sábado, 22 de febrero de 2020

(XL) (III) El placer de coleccionar arte - El imperio napoleónico (Mecenas de las ciencias y el arte) - Napoleón III - Eugenia de Montijo en los retratos de Winterhalter

(XL) (II) El placer de coleccionar arte - El imperio napoleónico (Mecenas de las ciencias y el arte) - Napoleón III - Eugenia de Montijo, pincha aqui

Pilar Eyre: "Eugenia de Montijo fue la española más influyente de su tiempo"
Él le fue infiel desde el viaje de bodas ¿le devolvió ella los cuernos?, le preguntaron. " No le afectaban –dijo porque no le amaba. Se casó sólo para ser emperatriz. Y le venía bien que se entretuviera para así ella poder mangonear en la política". Y ¿qué hizo para seducir a Napoleón III? A esta pregunta respondió que, aparte de unas cartas muy bien escritas (por Merimé), negarle acceso carnal antes del matrimonio. "¿Cómo se va a su habitación?", le preguntó él. "Pasando por la capilla, sire", dijo ella. "Fue el himen a cambio de una corona. Napoleón se casó con ella para obtener su virginidad. Así de simple".
"La señorita Eugenia de Montijo continúa siendo señorita?» Así se mofaba la prensa amarilla de la época (1853) de la española que Napoleón III había escogido para ser su esposa y emperatriz de Francia –dijo– , y ahora se escandalizan ustedes con la actual. Porque, a sus 27 años, Eugenia de Guzmán y Kirkpatrik, condesa de Teba, hija de los condes de Montijo, arrastraba fama de ser la aventurera más ambiciosa y falta de escrúpulos de Europa. Como escribió Próspero Merimée en Le Moniteur, aludiendo al poderoso atractivo sexual que Eugenia ejercía sobre los hombres: "La boda del emperador es el resultado de una erección y no de una elección".
Franz Xaver Winterhalter (1805-1873) fue un pintor y litógrafo nacido en la alemana Selva Negra, famoso por sus retratos de la realeza europea, destacando entre los más conocidos los que realizó con Sissí, Eugenia de Montijo, la reina Victoria o Isabel II como protagonistas.
Cuando viajó a París, con gran interés por parte de la reina de Francia María Amalia, se convirtió en pintor de moda. Su reputación como retratista frívolo hizo que los críticos lo rechazaran, pero nunca tuvo problemas económicos. No se vio jamás afectado por las caídas de las diferentes dinastías, que seguían recurriendo a él para inmortalizar sus egregias figuras.
La emperatriz Eugenia fue una de sus modelos favoritas, siendo su obra maestra ‘La Emperatriz Eugenia rodeada de sus damas de compañía’, correspondiéndole siempre ella con favores y una gran gratitud
El estilo de Winterhalter es lujoso, hedonista, disfrutando del retrato femenino que le dio muchas más memorables obras que los masculinos. Intimistas y tiernos, sus retratos eran la perfección absoluta tanto en los rostros de las protagonistas como en las pieles, las joyas, la textura de los tejidos que son casi sensibles al tacto. Cada retrato es una hermosa composición teatral en la que las pieles de marfil desprenden el aroma de exquisitos perfumes, y los sedosos cabellos se disponen en los más maravillosos peinados.
Se considera que Winterhalter pintaba en el lienzo directamente, sin estudios preliminares, con pinceladas rápidas, apretadas y cuidadosísimas, siendo él mismo quién decidía la pose y el vestuario de la modelo.
Eugenia de Montijo en los retratos de Winterhalter: Un icono del arte del siglo XIX

