jueves, 27 de febrero de 2014

Fernando María de Wittelsbach - La Iglesia de los Teatinos - Palacio de Nymphenburg (Múnich) - La Residencia de Wurzburgo - Wurzburgo

(Múnich, 31 de octubre de 1636 - Oberschleißheim, 26 de mayo de 1679), fue Duque de Baviera y uno de los principales Electores del Sacro Imperio Romano Germánico desde 1651 hasta su muerte.Hijo primogénito de Maximiliano I, duque y elector de Baviera y de su segunda esposa María Ana de Austria, hija del Emperador Fernando II de Habsburgo. Sucede a su padre y es coronado el 31 de octubre de 1654. Su política, caracterizada por un espíritu absolutista, se transforma en un modelo para muchos estados germanos. Forma una alianza con Francia, avanzando en pretensiones sobre la corona imperial, lo que le condujo al conflicto con la propia Casa de Habsburgo.

Fernando María falleció en el Castillo de Schleissheim y lo sucede su hijo Maximiliano Manuel. Está sepultado en la cripta de la Iglesia de los Teatinos.

Fernando María de Wittelsbach 
Contrajo matrimonio con Enriqueta Adelaida de Saboya.

(Turín, 6 de noviembre de 1636 - Múnich, 13 de junio de 1676)

Hija del duque Víctor Amadeo I de Saboya y de su esposa Cristina María de Borbón, quien era hija del rey Enrique IV de Francia.

Su abuela materna era María de Médici, su abuela paterna Catalina Micaela , hija de Felipe II de España, y sus tíos, el rey Luis XIII de Francia y el duque Gastón de Orleans, sus tías eran la reina consorte de España Isabel de Borbón, primera esposa del Rey Felipe IV, y Enriqueta María de Borbón, reina consorte de Inglaterra, esposa de Carlos I.

De su matrimonio con Enriqueta Adelaida tuvo siete hijos.

Elector Fernando María y su esposa Enriqueta Adelaida, ´
pintura de Sebastiano Bombelli (1666)
Influencia

Enriqueta Adelaida tuvo una enorme influencia en las Relaciones Exteriores de Baviera, dirigiendo siempre a su pueblo hacia una política francesa. Esto aportó una alianza entre Baviera y Francia en contra de Austria.

La duquesa fue también una de las mayores promotoras de la construcción de la residencia real de Múnich, el Palacio de Nymphenburg y de la Iglesia de los Teatinos. Invitó a la corte de Múnich numerosos artistas italianos, que introdujeron en Baviera el amor por el Barroco y la Ópera Italiana.

Falleció en Múnich el 13 de junio de 1676.

La Iglesia de los Teatinos 

(Theatinerkirche St. Kajetan) en Múnich fue edificada entre 1663 y 1690, y fundada por el elector Fernando I María y su mujer, Enriqueta Adelaida de Saboya.



  • La iglesia se levantó en estilo barroco tardío italianizante, en la línea de San Andrés della Valle de Roma.
  • La cúpula, de 70,20 metros de altura y 17,70 metros de diámetro, se acabó en 1690
  • La fachada rococó fue acabada en 1768 por François de Cuvilles.
  • Su apariencia italiana y su color amarillo la han convertido en uno de los símbolos de la ciudad y han tenido mucha influencia sobre la arquitectura del Barroco en el sur de Alemania.





Palacio de Nymphenburg (Múnich)

El Palacio de Nymphenburg (en alemán: Schloss Nymphenburg) es un palacio de estilo barroco ubicado en la ciudad de Múnich, estado de Baviera, Alemania. Edificado para ser utilizado como residencia de verano de la familia Wittelsbach (gobernantes de Baviera), el palacio se erige en la parte oriental de la ciudad.
Con inmensos jardines y una disposición muy particular, su construcción data de los siglos XVIII y XIX y resulta especialmente notable el vestíbulo de piedra (Steinerner Saal) además de la llamada “galería de las bellezas”, donde se exhibe una colección de retratos de hermosas damas encargado por Ludwig I.



