas sobradamente fecundos para las letras como, la búsqueda del padre, el viaje como alegoría de la vida, el aprendizaje, el hogar, el amor incondicional, la fidelidad, entre otros, emergen en este inmenso poema épico, compuesto hace casi tres milenios.

Si la Ilíada nos introduce a lo trágico, la Odisea, en cambio, nos adentra en la amenidad, el entretenimiento y el asombro. Si la Ilíada estremece, la Odisea seduce, conmueve poderosamente. Pero ambos poemas nos enseñan y educan, tanto desde lo cultural como desde lo enciclopédico.

La apoteosis de Homero es un cuadro realizado por el pintor francés Jean-Auguste-Dominique Ingres.​ Mide 386 cm de alto y 515 cm de ancho, y está pintado al óleo sobre lienzo. Data de 1827 y se encuentra en el Museo del Louvre, en París.
Esta obra ensalza la figura de uno de los poetas más relevantes de la Antigua Grecia, Homero, creador de dos grandes epopeyas, la Ilíada y la Odisea. Junto a él aparecen numerosos personajes que le rinden homenaje, grandes nombres de las artes y las letras de toda la historia. 
Sobre la composición, el grupo central está inspirado en el relieve La apoteosis de Homero, de Arquelao de Priene (siglo III a. C.), conservado en el British Museum (Londres). Los grupos laterales tienen influencia rafaelesca, especialmente de La escuela de Atenas y El Parnaso. También la Victoria tendría trazos de Rafael. Esta influencia rafaelesca se denota especialmente en los rostros, los cuales han sido criticados en ocasiones por excesivamente fríos e inertes. En cambio, los cuerpos están mejor resueltos, sin duda porque los trabajó con mayor libertad estilística, aportando sus propios conocimientos de anatomía.
Ingres fue un pintor neoclásico. Recibió una formación académica en el taller de Jacques-Louis David, el mayor referente en la pintura neoclásica. Terminó su formación en Roma en 1807, con una beca de estudios.

La guerra de Troya

La guerra de Troya es el gran enfrentamiento entre griegos y troyanos, pero en ella también intervinieron de manera activa y decisiva muchos dioses que, por diversas razones, decidieron apoyar a uno u otro bando.

El juicio de Paris, Peter Paul Rubens, ca. 1638-1649. (Museo del Prado. Madrid).
Pedro Pablo Rubens ​ (Siegen, Sacro Imperio Romano Germánico, actual Alemania, 28 de junio de 1577-Amberes, Flandes, Países Bajos Españoles, actual Bélgica, 30 de mayo de 1640)fue un pintor barroco de la escuela flamenca. Su estilo exuberante enfatiza el dinamismo, el color y la sensualidad. Sus principales influencias procedieron del arte de la Antigua Grecia, de la Antigua Roma y de la pintura renacentista, en especial de Leonardo da Vinci, de Miguel Ángel, del que admiraba su representación de la anatomía, y sobre todo de Tiziano, al que siempre consideró su maestro y del que afirmó «con él, la pintura ha encontrado su esencia»

Todo empezó con una manzana de oro “para la más bella”, título que reclamaban Juno, Minerva y Venus. Para resolver tal disputa, Júpiter eligió como juez a Paris, un joven pastor troyano que debía entregar la manzana a quien considerase que era la diosa más bella. Además de presentarse desnudas para mostrar su atractivo físico, las tres diosas le hicieron interesantes y tentadoras ofertas: Juno le ofreció el poder sobre un amplio territorio; Minerva, la sabiduría y la victoria en todas las batallas; y Venus, el amor de la mujer más bella del mundo. Paris la escogió a ella.

Luca Giordano: Rapto de Helena (Ratto di Elena). 1680 - 1683.
Luca Giordano (Nápoles, 18 de octubre de 1634-Ibidem, 3 de enero de 1705), pintor barroco italiano. En España fue también conocido como Lucas Jordán, por la castellanización del nombre.
En la mitología griega, el rapto de Helena fue realizado en Esparta por Paris (también llamado Alejandro), príncipe troyano, y por algunos de sus mejores hombres.

