lunes, 7 de junio de 2021

Antonio Berni (pintor, grabador y muralista argentino) Juanito Laguna y Ramona Montiel (representantes icónicos de los marginados por la sociedad)

Rafael Barradas (pintor y dibujante uruguayo) - Vibracionismo - El futurismopincha aqui

Delisio Antonio Berni: nació en Rosario el 14 de Mayo de 1905, sin duda el de mayor renombre internacional junto a Lucio Fontana, terminaría siendo considerado por la crítica como uno de los padres del arte moderno en la Argentina, con una ductilidad que signaría su constante proceso evolutivo.

Trabajó de aprendiz en el taller de vitrales de Salvador Buxadera y dibujo y pintura en el Centre Catalá.

Lucio Fontana (Rosario, 19 de febrero de 1899-Comabbio, 7 de septiembre de 1968) fue un pintor, ceramista y escultor ítalo-argentino. Fundó en 1946 el Espacialismo.
El Espacialismo (en italiano, spazialismo o movimento spazialista) es un movimiento artístico, fundado por el artista italoargentino Lucio Fontana en 1946, que coincide aproximadamente con el nacimiento del Expresionismo abstracto en Nueva York. La primera exposición es la celebrada en 1949. Fontana llamó al movimiento Movimento Spaziale.

Becado a Europa, realiza estudios con André Lhote y Otón Friesz, de regreso en 1933 hace conocer en nuestro medio las nuevas tendencias: Cubismo, Surrealismo y el Dadaísmo, dicta clases en el Museo Municipal, además es nombrado director y profesor de la “Mutualidad de Artistas Plásticos de Rosario”.

Durante esta época, Berni realiza una investigación periodística sobre la mafia y prostitución en el barrio de Pichincha de Rosario documentando con fotografías, material que luego aprovechará para su obra.

En 1931 consigue un puesto en la oficina de Estadística y Archivo en la Municipalidad de Rosario en los altos del Mercado Municipal de calle Barón de Maúa y San Luís.

Las obras realizadas en este período conocida como: ‘La década Infame’ representa el derrocamiento del presidente Hipólito Irigoyen por el general Uriburu.

Se tornan comprometidas con la denuncia de la injusticia y miseria social; en defensa de los humildes, de los marginados, pinturas realistas de alto tono crítico, identificado con las ideas políticas socialistas.

Chacareros (1935)

Un ejemplo en su obras  de esta época: Pan y Trabajo, Manifestación (1934); Desocupados (1934); Hombre Herido (1935), Chacareros (1935); influenciada de la monumentalidad del muralismo mejicano y de la “Nueva Objetividad” alemana.

Manifestación. 1934. Temple sobre tela - Obra emblemática de A. Berni
El grupo originariamente constituido por: Manuel Ferrer Dodero, Domingo Garrone, Mario Bertolano, Allende, Medardo Pantoja, Pedro Gianzone, Leonidas Gambartes y Juan Berlengieri. El taller contaba con modelo vivo, los trabajos se realizaban sobre cartón o bastidores fabricados artesanalmente los materiales empleados: tiza, carbón, óleo y temple al huevo con pigmentos de óxido férrico. Se gestaba una idea de independencia respecto a las Academias y Conservatorios, en contra de los viejos procedimientos de copia de láminas o modelos vaciados de yeso. Entre los que podemos citar a: Salvador Zaino, Enrique Schwender, Pedro Blanqué, Fernando Gaspary y Rafael Barone. Caracterizadas por la sobriedad, exactitud y precisión de la representación; por los detalles fisonómicos y la composición fundado en el registro fotográfico, sin interpretaciones subjetivas, ni gestos.

Paralela a esta producción realiza una de aproximación clásica casi renacentista, de tendencia metafísica, dominando la temática de retratos femeninos con una actitud entre pensativa y ausente, realizados en una estructuración geométrica

Luego entra en una variación Neorrealista, incorpora en sus trabajos el collage y el assemblage, utilizando un repertorio de objetos de deshecho, que denotan la miseria cotidiana de las villas marginales de la gran ciudad. Sobre esta base crea la historia de Juanito Laguna, (representa un niño de la exclusión y la miseria); su primera serie aparece en 1961, es expuesta en galería Peuser de Buenos Aires.