Dentro del palacio destaca el impresionante Steinerner Saal(Salón de Piedra), con frescos en el cielo de Johann Baptist Zimmermann y decoraciones de Cuvilliés. Haciendo las veces de un gran salón, ocupa más de tres pisos del pabellón central del palacio. Hay varias habitaciones que aun muestran su decoración barroca original mientras otras fueron redecoradas posteriormente en estilo rococó o neoclásico. El antiguo comedor del pabellón sur hoy alberga la Galería de Bellezas del rey Luis I. Allí se pueden ver treinta y seis retratos realizados por Joseph Stieler a elegantes damas de la sociedad muniquesa entre las que se encontraba su barragana, la bailarina Lola Montez. Igualmente digna de verse es la habitación en la que nació Luis II, el personaje más popular de la dinastía, primo y amigo de Sisí Emperatriz.




Además, contiene cuatro palacios en miniatura, uno de los cuales – el Amalienburg- es considerado como uno de los más bonitos del país. Es imprescindible la visita al Marstallmuseum, donde se aprecian pintorescos carruajes reales y elementos de equitación además de una extensa colección de porcelana Nymphenburg, desde 1747 a la década de los veinte.

 Amalienburg - Pabellón de caza
Carroza del rey Ludwig II de Baviera, restaurada en 1871. Marstallmuseum. Palacio de Nymphenburg.


El palacio de Nymphenburg alrededor de 1760, pintura de Canaletto

La Residencia de Wurzburgo 

Es una construcción perteneciente al Barroco situada en en la parte antigua de la ciudad alemana de Wurzburgo (Würzburg); se inició en 1719 y se concluyó en 1780.



Su función era principalmente servir de residencia a los obispos de Wurzburgo. El castillo forma parte de las obras más importantes del barroco alemán con una importancia comparable, a nivel europeo, con el Palacio de Schönbrunn en Viena y el Palacio de Versalles en París.


La Residencia de Wurzburgo, jardines de la corte y Plaza de la Residencia fueron declarados Patrimonio de la Humanidad en el año 1981. Según la página web de la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), este magnífico palacio barroco, uno de los más grandes y bellos de Alemania, y rodeado por maravillosos jardines, fue creado por el mecenazgo de los príncipes-obispos Lothar Franz y Friedrich Carl von Schönborn. Fue construido y decorado en el siglo XVIII por un equipo internacional de arquitectos, pintores (incluyendo a Tiépolo), escultores y estuquistas, dirigidos por Balthasar Neumann. 

La construcción de la residencia se inició bajo el mando de Johann Philipp Franz de Schönborn en 1719 que falleció a los cuatro años tras el inicio de la obra. El encargo lo recibió del obispo Balthasar Neumann que en ese momento contaba con una edad de 33 años. La construcción, tras el fallecimiento de Johann Philipp Franz de Schönborn, fue concluida en el año 1744. 

En el interior participaron entre otros Giovanni Battista Tiepolo (1750-53), Antonio Guiseppe Bossi y Johannes Zick.



La decoración del interior pasó por tres etapas. La primera se inicia todavía bajo el mando de Friedrich Carl. Bajo el mando de su sucesor Carl Philipp von Greiffenklaus se encargan y terminan las pinturas más famosas del edificio. Con la muerte de Greiffenklaus como encargado se finaliza la etapa del Rococó y la decoración se continúa con Adam Friedrich de Seinsheim en un estilo más sencillo, llamado Estilo Luis XVI. Finalmente se decoraron el cuarto conocido como "Ingelheimzimmer" (a partir de 1776) y el llamado "Cuarto verde" (a partir de 1778) en un estilo neoclásico. Esta última obra se llevó a cabo durante un periodo continuo de 60 años.



La construcción se realizó según un único plano, un hecho que es atípico para este tipo de construcciones. El plano surge de una síntesis que realiza Balthasar Neumann de las ideas y propuestas de una serie de arquitectos: Johann Maximilian de Welsch, Philipp Christoph de Erthal, Robert de Cotte, Gabriel Germain Boffrand, Anselm Franz y Johann Lucas de Hildebrandt. Especialmente este último ejerció una influencia 
  • Se dice que Napoleón calificó el palacio como el más bello de toda Europa.
Capilla Palatina de Wurzburgo
 Wurzburgo 

(En alemán: Würzburg, de Würz, Gewürz 'especia' y Burg 'burgo, ciudad, castillo') es una ciudad de Baviera (Alemania) capital de la Baja Franconia a orillas del Meno, antigua sede episcopal, y hoy ciudad universitaria con mucha animación y unos 130.000 habitantes.