La mujer más bella del mundo resultó ser Helena, esposa del rey Menelao de Esparta. Paris la raptó, o ambos huyeron juntos rumbo a Troya, por lo que los griegos se conjuraron para rescatarla. Así dio comienzo la guerra, en la que tomaron parte grandes héroes y guerreros, como Agamenón, Menelao, Odiseo, Diomedes, Ayax el Grande y, especialmente, Aquiles, que es el principal protagonista de la Ilíada, el gran poema homérico que narra este mítico conflicto armado.

El enfrentamiento entre aqueos y troyanos se prolongó durante muchos años sin que la victoria se decantase por uno u otro bando, mientras ambos perdían a algunos de sus principales guerreros. Finalmente los griegos decidieron fingir su retirada y dejar en las playas de Troya un gran caballo de madera, en cuyo interior se escondían varios de sus mejores soldados, encabezados por Odiseo. Creyendo que era una ofrenda a los dioses, los troyanos introdujeron el caballo en la ciudad; de ese modo, los griegos consiguieron apoderarse de Troya, que fue saqueada y quedó destruida por un gran incendio.

Los troyanos engañan a los griegos con el Caballo de Troya. Óleo sobre lienzo de Francisco Collantes, primera mitad del XVII, para el Palacio del Buen Retiro.

En la mitología griega, Paris, también llamado Alejandro, «El protector del varón»), fue un príncipe troyano, hijo del rey Príamo y de su esposa Hécuba y hermano de Héctor. Paris fue conocido como «El de la hermosa figura».

Juegos fúnebres en honor de Paris
Príamo, rey de Troya y padre biológico de Paris, celebraba cada año unos juegos en honor a su hijo, que creía muerto. En una ocasión, los servidores del rey se llevaron a su toro favorito para emplearlo como premio en los susodichos juegos. Paris, que fue uno de los jugadores, ganó y se hizo con el toro, haciendo nacer en sus hermanos la indignación al creer que habían sido derrotados por un simple pastor. Dispuestos a matarlo, fueron detenidos por Casandra, quien gracias a sus poderes adivinatorios reconoció que el simple pastor era el hijo del rey Príamo.

¿A que bando ayudó Atenea?

En la mitología griega, Atenea , también conocida como Palas Atenea, es la diosa de la guerra, la civilización, sabiduría, estrategia en combate, de las ciencias, de la justicia y de la habilidad.​ Fue una de las principales divinidades del panteón griego y una de los doce dioses olímpicos. Atenea recibió culto en toda la Grecia Antigua y en toda su área de influencia, desde las colonias griegas de Asia Menor hasta las de la península ibérica y el norte de África. Su presencia está atestiguada hasta en las proximidades de la India. Por ello su culto tomó muchas formas e incluso tuvo una extensión considerable hasta el punto de que su figura fue sincretizada con otras divinidades en las regiones aledañas al Mediterráneo. En la mitología romana se la adoraba con el nombre de Minerva.

Muerte de Príamo a manos de Neoptólemo, hijo de Aquiles, ánfora ática de figuras negras, h. 520-510 a. C., Museo del Louvre
En la mitología griega, Príamo  fue el rey mítico de Troya en la época de la guerra de Troya. Fue hijo de Laomedonte y de la ninfa Estrimón, hija del Escamandro.
Bajo su mandato se desarrolló la legendaria guerra de Troya, contra los griegos que reclamaban la devolución de Helena.
Es descrito en la Ilíada dando pruebas de una inmensa bondad y de una justicia ejemplar. Al contrario que sus consejeros, no culpó a Helena de la guerra

