sábado, 19 de enero de 2013

Juan I y Ricardo I de Inglaterra


Juan I de Inglaterra

Más conocido como Juan sin Tierra (originalmente Sans-Terre en francés, Lackland en inglés) (1166 –1216), fue rey de Inglaterra y Señor de Irlanda.

Reinó sobre Inglaterra desde el 6 de abril de 1199 hasta su muerte en 1216. Sucedió en el trono a su hermano mayor, el rey Ricardo I de Inglaterra (conocido como «Ricardo Corazón de León»). Juan se ganó el apodo de «Sin tierra» debido a su carencia de herencia por ser el menor de los hijos y por su pérdida de los territorios en Francia; también fue apodado «Espada Suave» por su conocida ineptitud militar. Fue un rey Plantagenet o de la línea angevina.



Ricardo I de Inglaterra 

(N. 1157 - Châlus, Limousin, Francia, 1199), conocido como Ricardo Corazón de León, fue Rey de Inglaterra entre 1189 y 1199, siendo el tercer hijo del rey Enrique II de Inglaterra y de Leonor de Aquitania.
En su época, el trovador Bertran de Born lo apodó “Òc e non” (‘sí y no’). Durante su reinado, sólo visitó Inglaterra en dos ocasiones: las correspondientes a sus dos coronaciones. En total, no llegaron a seis los meses que pisó su suelo como rey. Tomó parte en la Tercera Cruzada, con campañas en Sicilia y Chipre en el camino y, posteriormente pasó un período arrestado por Leopoldo V, duque de Austria.

Rey de Inglaterra, Duque de Normandía y Aquitania y Conde de Anjou.´


Berenguela de Navarra 


(n. probablemente en Tudela, Navarra, entre 1165 y 1170 - Le Mans, Francia, 23 de diciembre de 1230) reina de Inglaterra, duquesa de Normandía y condesa de Anjou.

Cuando Ricardo Corazón de León, rey de Inglaterra, iba camino de Palestina en la tercera Cruzada, Berenguela (que había sido prometida en secreto a este rey) se unió con él en la ciudad siciliana de Mesina, Italia.
El 12 de mayo de 1191, Berenguela y Ricardo se casaron en la capilla de San Jorge de Limassol, en Chipre. La consumación de este matrimonio ha sido discutida por algunos historiadores alegando, entre otras cuestiones, la presunta homosexualidad de Ricardo; homosexualidad, en cualquier caso, que no sería exclusiva, pues las fuentes nos cuentan la existencia de un hijo bastardo y su costumbre por violar a las mujeres de los pueblos sublevados a su autoridad.

Nunca llegó a conocer Inglaterra, pues desde 1191 a 1192, Berenguela vivió en San Juan de Acre (Palestina) mientras su esposo estaba en campaña contra los sarracenos. Más tarde, volvieron a Europa por separado, y desde 1192 a 1194, periodo en que Ricardo estuvo prisionero en Alemania, ella vivió en Poitiers (Francia), colaborando en la consecución del cuantioso rescate exigido por el emperador alemán para liberar a Ricardo (de hecho, su hermano Fernando de Navarra fue uno de los rehenes ofrecidos como garantía de la parte del rescate que quedó por pagar). Aunque es bastante frecuente que se asegure que Berenguela y Ricardo nunca volvieron a reunirse, lo cierto es que entre 1195 y 1196 ambos se reconciliaron y reiniciaron su convivencia. Así, proyectaron la construcción de una residencia en Thorée, en el Condado de Anjou, (Francia), pero las continuas disputas territoriales entre Ricardo y Felipe Augusto de Francia los volvieron a separar definitivamente.

Tras la muerte de Ricardo (6 de abril de 1199), caído en el asedio a Châlus, Berenguela inició una disputa con su cuñado Juan Sin Tierra, el sucesor de Ricardo en el trono inglés, por su negativa a dar cumplimiento a las disposiciones testamentarias establecidas por Ricardo para su viuda. 

En 1204, Felipe II Augusto le concedió el señorío de Le Mans a cambio de los derechos de Berenguela sobre las ciudades normandas de Falaise y Domfront, que el francés acababa de conquistar. Allí vivió hasta su muerte el 23 de diciembre de 1230. Contaba entre 60 y 65 años, y fue sepultada en la abadía de L'Epau, de la que fuera fundadora, y en cuya sala capitular se puede contemplar actualmente su efigie tumbal.

Actualmente una calle, un museo y una biblioteca llevan el nombre de Berenguela de Navarra en Le Mans. 