Se encuentra a unos 70 minutos en tren de Fráncfort y Stuttgart y a 100 km de Núremberg. 

sábado, 22 de febrero de 2014

La Casa de Wittelsbach - Maximiliano I de Wittelsbach

Es una Casa Real europea y una dinastía alemana originaria de Baviera.

Blasón del escudo de los "Wittelsbach".

Orígenes

Bertoldo, margrave en Baviera (fallecido en 980), fue el antepasado de Otón I, conde de Scheyern (muerto en 1072), cuyo tercer hijo Otón II, conde de Dachau, adquirió el castillo de Wittelsbach (Burg Wittelsbach cerca de Aichach). En el año 1119 la dinastía se trasladó a dicho castillo, adoptando su nombre.

El conde Otón II fue el ancestro del conde palatino de Baviera, Otón IV (fallecido en 1156), cuyo hijo Otón I de Wittelsbach fue investido con el ducado de Baviera en 1180, a la caída del anterior duque de la casa güelfa, Enrique el León. Luis I de Wittelsbach, duque de Baviera, hijo del primer duque de la casa Wittelsbach (de ahí el ordinal, Otón I), adquirió el Palatinado en 1214.



Reinado en Alemania

La familia Wittelsbach fue una dinastía gobernante alemana de los territorios de Baviera desde 1180 hasta 1918 y del Palatinado Renano desde 1214 hasta 1805; en 1815 este territorio fue parcialmente incorporado a Baviera, que fue elevada a la categoría de reino por Napoleón en 1806.
La familia dio dos emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico: Luis IV (1314-1347) y Carlos VII (1742-1745), ambos miembros de la rama menor (bávara) de la familia, y un rey alemán con Roberto del Palatinado (1400-1410), un miembro de la rama principal (palatina).
La Casa de Wittelsbach se dividió en estas dos ramas en 1329: por el Tratado de Pavía, el emperador Luis IV dio el Palatinado a los descendientes de su hermano el duque Rodolfo I de Baviera, Rodolfo II, Ruperto I y Ruperto II. Rodolfo I se convierte de esta manera en el ancestro de la línea (Palatina) más antigua de la dinastía Wittelsbach, que retomó el poder en Baviera en 1777 después de la extinción de la línea (bávara) más joven, los descendientes de Luis IV.



Rama bávara

La rama bávara mantuvo el ducado de Baviera desde 1317 hasta su extinción en 1777. En 1623 los duques fueron investidos con la dignidad electoral en el Sacro Imperio, en detrimento de la rama palatina que fue sometida a la prohibición imperial por su intervención en el origen de la Guerra de los Treinta Años.Durante medio siglo, desde 1323 hasta 1373, la línea más joven de la dinastía también gobernó Brandeburgo, en el noreste de Alemania. Y en el sur, mantuvo el Tirol entre 1342 y 1363. Entre 1345 y 1432, gobernaron asimismo en Holanda y Henao, situados en el noroeste del Sacro Imperio Romano Germánico. Desde 1583 hasta 1761, la rama bávara de la dinastía dio príncipes electores y Arzobispos de Colonia y muchos otros obispos católicos del Sacro Imperio Romano Germánico.

El elector Maximiliano II Manuel de Baviera sirvió igualmente como Gobernador de los Países Bajos Españoles (1692-1706) y como Duque de Luxemburgo (1712-1714). 

Rama bávara: José Fernando de Baviera, Príncipe de Asturias era el heredero favorito de Inglaterra y los Países Bajos para suceder a Carlos II de Austria como gobernante de España. El propio rey de España hizo testamento a favor del joven para que fuese su sucesor. Pero, debido a la inesperada muerte de José Fernando en 1699, los Wittelsbach no pudieron alcanzar la corona de España por vía directa: Felipe V de Borbón era Wittelsbach por parte de madre.



Las 12 ciudades autónomas y los 24 distritos territoriales del País de Renania-Palatinado.

Rama palatina

La rama palatina conservó el Palatinado desde 1317/1329 hasta 1918 y gobernó también Baviera en 1777. Con la Bula de Oro de 1356, los Condes Palatinos fueron investidos con la dignidad electoral.