Eugenia, Emperatriz de Francia, portando a su hijo Eugenio Luis-Napoleón - Franz Xaver Winterhalter(1857) -Obra en paradero desconocido
La Emperatriz Eugenia de Montijo | S.M.I. Doña María Eugenia de Guzmán, Condesa de Teba - Franz Xaver Winterhalter (1862) - Fundación Casa de Alba, Madrid
Eugenia de Montijo - Winterhalter (1864) - Château de Compiègne
La belleza de Eugenia de Montijo era admirada y envidiada a la vez. Consciente de su papel como soberana, se preocupaba por dar una imagen impecable, acorde a su rango y posición, motivo por el que pasaba tardes enteras junto a su modisto favorito: Charles Frederick Worth.
La Emperatriz Eugenia - Franz Xaver Winterhalter (1854) - The Museum of Fine Arts, Houston
Nos la podemos imaginar en una tarde de verano, en su gabinete de palacio junto al gran modisto, decidiendo entre ambos qué tejidos serían los adecuados para el hermoso vestido que él había diseñado para ella. Un vestido -que luciría en el gran baile de gala que se iba a celebrar en el Palacio del Elíseo- compuesto por un cuerpo escotado, y una espectacular falda con 130 volantes. Tras pasar varias horas contemplando las muestras de encaje, las guarniciones, y los tejidos de muselina, reps, moiré, y sedas brocadas que Worth le había traído, finalmente se decanta por la delicada muselina y un tul de seda para los volantes, ambos de color blanco. Para los adornos, elige el encaje de Malinas, y cintas de gro de diversos anchos, todas en color malva (su color favorito).
Eugenia se deja aconsejar por Worth, sin embargo, ella siempre tiene la última palabra, pues sabe lo que le gusta y lo que mejor le sienta.
Fasto dinástico
El casamiento del emperador en 1853, seguido del nacimiento del príncipe imperial en 1856, obedecen a la voluntad de establecer una dinastía.
Para estos grandes momentos políticos y religiosos, el duque de Cambacérès, gran maestro de ceremonias, exhuma la etiqueta del Primer Imperio organizando celebraciones fastuosas, financiadas por el presupuesto del ministerio de la Casa del emperador.



Para el bautismo del príncipe imperial, cuyo padrino es el Papa, se gasta la increíble suma de 150 000 francos. Para esta ocasión se reutiliza la berlina de ocho caballos de la coronación del Carlos X y Notre-Dame de París es totalmente decorada por Viollet-le-Duc.

«¡Este bautismo bien vale una coronación!» habría dicho el emperador.

Retomando la antigua tradición según la cual la Ciudad de París debía ofrecer una cuna al futuro soberano, y como lo había hecho en 1811 para el rey de Roma, la municipalidad decide confiar en 1855 la composición del objeto a su arquitecto Baltard.


Victor Baltard (París, 10 de junio de 1805-ibídem, 13 de enero de 1874) fue un arquitecto francés que ejerció en París durante el Segundo Imperio.
En 1833 gana el Premio de Roma en el Escuela de Bellas Artes de París. De 1834 a 1838, se queda en Roma como pensionado de la Villa Médici. La Academia de Francia en Roma está entonces bajo la dirección de Dominique Ingres. A partir de 1849, se convierte en arquitecto de la ciudad de París.
Es particularmente célebre por Mercado de París que realizó entre 1852 y 1872. Este edificio fue derribado en 1972-73 a excepción de uno de los pabellones (el "Pabellón Baltard") que ha sido clasificado monumento histórico. A él se debe la restauración de diferentes iglesias.
Esta cuna, una de las más preciosas del siglo, es también uno de los más bellos muebles del Segundo Imperio debido a su originalidad y su fina elaboración. Los mejores artistas de la época trabajan en ella.


Cuna del rey de Roma (1811), de Jean-Baptiste-Claude Odiot, plata dorada, madreperla, terciopelo, seda y tul, Kunsthistorisches Museum, Viena
Está hecha de plata con oro, lleva incrustaciones de nácar, forrada de terciopelo, y un baldaquino de tul y seda que sostienen unos ángeles, a los pies un águila, abejas también símbolo del Imperio Napoleónico a los lados. Fue construida por los orfebres franceses Prudthon, Thomire, Odiot y Roguier.
Al príncipe le imponen los nombres de Napoleón Fancisco José Carlos, su padre le concede el título de rey de Roma
Cuna del Príncipe Imperial, otorgada por la ciudad de París a la emperatriz Eugenia en 1856 de Victor Baltard
La muerte del rey Jerónimo en 1860 y del duque de Morny – medio hermano del emperador – en 1865, dan lugar a ceremonias dinásticas y funerales grandiosos, en los Inválidos en el primer caso y en la iglesia de la Madeleine en el segundo.