Áyax llevando el cadáver de Aquiles, protegido por Hermes (izquierda) y Atenea (derecha). Lado 1 de un ánfora ática de figuras negras, ca. 520 - 510 a. C.
Áyax, hijo de Telamón, rey de Salamina, y Peribea. Es un legendario héroe de la mitología griega. Para distinguirlo de Áyax, hijo de Oileo se lo llamaba Áyax el Grande
Su nombre fue elegido por Heracles, amigo de Telamón, quien al ver que el águila de Zeus se posaba en su hombro le anunció: «Nacerá de ti, Telamón, el hijo que deseas y del nombre del ave que acaba de aparecérsenos lo llamarán Áyax. Sorprenderá a los pueblos en las luchas de Ares»
Fue un valeroso guerrero, el más fuerte después de su primo Aquiles que se embarcó a la mítica Guerra de Troya al mando de doce navíos de Salamina acompañado de su hermano Teucro
Peleó en la guerra con coraje y destreza. En la Ilíada de Homero se lo describe como un guerrero de gran estatura y fuerza colosal, testarudo y de inmenso escudo que por sí mismo es un antemural de las falanges, segundo en destreza y valentía en la batalla únicamente por detrás de Aquiles. No fue herido en ninguna de las batallas relatadas en la Ilíada y es el único personaje de importancia en la obra que no recibió ayuda por parte de ninguno de los dioses griegos.
Cuando Patroclo murió a manos de Héctor, los troyanos intentaron hacerse con su cuerpo y alimentar con él a los perros, pero Áyax luchó y logró proteger el cadáver, devolviéndolo al campamento griego y a su amigo Aquiles. Posteriormente, cuando Aquiles murió tras ser alcanzado por una flecha de Paris, Áyax y Odiseo consiguieron recuperar el cuerpo del héroe para llevarlo al campamento griego.

Suicidio de Áyax el grande por Poussin

Esténelo vendando el dedo herido de Diomedes
En la mitología griega, Esténelo era un rey de Argos, hijo de Capaneo y Evadne. En la Ilíada alardea de haber capturado junto con los otros epígonos la ciudad de Tebas, aunque tenían menos hombres que su padre, uno de los siete contra Tebas, quienes murieron intentando la misma cosa porque desobedecieron a los dioses. Luchó al lado de Diomedes y los otros argivos en la Guerra de Troya, y fue uno de los hombres que se escondieron en el caballo de Troya. Como descendiente de Proteo, gobernó con Diomedes la mitad del reino de Argos que pertenecía a Ifis tras la muerte de Adrasto y Egialeo. 

En la Guerra de Troya donde Diomedes forja el mito de guerrero indomable y valeroso, acaso el más bravo junto a Aquiles y en todo caso invicto. Como pretendiente que fue de la bella Helena, aportó 80 naves a la armada aquea y desde el inicio participó como protagonista en los principales pasajes de la guerra que cantó Homero. Con su inseparable compañero Odiseo viaja a Esciro, reino de Licomedes, en busca de Aquiles, al que Tetis había ocultado travestido de mujer para evitar que su hijo se desplazara a Troya y en cuyas playas el oráculo predijo su muerte.

Esta original novela de Robert Graves narra la historia de una notable princesa italiana, Nausícaa, que vivió setecientos años antes de Cristo y salvó el trono de su padre de las ambiciones de los usurpadores y a dos de sus hermanos de una muerte violenta, librándose ella misma de un desagradable matrimonio gracias a la inesperada ayuda de un noble cretense que había naufragado en las costas de Sicilia. Con esta novela Robert Graves analiza la teoría que lanzó Samuel Butler en 1896 que la autoría de la"Odisea"hay que atribuirla a una princesa Siciliana que además se retrató a sí misma en el personaje de Nausicaa. Aceptar esta teoría permite destacar el carácter de épica de lo doméstico de la Odisea. En definitiva una novela de Robert Graves. Robert Graves (1895-1985) es autor de una más que notable obra poética, de numerosos ensayos centrados en el mundo antiguo y mitológico (entre los que destaca La diosa blanca), de novelas tan divertidas como El sello de Antigua y de un buen número de traducciones al inglés que van desde Apuleyo, Lucano y Setonio a Ramón J. Sender.

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