 Ramona en la intimidad: Pintura y técnicas mixtas.

Posteriormente crea otro personaje de metáfora social de la marginación, simbolizado por Ramona Montiel (la prostituta), ambos personajes simbólicos, valiéndose de materiales alusivos aptos para narrar sus vidas (Construye murales collage de gran tamaño, con materiales de desecho y pintura).

Toda su iconografía está ligada a un repertorio crítico, escenas fácilmente asociadas con realidades concretas y condenables, ligadas a situación nacional e incluso a la realidad latinoamericana.

En 1933, surge un proyecto para pintar un gran mural, en los sótanos de la casa de de Natalio Botana propietario del diario Crítica, en Torcuato de Buenos Aires.

La puerta abierta 1932
Óleo sobre cartón del artista argentino Antonio Berni (1906-1981). Obra que tiende al surrealismo, data de 1932, de la primera etapa de producción del artista, con claras influencias de De Chirico. Corresponde a la investigación que desarrolló durante su estadía en París. En la escena el autor juega con las escalas de los objetos y las leyes de la lógica. Más tarde cuando el artista vuelve a su tierra, comienza una segunda etapa de producción perteneciente a la corriente del Realismo Social.

Tal emprendimiento se le otorga al muralista mejicano David Alfaro Siqueiros; por sus dimensiones 200m2, requiere de una tarea colectiva.

Colaboraron los artistas argentinos Antonio Berni, Juan Carlos Castagnino, Lino Spilimbergo y el escenógrafo uruguayo Enrique Lázaro, al trabajo grupal lo denominaron: Ejercicio Plástico.

La modelo utilizada para los desnudos femeninos que cubren las paredes y el piso fue la escritora y poetisa uruguaya, Blanca Luz Brum, casada poco tiempo antes con Siqueiros.

El gobierno militar argentino expulsa del país a Siqueiros. El mural demandó tres meses de continuo trabajo, se aplicaron nuevos procedimientos para la época. Esmaltes sintéticos, sopletes y rodillos, fotos que reemplazaron a los bocetos dibujados.

Mercado colla o Mercado del altiplano - 129 x 330 x 2 cm - Pintura mural al fresco buono y al secco - Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires
“La pintura mural debe ser cuidada y mantenida en su pureza, porque ella tiene valores públicos de cultura, como lo tienen los monumentos de la ciudad. La pintura mural cumple una misión distinta a la que puede ejercer la pintura de caballete: individual y de uso privado. La pintura mural tiene su porvenir en el futuro inmediato, y ya lo tiene hoy cuando las grandes muchedumbres se ubican en un plano positivo como elementos participantes de la cultura”, escribió Berni en 1942.

El mural pertenece a una época clave en la producción de Berni en la que refuerza su compromiso con la realidad social. La pieza se inscribe dentro del “Nuevo Realismo”, doctrina estética que el artista inició en 1934, luego de la visita al país del mexicano David Alfaro Siqueiros. En esos años, Berni había descubierto el norte del país y, a partir de 1936, realizó un conjunto de obras dedicadas a la exaltación del carácter singular de la Puna y sus habitantes. Significó el encuentro con la raza indígena y con una cosmovisión común a gran parte de los países de la región.

Obra:

Berni indagó en diferentes tendencias que parten de un depurado clasicismo inicial al barroco, transitando experiencias del Impresionismo pasando por el Surrealismo, el Expresionismo, Informalismo, Realismo Mágico, Nueva Figuración, hacia las tendencias del Pop Art en su última etapa.