Napoleón Eugenio Luis Juan José Bonaparte (en francés: Napoleón Eugène Louis Jean Joseph; París, 16 de marzo de 1856 - Ulundi, Natal, Sudáfrica, 1 de junio de 1879), considerado por muchos como Napoleón IV, fue el único hijo de los Emperadores de los Franceses, Napoleón III y su esposa Eugenia de Montijo. Recibió el título de Príncipe Imperial de Francia y el tratamiento de Su Alteza Imperial.
Hacia el final de su vida hubo rumores, no del todo falsos, que estaba enamorado de la infanta española María del Pilar, hija de la reina Isabel II de España. La emperatriz Eugenia de Montijo y la reina Isabel eran partidarias de este enlace, pero el príncipe Napoleón encontró la muerte durante la guerra contra los zulúes, donde fallece dos meses antes que la propia infanta, quien sucumbió a una meningitis.
María del Pilar de Borbón y Borbón, bautizada con los nombres de María del Pilar Berenguela Isabel Francisca de Asís Cristina Sebastiana Gabriela Francisca Caracciolo Saturnina1​(Madrid, 4 de junio de 1861 – Escoriaza, 5 de agosto de 18792​), fue una infanta de España por ser hija de Isabel II.
Aunque no se casó, María del Pilar estuvo enamorada del hijo de Napoleón III, Napoleón Luis.
La boda de Jean-Christophe Bonaparte y Olympia fue en París (19-10-2019). Él es descendiente de Napoleón Bonaparte y ella, de Maria Luisa, la princesa imperial con la que se casó en 1810.
Celebraciones y decorados efímeros
Incluso antes del restablecimiento del Imperio, Luis Napoleón Bonaparte desea realizar grandes celebraciones destinadas a marcar la instauración del nuevo régimen, invitando a los parisinos y a la población en general.
El emperador afirma la pompa del régimen mediante puestas en escena populares. El 15 de agosto, día de «San Napoleón», vuelve a convertirse en la fiesta nacional, como sucedía durante el Primer Imperio, y siguiendo la tradición se construyen en la capital grandiosos decorados efímeros.

Maison Belloir y Vazelle - Proyecto de carpa para una fiesta imperial - Musée d'Orsay, Dist. RMN-Grand Palais / Patrice Schmidt
Las grandes victorias militares también son una ocasión para realizar desfiles triunfales, como el del 14 de agosto de 1859, durante el regreso a París de las tropas del ejército de Italia, que desfilan bajo numerosos arcos triunfales, pórticos y banderas. Cien mil hombres desfilan desde la plaza de la Bastilla hasta la plaza Vendôme, donde se alquilan balcones para poder observar el paso del cortejo de zuavos heridos pero victoriosos.
También se utilizan decoraciones en madera y tela pintada para las inauguraciones de cada estación de tren y de cada nueva obra urbana.
Estos importantes momentos de celebración – verdaderos plebiscitos festivos – refuerzan la adhesión de los franceses al régimen.
Con idéntico fasto, la emperatriz inaugura el 16 de noviembre de 1869 el canal de Suez, gran obra del Imperio en el extranjero.

Las residencias imperiales
Pocos días después del golpe de Estado, Luis Napoleón Bonaparte abandona el palacio presidencial del Elíseo para instalarse en el palacio de las Tullerías, hogar de los reyes de Francia.
Una de sus primeras obras es la finalización del Louvre y de las Tullerías, espacios destinados a convertirse en residencia de los soberanos, en ministerio de Estado y en museo.