En 1619, el protestante Federico V de la rama principal de los Wittelsbach fue elegido rey de Bohemia por la nobleza bohemia alzada contra el emperador Fernando II de Habsburgo, pero fue derrotado por el católico Elector Maximiliano I de Baviera, el jefe de la rama menor bávara. A resultas de ello, además de perder momentáneamente la dignidad electoral (fue recuperada en 1648 con la derrota de la Casa de Habsburgo por la Paz de Westfalia), la rama palatina de los Wittelsbach perdió el Alto Palatinado a favor de la rama bávara. La línea palatina obtuvo asimismo el Ducado de Jülich y el Ducado de Berg.





Reinado fuera de Alemania

Con el duque Otón III, que fue elegido rey de Hungría con el nombre de Bela V 1305-1308, la dinastía Wittelsbach llegaría al poder por primera vezfuera del Sacro Imperio Romano Germánico.

Rama palatina
Cristóbal III, de la rama principal palatina, fue rey de Dinamarca, Suecia y Noruega 1440/1442-1448. La Casa Palatina-Zweibrücken contribuyó a la mornarquía sueca otra vez en 1654-1720 bajo Carlos X Gustavo, Carlos XI, Carlos XII y Ulrica Leonor.

Finalmente el príncipe bávaro Otón fue rey de Grecia 1832-1862.
La línea pretendiente de Jacobitas al trono escocés está actualmente dentro de la Casa de Wittelsbach. Franz, príncipe heredero de Baviera es reconocido por los jacobitas como Francisco II, rey de Escocia, Inglaterra e Irlanda (pretendiente al trono).

Maximiliano I de Wittelsbach 

(17 de abril de 1573- 27 de septiembre de 1651), llamado "el Grande", duque y príncipe elector del Sacro Imperio Romano Germánico. Su reinado estuvo marcado por la Guerra de los Treinta Años (1618-1648).

No debe confundirse con Maximiliano I, primer rey de Baviera.




Nacido en Múnich, fue el primer hijo de Guillermo V de Baviera y de Renata de Lorena. Fue educado por los jesuitas en la Universidad de Ingolstadt, comenzando a participar en el gobierno en 1591. Se convirtió en Duque de Baviera tras la abdicación de su padre en 1597.

El 6 de febrero de 1595 se casó en Nancy con su prima, Isabel Renata (1574-1635), hija del duque Carlos III de Lorena y de la princesa francesa Claudia de Valois. Sólo unos meses después de la muerte de Isabel Renata, Maximiliano se casó, el 15 de julio de 1635 en Viena, con la archiduquesa María Ana de Austria (1610-1665), su sobrina de 25 años, hija del emperador Fernando II de Habsburgo y de su hermana María Ana de Baviera (1574-1616). La motivación principal para este nuevo matrimonio no fueron tanto las razones políticas como la esperanza de conseguir un heredero. A diferencia de su anterior esposa, María Ana de Austria participó activamente en los asuntos políticos. 

Su primer matrimonio no le dejó descendencia, pero de su unión con María Ana nacerían:
  • Fernando María (1636-1679), sucesor de su padre y casado en 1652 con Enriqueta Adelaida de Saboya (1636-1676), y
  • Maximiliano Felipe Jerónimo (1638-1705)
Maximiliano se abstuvo de cualquier interferencia en la política alemana hasta 1607, cuando le fue confiado el deber de ejecutar la prohibición imperial contra la ciudad libre de Donauwörth, fortaleza protestante. Sus tropas ocuparon la ciudad en diciembre de 1607, haciéndose vigorosos esfuerzos para restaurar la supremacía de catolicismo. 

Algunos príncipes protestantes, alarmados por esta acción, formaron para defender sus intereses la Unión Protestante, hecho que fue contestado en 1609 con la creación de la Liga Católica, en la cual Maximiliano tomó una parte importante, convirtiéndose en jefe de los católicos alemanes. Bajo su mando fue puesto en pie un ejército para combatir a los protestantes, pero su política fue estrictamente defensiva, rechazando que la Liga se convirtiese en un instrumento en manos de los Habsburgo. 

Las disensiones con los demás miembros le obligaron a dimitir en 1616, pero el empeoramiento del problema protestante provocó su vuelta a la Liga aproximadamente dos años más tarde.

Rechazó convertirse en candidato al trono imperial en 1619 tras la muerte del emperador Matías.
Isabel de Lorena (1574 - 04 de enero de 1635), también Isabel Renata de Lorena, era una duquesa y electora consorte de Baviera. Ella era hija de Carlos III de Lorena de su matrimonio con Claudia de Valois.