Sancho VII el Fuerte 

Fue rey de Navarra entre 1194 y 1234, año en que murió en el castillo de Tudela, Navarra. Era hijo y sucesor de Sancho VI «el Sabio», de la dinastía Jimena y hermano de Berenguela de Navarra, mujer de Ricardo Corazón de León.

Conquista de Sicilia

En septiembre del año 1190, tanto Ricardo como Felipe llegaron a Sicilia. Tras la muerte del rey Guillermo II de Sicilia, su primo Tancredo de Lecce había tomado el poder y había sido coronado a principios de 1190 como rey, aunque la heredera legal era la tía de Guillermo Constanza de Sicilia, señora del nuevo emperador Enrique VI del Sacro Imperio Romano Germánico. Tancredo había encarcelado a la viuda de Guillermo, la reina Juana de Inglaterra, reina consorte de Sicilia, hermana de Ricardo I y a quien Tancredo no había entregado el dinero que había heredado en el testamento de Guillermo. Al arribo de Ricardo I, demandó que su hermana fuese liberada y se le diese su herencia. La presencia de tropas extranjeras también causó malestar: en octubre se sublevó el pueblo de Messina, exigiendo que los extranjeros se fueran. Ricardo I atacó Messina, ocupándola el 4 de octubre de 1190. Luego de saquear y quemar la ciudad, Ricardo I estableció allí su base. Permaneció en ese lugar hasta que Tancredo accedió finalmente a firmar un tratado el 4 de marzo de 1191. El tratado fue firmado por Ricardo, Felipe y Tancredo

Al atardecer del 25 de marzo de 1199, Ricardo caminaba por el perímetro del castillo sin su cota de malla, investigando el progreso de las obras militares en los muros del castillo. Ocasionalmente, se verificaban lanzamientos de flechas desde las murallas del castillo, pero se les prestaba poca atención. Un defensor en particular divertía mucho al rey - un hombre parado sobre la muralla, ballesta en mano, sostenía con la otra una sartén que usaba como escudo contra los proyectiles. Él apuntó una flecha deliberadamente al rey, a lo cual éste aplaudió. Sin embargo, otra flecha lo hirió en el hombro izquierdo cerca del cuello. Él intentó sacarla en la privacidad de su tienda, pero no tuvo éxito. Un cirujano, al que Hoveden llamó un carnicero, la extrajo destrozando negligentemente el brazo del rey en el proceso. De cualquier manera, la herida se volvió gangrenosa. 

De acuerdo a ello, Ricardo hizo traer al ballestero ante él, llamó a Pedro Basil, Juan Sabroz, Dudo y Bertrán de Gurdun alternativamente, según los cronistas. El hombre resultó ser un niño, el cual alegó que el rey había asesinado a su padre y dos de sus hermanos y que había disparado a Ricardo en venganza. El niño esperaba ser asesinado. Ricardo, como último acto de piedad, lo perdonó diciendo: “Continúa viviendo y por mi recompensa contempla la luz del día”, antes de ordenar que lo liberaran y despidieran con 100 chelines. Ricardo, entonces, puso sus asuntos en orden, legando todos sus territorios a su hermano Juan y sus joyas a su sobrino Otón.

Tumba de Ricardo I de Inglaterra en la abadía de Fontevraud
 cerca de Chinon, en Anjou, Francia
Ricardo murió el martes, 6 de abril de 1199, en brazos de su madre. Más tarde se afirmaría que “Cuando el día terminaba, él terminó su vida terrenal”. Su muerte fue referida como “el León que fue asesinado por la Hormiga”. Su último acto de caballerosidad fue infructuoso: tan pronto murió, su mercenario más infame, el capitán Mercadier, tomó al niño que había disparado la flecha fatal, lo despellejó vivo y luego lo colgó.

Las vísceras de Ricardo fueron enterradas en el lugar de su muerte, su corazón en Ruan, Normandía, y el resto de su cuerpo fue sepultado a los pies de su padre en la Abadía de Fontevrault en Anjou. En su lecho de muerte legó todas sus posesiones a su hermano Juan, dado que no tenía herederos legítimos.

jueves, 17 de enero de 2013

La llamada "Guerra de los Cien Años


Fue un conflicto armado que duró en realidad 116 años (1337-1453) entre los reinos de Francia e Inglaterra. Esta guerra fue de raíz feudal, pues su propósito no era otro que dirimir quién controlaría las enormes posesiones de los monarcas ingleses en territorios franceses desde 1154, debido al ascenso de Enrique II Plantagenet, conde de Anjou y casado con Leonor de Aquitania, al trono inglés. 