El palacio en 1842. (Pintura de Jean-Antoine-Siméon Fort)
En los antiguos palacios (Saint-Cloud, Fontainebleau, Compiègne), los soberanos se rodean de prestigiosos decorados históricos. La emperatriz Eugenia procura vivir en el lujo moderno, manteniendo vivo el espíritu de la reina María Antonieta, personaje que la fascina.


Canapé de estilo Luis XVI - Manufactura de Beauvais - © Collection du Mobilier national © Isabelle Bideau
La emperatriz se rodea de objetos del mobiliario real del siglo XVIII que consigue en tiendas de coleccionistas o en el Guardamuebles imperial. Los combina con suntuosas creaciones de talleres contemporáneos (Gobelins, Sèvres, Beauvais) o con las obras de los mejores ebanistas (Fourdinois), copias exactas de muebles de origen real o variaciones más libres de los estilos Luis XV y Luis XVI.

Al promediar su reinado, la emperatriz confía al arquitecto Hector Lefuel la construcción de un nuevo departamento, edificado en las terrazas del palacio de las Tullerías y decorado en ese estilo.


 L'Impératrice Eugénie à Compiègne et les dames de la 3ème série de 1856 sur la terrasse du palais
Esta moda, que es también la de toda una época, es tan distintiva del reino que el concepto de estilo «Luis XVI-Emperatriz» pasará a la historia.

Retratos de una sociedad
«La cantidad de retratos aumenta cada año y amenaza con invadir todo el Salón. La explicación es simple: las únicas personas que compran pinturas son las que desean hacerse un retrato», escribe el joven crítico Emile Zola, fustigando a una sociedad narcisista.


Napoleon III, c.1865 - Alexandre Cabanel
Alexandre Cabanel (Montpellier 28 de septiembre de 1823 - París 23 de enero de 1889) fue un pintor francés.
La fama le llegó con su lienzo Naissance de Vénus (el nacimiento de Venus), que fue adquirido por el emperador Napoleón III en 1863. Ese mismo año, fue nombrado profesor en la École des Beaux-Arts y fue elegido miembro de la Académie des Beaux-Arts.
Su obra fue especialmente conocida y reclamada por los coleccionistas internacionales y por las instituciones, y fue uno de los artistas preferidos de los emperadores Napoleón III y Eugenia de Montijo. Artista contrario al Naturalismo y al Impresionismo, y en particular enemigo de Édouard Manet, fue criticado a su vez por Émile Zola y los naturalistas, así como por todos aquellos que defendían la emergencia de un arte menos galante y más social y exigente.
A comienzos del Segundo Imperio, pocos artistas pueden rivalizar con las obras maestras de Ingres y de Winterhalter.

La gran odalisca (1814, 91 x 162 cm, Museo del Louvre)
Jean-Auguste-Dominique Ingres, más conocido como Dominique Ingres (Montauban, Tarn-et-Garonne, 29 de agosto de 1780-París, 14 de enero de 1867), fue un pintor francés.
Ingres no fue, en sentido estricto, neoclásico ni académico, sino un ferviente defensor del dibujo. Resulta a la vez neoclásico y romántico. Ingres constituye un claro exponente del romanticismo en cuanto a los temas, el trazo abstracto y las tintas planas de intenso colorido.​ Algunas de sus obras se enmarcan en el llamado «Estilo trovador», inspirándose en el ideal estético griego y gótico, además de en las miniaturas de los libros de horas de Fouquet.​ Igualmente, es ejemplo de orientalismo, pues muchos de sus cuadros, especialmente desnudos femeninos, están dominados por un sentido irreal del exotismo propio del siglo XVIII.
Eugenia, emperatriz de los franceses y sus damas de compañía, en 1855 Palacio de Compiègne. Tomando como inspiración las escenas bucólicas del siglo XVIII, esta composición monumental establece a la soberana y su séquito en el contexto de un claro en un bosque sombrío. Sin embargo, la composición es muy artificial y formal. La emperatriz, ligeramente a la izquierda del centro, está rodeada por el grupo y lo domina.
La emperatriz Isabel por Franz Xaver Winterhalter, (1865), con una creación del famoso modista Worth.
Isabel Amalia Eugenia Duquesa en Baviera (en alemán: Elisabeth Amalie Eugenie Herzogin in Bayern;​ Múnich, 24 de diciembre de 1837-Ginebra, 10 de septiembre de 1898) fue una princesa bávara conocida por haber sido emperatriz de Austria (1854-1898) y reina consorte de Hungría (1867-1898), entre otros muchos títulos inherentes a la Casa de Habsburgo-Lorena.
En la década de 1860, la nueva generación de pintores realistas – Manet, Tissot, Degas o Cézanne – ambiciona renovar el género, destacándose mediante retratos de cuerpo entero que elevan a sus modelos burgueses al rango de figuras históricas, mientras que Cabanel ofrece una imagen moderna e íntima del soberano, a menudo incomprendida.