La siesta
Testigo de los momentos más dramáticos de la historia del siglo XX, Antonio Berni hace una denuncia de los efectos de las guerras, de los vicios y peligros de la sociedad de consumo que convierten en víctimas a los seres humanos. El constante movimiento pendular entre la realidad que le toca vivir y aquellos temas consagrados por la historia del arte como el apocalipsis, las madonnas o las crucifixiones, entre otros, marcan la originalidad de sus obras. Berni reinterpreta la iconografía cristiana tradicional incorporando la vida cotidiana y los problemas sociales de su época. Las citas a los temas religiosos se  hacen presentes en distintas etapas de su producción

Este óleo de Berni, reúne varios temas de la iconografía cristiana: el nacimiento, la madonna, y también anticipa la crucifixión, a través de las sogas colgadas en la pared con una cartela en blanco. ​El personaje dormido recuerda al Fauno Barberini, de época helenística, que había sido fuente de inspiración de pintores y escultores de distintos períodos de la historia del arte, como el Endimión dormido de 1822, de Antonio Canova. La siesta fue una obra que permaneció en la familia del artista y en 2012 fue adquirida por el Museo Nacional de Bellas Artes a su hija.


New Chicago Athletic Club 1937 MOMA

La temática que utilizó Berni para casi toda su obra, es de profundo compromiso con la problemática social.

Utiliza para los símbolos de la injusticia y marginación los personajes reales.

En 1962 obtuvo el Primer Premio en la Bienal de Venecia.

Falleció en Buenos Aires el 13 de Octubre de1981.

 “La Pintura es una idea que se modifica constantemente a través de la existencia del hombre”.- A. Berni.

“El arte es una repuesta a la vida. Ser artista es emprender una manera riesgosa de vivir, es adoptar una de las mayores formas de libertad, es no hacer concesiones. En cuanto a la pintura es una forma de amor de transmitir los años en arte”. A. Berni.

 “...La Línea de fuerza de toda mi trayectoria ha sido la temática, y en función de ella se han producido todos los cambios formales y cromáticos, porque el estilo para mí no es sólo una manera de hacer, sino también una manera de pensar trascendiendo”.- A. Berni

'La gran tentación' o 'La gran ilusión' (1962), de Berni
Muchos argentinos conocen al dedillo la vida de Juanito, hijo de un peón de la industria metalúrgica, al que Berni describía como “un chico pobre pero no un pobre chico”, alguien que no está “vencido por las circunstancias” sino "lleno de vida y esperanza". A largo de tres décadas a Juanito se le ha visto celebrar la Navidad con su familia, irse de vacaciones, bañarse con su perro, llevarle la comida a su padre a la fábrica —impresionante ese cuadro, por cierto— o sufrir inundaciones en la villa de igual modo que la siguen sufriendo medio siglo después los niños que viven ahora en las villas-miseria de Buenos Aires. Berni escribió en los años setenta: “Si bien (Juanito) es un arquetipo del Gran Buenos Aires, podría también serlo de todos los niños, de todos los changos de las ciudades de Latinoamérica. Podría ser de Santiago de Chile, de Lima, de Río de Janeiro, de Caracas…”.
Los argentinos conocen también a la perfección a Ramona Montiel, la bella costurera del barrio porteño de Pompeya, que atraída por los oropeles del gran mundo se convirtió en prostituta y fue procurándose la protección de millonarios, militares, curas… Durante décadas la han podido observar también en decenas de cuadros y grabados. Por eso no es nada extraño que uno de los dos curadores de la exposición, Mari Carmen Ramírez, hable de Ramona como de un personaje literario o una persona real: “Ella utiliza su personalidad como un instrumento para llegar al poder. Ella es la que está en control, no es una víctima”. Ya en 1963, cuando Ramona daba sus primeros pasos en el mundo, el padre de la criatura aclaraba en una entrevista: “Ella es un personaje de arrabal, como surgido en una letra de tango (…). Pasa por los momentos más duros, pero por momentos tiene una vida fácil; pasa a ser de costurera a amante de varios individuos… toda una complicada trayectoria, propia del siglo XX”.

Antonio Berni en Rosario - La Mutualidad de Estudiantes y Artistas Plásticos

La crisis económica Mundial de 1929, sumada a la crisis interna del país del año 1930, con la caída del gobierno de Irigoyen por el golpe militar de general Uriburu; genera en la Argentina, un período de opresión, de pérdida de las libertades, oscuro, conocido como: “La Década Infame”.