María Ana de Habsburgo (en alemán Maria Anna von Österreich), (Graz, 3 de enero de 1610 - Múnich, 25 de septiembre de 1665), hija del Emperador Fernando II de Habsburgo y de su esposa María Ana de Baviera. Por lo tanto, era hermana del emperador Fernando III de Habsburgo, debido a ello también era tía del emperador Leopoldo I de Habsburgo y de la reina Mariana de Austria, (segunda esposa de Felipe IV de España y madre de Carlos II de España).

viernes, 21 de febrero de 2014

Hans Holbein el Joven - Los embajadores - La Virgen del burgomaestre Meyer

(Der Jüngere) (Augsburgo, 1497?1 - Londres, entre el 7 de octubre y el 29 de noviembre de 1543) fue un artista e impresor alemán que se enmarca en el estilo llamado Renacimiento nórdico. Es conocido sobre todo como uno de los maestros del retrato del siglo XVI.2 También produjo arte religioso, sátira y propaganda reformista, e hizo una significativa contribución a la historia del diseño de libro. Diseñó xilografías, vidrieras y piezas de joyería. Se le llama "el Joven" para diferenciarlo de su padre, Hans Holbein el Viejo, un dotado pintor de la escuela gótica tardía.


Nacido en Augsburgo, Holbein trabajó principalmente en Basilea como artista joven. Al principio pintó murales y obras religiosas y diseños para vidrieras y libros impresos. También pintó ocasionalmente retratos, destacando internacionalmente con retratos del humanista Desiderio Erasmo de Róterdam. Cuando la Reforma alcanzó Basilea, Holbein trabajó para clientes reformistas mientras continuaba sirviendo a patrones religiosos tradicionales. Su estilo gótico tardío fue enriquecido por las tendencias artísticas en Italia, Francia y los Países Bajos, así como por el Humanismo renacentista. El resultado fue una combinación estética única en sí misma.

Hacia 1515 Holbein el Joven y su hermano se instalaron como pintores oficiales en la ciudad de Basilea, Suiza, un centro de aprendizaje y del comercio de impresión y láminas.
En 1517, padre e hijo empezaron un proyecto en Lucerna (Suiza), pintar el interior y el exterior de los muros para el comerciante Jakob von Hertenstein. Los archivos de la ciudad muestran que el 10 de diciembre de 1517, le pusieron una multa de cinco libras por pelearse en la calle con un orfebre llamado Caspar, a quien multaron con la misma cantidad. Ese invierno, Holbein probablemente visitó la Italia septentrional, aunque no quedan registros de este viaje. Muchos estudiosos creen que estudió la obra de maestros italianos de frescos, como Andrea Mantegna, antes de regresar a Lucerna.
En 1519, Holbein regresó a Basilea. Su hermano desaparece de los documentos alrededor de esta época, y se cree que murió.

Durante este período en Basilea, pintó a La familia del artista, mostrando a Elsbeth, con los dos hijos mayores de la pareja, Philipp y Katherina, evocando imágenes de la Virgen con Niño y san Juan Bautista.

La familia del artista, c. 1528. Óleo y temple sobre papel, cortado y montado sobre tabla.
Museo de Bellas Artes
El historiador de arte John Rowlands ve esta obra como "uno de los retratos más conmovedores en el arte, de un artista, también, que siempre caracterizó a sus modelos con una compostura contenida"

Entre 1523 y 1526 aumentó su actividad como ilustrador, trabajando para el editor Johann Froben.

En 1523, Holbein pintó los primeros retratos del gran estudioso renacentista Erasmo, quien requería parecidos para enviar a sus amigos y admiradores por toda Europa. Estas pinturas hicieron de Holbein un artista internacional.

Erasmo de Rotterdam retratado por Hans Holbein el Joven en 1523.
Retrato de Erasmo de Róterdam, 1523. Óleo y temple sobre tabla,
National Gallery (Londres), en préstamo de Longford Castle
Holbein visitó Francia en 1524, probablemente para buscar trabajo en la corte de Francisco I. Cuando Holbein decidió buscar empleo en Inglaterra en 1526, Erasmo lo recomendó a su amigo el estadista y erudito Tomás Moro. "Las artes se están congelando en esta parte del mundo," escribió, "y él estaba de camino a Inglaterra a recoger algunos ángeles".