Olympia es un cuadro realizado por el pintor francés Édouard Manet en 1863. Mide 130,5 cm de altura y 190 de ancho. Manet comenzó a trabajar en él en 1863 para presentarlo en el Salon des Refusés (Salón de los Rechazados) de ese mismo año. Sin embargo, la obra no se expuso hasta 1865, en el Salón de París, en donde causó un gran escándalo, ya que aunque el público y la crítica aceptaban los desnudos en obras mitológicas, no era así cuando se trataba de un desnudo realista. La modelo con su postura recuerda a obras de Tiziano (hacia 1485-1576), Velázquez, Goya y Jean Auguste Dominique Ingres.
Édouard Manet (París; 23 de enero de 1832-Ibídem; 30 de abril de 1883) fue un pintor y grabador francés, reconocido por la influencia que ejerció sobre los iniciadores del impresionismo.
En agosto de 1865 emprendió un viaje por España, organizado por su amigo Zacharie Astruc, en el que descubrió la pintura barroca española, en particular a Diego Velázquez, que tendrá una enorme influencia en su obra.
La recepción | James Tissot | 1885
James Jacques-Joseph Tissot (Nantes, Países del Loira; 15 de octubre de 1836-Chenecey-Buillon, Franco Condado; 8 de agosto de 1902) fue un pintor y grabador francés.
Luchó en la guerra franco-prusiana y, sospechoso de ser un Comunero, salió de París y se instaló en Londres. Allí estudió grabado con sir Seymour Haden, dibujó caricaturas para la revista Vanity Fair y pintó tanto retratos como temas del género.
En la década de 1870, conoció a una irlandesa divorciada, Kathleen Newton, quien se convirtió en su compañera sentimental y modelo de muchos de sus cuadros. La joven Newton se mudó en 1876 a la casa de Tissot, con quien vivió hasta su suicidio en la última etapa de la tuberculosis en 1882, a la edad de 28 años. Su relación, considerada un escándalo en la época, le hizo perder algunos de sus acomodados clientes.
Pasaron muchos años antes de que volviera a retomar plenamente su carrera con la producción de una serie de 700 acuarelas y dibujos ilustrando la vida de Cristo y el Antiguo Testamento. Luego de su regreso a París después de la muerte de Kathleen Newton, se trasladó a Palestina para tomar apuntes del natural para sus temas bíblicos.
En 1896 se exhibió en París una serie de 350 dibujos de pasajes de la vida de Cristo, y al año siguiente los mostró en Londres. Fueron publicados por la empresa de Lemercier en París, que le había pagado 1 100 000 francos por ellos (más de 500 dibujos, acuarelas y óleos pertenecen hoy a la colección del Museo Brooklyn).
Pequeña bailarina de catorce años, fundida en 1922. Museo de Arte Metropolitano, Nueva York.
Hilaire-Germain-Edgar de Gas, más conocido como Edgar Degas (París, 19 de julio de 1834-ibídem, 27 de septiembre de 1917), fue un pintor y escultor francés.
Considerado uno de los fundadores del Impresionismo, aunque él mismo rechazaba el nombre y prefería llamarlo realismo o arte realista,1​ Degas fue uno de los grandes dibujantes de la historia por su magistral captación de las sensaciones de vida y movimiento, especialmente en sus obras de bailarinas, carreras de caballos y desnudos. Sus retratos son muy apreciados por la complejidad psicológica y sensación de verdad que transmiten.
Plaza de la Concordia, 1875. Museo del Hermitage, San Petersburgo.
Los jugadores de naipes (1892-95). Courtauld Institute of Art, London. 4ª versión del mismo tema.
Paul Cézanne (Aix-en-Provence, 19 de enero de 1839 - Ib., 22 de octubre de 1906) fue un pintor francés posimpresionista, considerado el padre de la pintura moderna y cuyas obras establecieron las bases de la transición entre la concepción artística decimonónica hacia el mundo artístico del siglo XX, nuevo y diferente. Sin embargo, mientras vivió, Cézanne fue un pintor ignorado que trabajó en medio de un gran aislamiento. Desconfiaba de los críticos, tenía pocos amigos y hasta 1895 expuso solo de forma ocasional. Fue un «pintor de pintores», ​que la crítica y el público ignoraban, siendo apreciado solo por algunos impresionistas y al final de su vida por la nueva generación.
A principios de 2012 uno de los cuadros de la serie se convirtió en la obra de arte vendida por más dinero de la historia, al comprarla la familia real catarí a los herederos del magnate griego Yorgos Embiricos por más de 250 millones de dólares, aproximadamente 191,6 millones de euros.
Por su parte, los fotógrafos Nadar, Mayer y Pierson, se nutren de la tradición pictórica para ennoblecer sus modelos. El progreso técnico permite desarrollar una verdadera industria del retrato fotográfico (París posee trescientos cincuenta talleres profesionales a finales de la década de 1860) de la cual Disdéri, quien patenta en 1854 el formato «retrato-tarjeta», es el rey indiscutido.