Dominado por la confrontación ideológica, provocaron en los artistas un desplazamiento de la discusión del “Proyecto estético” a la discusión del “Proyecto político”; de la discusión entre Cosmopolitismo y Nacionalismo a la discusión de las relaciones ideológicas entre Arte y Sociedad.

Por entonces un grupo de jóvenes unidos por los mismos deseos: el de pintar; alquilaban un espacio en el llamado Caserón de Comas, ubicado en Santa fe 556, algunos pocos habían recibido algún conocimiento.

Rosario es una ciudad situada en el sureste de la provincia de Santa Fe, Argentina, la tercera más poblada del país, solo superada por Buenos Aires y Córdoba. Es la cabecera del departamento homónimo.
Constituye un importante centro cultural, económico, educativo, financiero y de entretenimiento y forma parte del denominado Triángulo agrario, junto con las localidades de Pergamino y Venado Tuerto.

La Mutualidad

Surge en la ciudad de Rosario, como el primer intento de crear una vanguardia organizada, cuyos miembros no sólo se identifican en preocupaciones estéticas, sino a una fundamentación histórica y social de las prácticas artísticas y vinculadas a la política.

Nace como escuela taller en Maipú 724; el “Museo Municipal de Bellas Artes” situado en calle Santa Fe 845 les dispensa una sala para sus actividades.

El 6 de Marzo de 1934, queda oficialmente constituida la Mutualidad, nombrando director y profesor de la misma a Antonio Berni, quien había regresado tiempo antes de Europa, por razones económicas de la crisis mundial del 1929, la beca a la que se le había otorgado se interrumpe. - Texto extraído de Arnoldo Gualino Profesor y Licenciado en Artes Visuales

Juanito Laguna nace a finales de los años 50 en uno de los barrios más miserables del arrabal bonaerense. Hijo de un peón de la metalurgia, Juanito crece entre la pobreza del bañado de Flores, mientras juega en las calles, aprende a leer o celebra la Navidad, intuyendo por ahí fuera otro mundo lleno de esperanza.

Ramona Montiel es también de barrio porteño, el de Pompeya. Joven y bonita, Ramona sobrevive a base de coser. Sin embargo, ella no se conforma con su destino; por ello se deja seducir por los lujos, la imaginación y las falsas promesas de una “vida mejor” hasta convertirse en la amante protegida de un poderoso círculo de amigos influyentes: un general, un marinero, un criminal, un embajador, un obispo.


Ramona y Juanito, aunque representan la realidad más inmunda de un tiempo, de una gran ciudad (Buenos Aires), son personajes de ficción nacidos del arte y los pinceles de Antonio Berni (Rosario, 1905-Buenos Aires, 1981), el gran exponente de la pintura narrativa de su país. Juanito es un chico pobre, pero no un pobre chico, escribe Berni, uno de los personajes más entrañables del espectro social latinoamericano de su época. Ramona, sin embargo, es su contraparte femenina, una chica de arrabal, como surgida de una letra de tango, a través de la cual el artista sondea las diferentes presiones sociales que recaen sobre la mujer.

La Navidad de Juanito Laguna

Tal como Shakespeare manifestara: “Estamos hechos de la misma materia que los sueños” Antonio Berni construye estos personajes con pedazos de sus mundos: “…Yo a Juanito y a Ramona los hice precisamente en collage, con materiales de rezago, porque era el entorno en que ellos vivían; y así no apelaban justamente a lo sentimentalista. Yo les puse nombre y apellido a una multitud de anónimos, desplazados, marginados niños y humilladas mujeres; y los convertí en símbolo, por una cuestión exactamente de sentimiento. Los rodeé de la materia en que desenvolvían sus desventuras, para que, de lo sentido, brotara el testimonio.”

Antonio Berni (Juanito Laguna - Ramona Montiel)

A lo largo de dos décadas Berni imagina, dibuja, pinta, ensambla la personalidad, la dureza de la vida, la evolución de sus dos criaturas en diferentes series que plasman ambientes miserables, diferencias sociales, basureros ideológicos que denuncian y golpean conciencias, tanto dentro como fuera de su país natal.

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