Tuvo implicaciones internacionales, con la participación de Inglaterra, Borgoña, Portugal y Bretaña en un bando y Francia, Castilla, Escocia, Génova, Mallorca, Bohemia y Navarra en el otro. Finalmente y después de innumerables avatares, se saldó con una victoria francesa y la retirada inglesa del continente con la excepción de Calais, que permaneció en manos inglesas hasta 1558. 

Orígenes del conflicto 

La rivalidad entre Francia e Inglaterra había comenzado ya en tiempos de la Batalla de Hastings, en la que el duque francés Guillermo de Normandía se adueñara de Inglaterra en 1066. Ahora los normandos eran reyes de una gran nación, y exigirían al rey francés ser tratados en consecuencia. Pero el punto de vista de Francia no era el mismo. Los duques de Normandía siempre habían sido sus vasallos, y el hecho de que hubiesen ascendido de su ducado a un alto trono en un país "lejano" no tenía por qué cambiar su sumisión tradicional a la corona de París. 

A mediados del siglo XII, los monarcas ingleses descendientes de los duques normandos fueron reemplazados, por matrimonio, por la dinastía francesa de los Plantagenet, condes de Anjou, que también poseían otros grandes territorios en el oeste y sudoeste de Francia. Tras el matrimonio de Enrique II de Inglaterra con Leonor de Aquitania llegaron a ser más poderosos que los propios reyes francos. A la muerte de Enrique lo sucedió Ricardo (conocido como Ricardo Corazón de León) pero éste murió el 25 de marzo de 1199; entonces ascendió al trono su hermano, el hijo menor de Enrique II de Inglaterra, Juan, muy débil, que no fue capaz de mantener los territorios de su padre. El rey de Francia Felipe II Augusto, invadió partes de sus territorios en una gran ofensiva que Juan no pudo rechazar. En 1204, Francia invadió Normandía y se quedó con todas las posesiones inglesas en tierras continentales, a excepción de Burdeos y Guyena, situadas en Aquitania, al oeste del reino. Por ello, los barones ingleses se reunieron con Juan en Runnymede, cerca de Londres, y el 15 de junio de 1215, sellaron la llamada Carta Magna. 
Juana de Arco liberando Orleans,
óleo de Jules Lenepveu, Panteón de París

Enrique III (1216-1272), ascendió al trono inglés siendo muy pequeño, trajo consigo un período de zozobras y temores, que desembocó en el catastrófico tratado de París en 1259. En él, Enrique renunciaba formalmente a todas las posesiones de sus antepasados normandos y a todos los derechos que pudieran corresponderle sobre la corona de Francia. Esto incluía la pérdida de Normandía, Anjou y todas sus demás posesiones en territorio continental, salvo Guyena y Aquitania, que había heredado por vía materna. Estas dos regiones quedaban sometidas al homenaje, una especie de pago, renta o tributo que Enrique otorgaría al rey francés para conservarlas. 





Árbol genealógico de los principales implicados




domingo, 13 de enero de 2013

Leonor de Aquitania - Abadía de Fontevrault

Nació en la ciudad de Poitiers, en el año 1122, siendo la mayor de los tres vástagos habidos del matrimonio entre Guillermo X, duque de Aquitania, y de Leonor de Châtellerault.


En 1130 murió su único hermano, Guillermo, convirtiéndose en la heredera de su padre. El 9 de abril de 1137, Guillermo X falleció en una peregrinación a Santiago de Compostela, y Leonor toma posesión del inmenso ducado de Aquitania, que se extendía desde el Loira hasta los Pirineos y era mayor que los entonces dominios directos del rey de Francia. 

El 4 de julio de 1137 contrajo matrimonio a los 15 años de edad en Burdeos, con Luis VII, futuro Rey de Francia, un año mayor que ella. Ese mismo año ascendieron al trono francés, a la muerte del rey Luis VI. Ocho años más tarde, en 1145, nace su primera hija, María, futura condesa de Champaña.


Las tensiones entre la pareja empezaron muy pronto, cuando la reina apoya el matrimonio ilegítimo de su hermana Petronila con el conde Raúl I de Vermandois, mientras que el rey enviaba a su hermano Roberto a invadir Vermandois en castigo por la bigamia del conde. Además, su comportamiento emancipado y liberal fue duramente criticado por la curia eclesiástica -especialmente por Bernardo de Claraval y el abad Suger- y, al parecer, por su propia suegra, Adelaida de Saboya. Pero nada de esto le importaba al soberano francés, que estaba locamente enamorado de su esposa.



En 1147, la joven pareja marchó a la Segunda Cruzada movidos por la predicación de Bernardo de Claraval. El rey no permitió de buen grado que su esposa lo acompañara, pero Leonor, en su calidad de duquesa de Aquitania, y por tanto la mayor feudataria de Francia, insiste en partir como los demás señores feudales.