Pintado, esculpido o fotografiado, público o privado, el retrato moderno oscila entre la sumisión a las convenciones sociales y la expresión libre del temperamento del artista y de su modelo.

Sarah Bernhardt (París, 23 de octubre de 1844-Ib., 26 de marzo de 1923) fue una actriz de teatro y cine francesa.
Gaspard-Félix Tournachon (París, 6 de abril de 1820-ibidem, 21 de marzo de 1910), más conocido como Nadar, fue un fotógrafo, periodista, ilustrador, caricaturista y aeronauta francés.
Por consejo de un amigo compró una cámara fotográfica que utilizó para recoger los retratos que habrían de servir de base de las caricaturas de su obra Panthéon Nadar, 1853, donde aparecieron grandes personajes de la política y la cultura del momento pertenecientes a su círculo de amistades, tales como Charles Baudelaire. Una foto que hizo a éste fue luego empleada como modelo por Manet para un grabado.
Pierre-Louis Pierson fue un fotógrafo francés (nacido en Héscinckange en 1822, fallecido el 22 de marzo de 1913)  fue el fotógrafo de la corte imperial francesa. Entre sus obras destacan los retratos de legisladores franceses aunque es más conocido por los cientos de fotos que tomó (a lo largo de décadas) a la condesa di Castiglione, Virginia Oldoini.
Pierson y la Castiglione: el juego de la locura 
La casona pompeyana y el estilo neogriego
La sociedad del Segundo Imperio teatraliza su marco de vida. Los interiores, espacios de representación, se convierten en escenarios en los cuales una burguesía embebida de romanticismo recrea sus fantasías del pasado o de lo extranjero.
Entre los estilos del momento, el gusto por la Antigüedad clásica y el estilo neogriego vuelven a ponerse de moda.