Inglaterra, 1526–1528
La austeridad preconizada por la Reforma se fue apoderando de la sociedad suiza y disminuyó el mecenazgo artístico, por lo que, a pesar de su prestigio, Holbein se vio obligado a marcharse a Inglaterra en busca de nuevos encargos.

Llegó a Londres en 1526 con cartas de presentación escritas por Erasmo de Rotterdam, entonces ya su amigo y protector, para importantes personajes de la época a los que habría de retratar y entre los que se incluye Tomás Moro. Éste le dio la bienvenida a Inglaterra y le encontró una serie de encargos. "Tu pintor, mi muy querido Erasmo," escribió, "es un artista maravilloso". Holbein pintó un famoso retrato de Moro y otro de Moro con su familia.

Retrato de Tomás Moro, 1527. Óleo y temple sobre tabla de roble, colección Frick, Nueva York .
Síntesis de su obra
Holbein alcanzó una gran fama gracias a sus retratos realistas de personas y grupos, el detallismo de la piel, el pelo, los ropajes y la ornamentación, así como el talento para representar con exactitud cada una de las diferentes texturas, que no disminuían ni iban en detrimento de las características esenciales y de dignidad de sus retratados. Tal fue el realismo de su obra que su influencia sobrepasó los límites de la pintura. La pintura del Cristo Sepultado causó gran influencia en el escritor ruso Fëdor Dostoyevsky, tanto así que lo inspiró en su novela El Idiota.
Cristo muerto de Holbein

  ”…vemos un cadáver como elemento principal, el cual  es de una absoluta crudeza. También observamos el lugar donde se halla el cuerpo que nos da como resultado un espacio lúgubre de reclusión y marginación, de tal forma vemos como Holbein renuncia a cualquier fantasía arquitectónica (…)”



Holbein también realizó miniaturas y contribuyó al gran arte renacentista de la pintura sobre vidrio con numerosos dibujos.

Miniatura con el retrato de Ana de Cléveris, por Hans Holbein el Joven, 1539. Acuarela sobre papel vitela. Actualmente se encuentra en el Museo de Victoria y Alberto.
Ana de Cléveris, 1539. Cuarta esposa de Enrique
Retrato de Enrique VIII (Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid)

Retrato de Eduardo VI de niño, c. 1538. Óleo y temple sobre roble,
National Gallery of Art (Washington), Washington D. C.

La Virgen del burgomaestre Meyer 
También conocida como Madona del burgomaestre Jakob Meyer o Madona de Darmstadt 
  • Encargo de Jakob Meyer zum Hasen
Aparecen en este cuadro el comitente, el burgomaestre de Basilea, Jakob Meyer, y su familia; a la derecha sus dos esposas (la difunta Magdalena Bär y Dorothea Kannengießer), y a la izquierda, con él, aunque no se sabe seguro, tradicionalmente se ha creído que sus dos hijos premuertos.
Se cree que se hizo para la capilla privada del donante, pero no se sabe seguro el motivo del encargo. Probablemente esté en relacionado con las creencias católicas de los Meyer. Al tiempo de pintarse, la reforma había sido generalmente aceptada, y probablemente Meyer quería reafirmar públicamente su fe católica.
  • Se trata del último encargo religioso de Holbein para Basilea.


Estilo
Holbein unifica la influencia del arte renacentista italiano con el retrato típicamente nórdico.
Las figuras están en una disposición comprimida. Los cuerpos están modelados como estatuas, lo que evidencia, según algunos autores, que Hans Holbein estudió en Francia esculturas como las de Michel Colombe. En el rostro dulce de la Virgen y los rasgos suaves del hijo mayor del donante se ve la influencia de Leonardo da Vinci.
Se produce un fuerte contraste entre la Virgen, figura idealizada, y el realismo e individualización en los miembros de la familia Meyer.


Los embajadores
El cuadro se llama en realidad Jean de Dinteville y Georges de Selve— es una pintura de Hans Holbein el Joven, actualmente en la National Gallery de Londres. Es una de las obras maestras del pintor y de la pintura en general.
Triplemente importante por sus resonancias históricas, por su riqueza simbólica y por su excelencia plástica, incluye un raro objeto en primer plano que fue algo misterioso durante mucho tiempo.