Durante su estancia en Antioquía, la relación de la reina con su tío Raimundo de Poitiers, príncipe de la ciudad, dio lugar a toda clase de murmuraciones, que provocaron el alejamiento entre el rey y la reina. Luis obliga a su mujer a volver con él a la fuerza, aunque parten separadamente. En su camino a Francia, se detienen en Roma, donde el Papa trata de reconciliar a la pareja real -el resultado de la gestión papal fue su segunda hija, Alix, futura condesa de Blois, nacida en 1151-. Pero la pareja estaba irremediablemente distanciada: el 21 de marzo de 1152 consiguieron la anulación de su boda, basándose en el parentesco entre ambos. El precio que puso Leonor a esta separación fue la conservación de sus dominios.

Ubicación de Imperio angevino
El 18 de mayo de 1152 Leonor contrajo matrimonio, en la Catedral de San Andrés de Burdeos, con el que pronto sería Enrique II de Inglaterra, uniendo sus vastos dominios en Francia a los que ya poseía el heredero al trono inglés (dueño de Anjou, Maine y Normandía, además del Reino de Inglaterra y Gales). De este modo se formaba el llamado Imperio Angevino, en el cual los reyes de Inglaterra, aún siendo vasallos del rey de Francia, controlaban un territorio ocho veces superior al dominado por Luis VII. De este matrimonio nacieron ocho hijos, cinco varones y tres mujeres. En su corte, establecida principalmente en Poitiers, tuvo gran auge la lírica caballeresca, siendo Leonor mecenas de numerosos trovadores.

La existencia de una amante de Enrique II provocó el enfrentamiento entre Leonor y el rey, y a partir de 1173 Leonor promovió la rebelión de tres hijos del rey contra su padre. Tras reprimir la rebelión, el rey encarceló a Leonor, primero en Chinon y luego en Salisbury, donde permaneció bajo arresto hasta la muerte del rey Enrique en 1189.

Abadía de Fontevrault
La Abadía de Fontevrault (o Abadía de Fontevraud) se halla en Fontevraud-l'Abbaye, cerca de Chinon, en Anjou, Francia. Fue construida entre 1110 y 1119 y fundada por Robert de Arbrissel, quien había acabado de crear una nueva orden, la Orden de Fontevrault.
La abadía era un monasterio en el que vivían monjes y monjas. La orden llegó a ser un éxito internacional y llegó a haber muchas abadías al estilo de Fontevrault en Inglaterra. Robert de Arbrissel impuso que la dirección de la orden debería corresponder siempre una mujer y señaló a Petronila de Cheminé como primera abadesa. Fue sucedida por Isabel de Anjou, la tía de Enrique II de Inglaterra. Este fue el comienzo de una posición que atrajo a unas cuantas abadesas ricas y nobles a lo largo de los años, incluyendo miembros de la familia real francesa. En los primeros años en los que los Plantagenets eran grandes benefactores de la abadía y mientras Isabel de Anjou era abadesa, la mujer de Enrique II, Leonor de Aquitania estuvo alojada allí.

 Recuperada la libertad, Leonor se convirtió en regente de los dominios angevinos durante las ausencias de su hijo Ricardo. Tras la vuelta de este rey de la Tercera Cruzada, Leonor se retiró a la Abadía de Fontevrault. La muerte de Ricardo (Corazón de Leon) el 6 de abril de 1199 hizo que Leonor abandonara de nuevo su retiro hasta conseguir la coronación de otro hijo, Juan, relegando a su nieto, el duque Arturo I de Bretaña, al que prácticamente no conocía.

La orden fue disuelta durante la Revolución francesa.
La restauración de la abadía y la iglesia terminó aproximadamente en 2006. Su arquitecto fue Lucien Magne.
En 1200, y contando con casi 80 años, da muestras de una fortaleza impresionante cuando decide viajar hasta Castilla, cruzando los Pirineos, para escoger entre sus nietas, las infantas de Castilla -hijas de su hija Leonor y de Alfonso VIII de Castilla- a la que se convertiría en esposa del hijo de Felipe II Augusto, el futuro Luis VIII. La escogida sería Blanca, una de las reinas de Francia más célebres, regente del reino en tres ocasiones y modelo de virtud y habilidad política. 

Esta unión, motivó enfrentamientos posteriores entre Francia e Inglaterra, que culminarían en la Guerra de los 100 años.

Tumbas de Leonor de Aquitania y Enrique II de Inglaterra
 en el Monasterio de Fontevrault (Francia)