Fue en el siglo XX cuando un historiador del arte, Jurgis Baltrusaitis, descubrió que esta forma que ocupa el primer plano de la pintura es lo que se llama frecuentemente hueso de sepia, siendo de hecho una anamorfosis de un cráneo humano: esta pintura es una vanidad.
El cuadro
La pintura representa a Jean de Dinteville a la izquierda, embajador de Francia en Inglaterra en 1533, fecha de la realización del cuadro. A la derecha se encuentra su amigo, Georges de Selve, obispo de Lavaur, que ocasionalmente fue embajador ante el Emperador romano germánico, la república de Venecia y la Santa Sede. Ambos hombres, que observan al espectador de la obra, están acodados sobre un mueble con dos estantes sobre el que hay dispuestos varios objetos relacionados con el quadrivium, las cuatro ciencias matemáticas entre las siete artes liberales: la aritmética, la geometría, la música y la astronomía.


En el estante superior puede verse una esfera celeste, objetos de medición del tiempo y un libro, dispuestos sobre una alfombra roja con complicados motivos geométricos. En el estante inferior hay un globo terráqueo, dos libros, un laúd y cuatro flautas en un estuche.


El plano posterior está ocupado por una cortina de terciopelo verde con un pliegue en la esquina superior izquierda que apenas permite ver un crucifijo, que a menudo no se ve en las reproducciones debido a su posición en el margen. El suelo está pavimentado con círculos y cuadrados, destacándose una forma difícilmente interpretable, pero que salta a la vista en tanto que parece que se halle fuera del espacio de la pintura; se ha llamado a menudo el hueso de sepia.


Jean de Dinteville está ricamente vestido con un abrigo de piel, en la mano lleva una daga en su estuche, donde está grabada su edad (29 años), y en la cabeza una boina de donde está colgado un broche representando un cráneo. Del negro de su indumentaria destacan el rojo de sus mangas y una cadena dorada que pende de su pecho con una medalla decorada con un ángel, prueba de su pertenencia a la Orden de San Miguel. Georges de Selve está totalmente vestido de negro, envuelto en un abrigo de piel. 


En la mano derecha lleva un par de guantes y en la cabeza un tocado. De Selve se dedicó en lo esencial de su sacerdocio a trabajar por la reconciliación en el seno de la Iglesia. La pintura parece pues inmortalizar la toma de posesión de un embajador francés recientemente nombrado en la corte de Inglaterra y la visita que le hace por este motivo a su amigo. 

La primera mirada que se hace a la pintura, una obra prácticamente cuadrada, de más de dos metros de lado, induce dos reflexiones: los dos hombres retratados, sujetos del cuadro, no ocupan el centro; están desplazados a los lados, enmarcando como un joyero un conjunto de objetos que a primera vista parecen dispares; a sus pies se encuentra un objeto extraño que parece no formar parte de la pintura, y que en todo caso ocupa el primer plano, como si Holbein hubiera usado este retrato para realzar, de entrada, otra cosa que no son los personajes que dan su nombre a la obra, uno de los cuales, Dinteville, fue quien la encargó.


La pintura parece, pues, que abunda en símbolos, indicaciones ocultas, referencias; todo esto son  cosas normales en la pintura del Renacimiento, que intentamos identificar, traer a la luz.
El pavimento que está bajo los pies de los embajadores ha sido identificado como inspirado (con una importante simplificación) en dos pavimentos verdaderos que comparten un cierto parecido. El primero se encuentra en la abadía de Westminster  y el segundo en la Capilla Sixtina en este caso en un lugar simbólico, exactamente bajo la creación de Adán, el don de la vida por Dios a los hombres.
La extraña figura en primer plano, a veces llamada hueso de sepia, intrigó durante mucho tiempo a los analistas del cuadro. Nuestro afilado ojo de hoy en día, más habituado a la lectura de imágenes, nos hace adivinar que se trata de un cráneo muy deformado por una anamorfosis, aunque es probable que no hiciéramos una lectura tan inmediata. 
Señálese que este tipo de imágenes deformadas estaba de moda en la Inglaterra de los Tudor; la National Portrait Gallery de Londres posee por ejemplo un retrato de Eduardo VI de Inglaterra por William Scrots  que también contiene una deformación por anamorfosis que se corrige mirando la superficie del cuadro a través de un agujero en el marco.
Uso de una cuchara para corregir la deformación
Sin embargo esta deformidad también pudiera deberse a una licencia científica. Diversos historiadores del arte apuntan a que la forma de la calavera se debe a que el artista pintó el reflejo de la misma en la parte convexa de una cucharilla para el té.