Gustave Boulanger - Ensayo del «Intérprete de flauta» y de la «Mujer de Diomedes» en casa del príncipe Napoleón
La casona pompeyana del príncipe Napoléon-Jérôme, primo del emperador, es un ejemplo perfecto de esta tendencia. Obra de arte total, la casona es construida en el número 18 de la avenida Montaigne por el arquitecto Alfred Normand para el príncipe y su amante, la actriz Rachel.


Jerónimo I Bonaparte  (Ajaccio, Córcega, Francia; 15 de noviembre de 1784 - Castillo de Vilgénis,​ Sena y Oise, Francia; 24 de junio de 1860) fue rey de Westfalia (1807-1813) y hermano menor del emperador Napoleón I de Francia.
Fue nombrado rey de Westfalia, reino de corta duración creado por Napoleón en los estados del noroeste de Alemania (1807-1813). Jerónimo se casó en segundas nupcias con la princesa Catalina de Württemberg con la que tuvo otro dos hijos varones, Jerónimo Napoleón Bonaparte (1814-1847) y Napoleón José Carlos Bonaparte (1822–1891), conocido también como el «príncipe Napoleón». Tuvo también una hija, Matilde Bonaparte (1820-1904), que se convirtió en anfitriona de la intelectualidad durante el Segundo Imperio Francés. Después de que se disolviera el reino, obtuvo el título de I Príncipe de Montfort.
Tras el destierro de su hermano, Jerónimo se trasladó a Italia donde contrajo matrimonio con Giustina Pecori-Suárez, viuda de un noble italiano, el marqués Luigi Bartolini-Baldelli.
Cuando su sobrino Luis Napoleón se convirtió en presidente de Francia en 1848, Jerónimo fue nombrado gobernador de Los Inválidos, en París, lugar en el que está enterrado su hermano mayor Napoleón I. Más tarde fue nombrado mariscal y presidente del Senado. Fue confirmado en su título de príncipe francés.
Hijo del arquitecto Louis Normand, Alfred Normand fue galardonado con el Gran Premio de Roma, en 1846; lo que le abre las puertas de la Villa Médicis, para una estancia de varios años, en la ciudad italiana. Desde 1778, la Academia de arquitectura pide a los residentes, que están bajo su autoridad, que realicen estudios de monumentos de la Antigüedad. Normand encuentra en Pompeya una de las principales fuentes de inspiración para estos trabajos. Como sus contemporáneos, descubre los vestigios de una Antigüedad en color y familiar, muy diferente de la frialdad de los templos antiguos. Dedica además su envío de tercer año a la Casa del Fauno. Pero también realiza numerosas fotografías de la Villa dormida, al final de su estancia, en 1851.
El interior sintetiza la visión, hasta entonces aproximativa, de los modelos griegos y pompeyanos. A pesar de la muerte de Rachel en 1859, la casona es inaugurada en 1860 durante una velada a la cual asisten soberanos y la princesa Mathilde, prima del emperador. Los actores de la Comédie-Française concurren allí para representar obras de Emile Augier y de Alejandro Dumas.

Matilde Leticia Guillermina Bonaparte, conocida como la «princesa Matilde», nació el 27 de mayo de 1820 en Trieste (Italia), y murió en París el 2 de enero de 1904.
Hija de Jerónimo Bonaparte, ex rey de Westfalia, y de su segunda esposa, Catalina de Wurtemberg, la princesa Matilde creció en Roma y Florencia, donde sus padres se encontraban exiliados. En 1835, a los 15 años, se prometió con su primo Luis Napoleón Bonaparte, el futuro Napoleón III. Su padre, que acababa de enviudar, había perdido gran parte de sus recursos, que procedían esencialmente de su suegro, el rey de Wurtemberg. Con vistas a la boda, Jerónimo Bonaparte compró para los novios, a crédito, el castillo de Gottlieben, cerca del castillo de Arenenberg, donde residían la reina Hortensia y su hijo. No obstante, la boda no llegó a celebrarse, debido en parte a la oposición del rey de Wurtemberg por el pasado carbonario de Luis Napoleón, pero también por las objeciones financieras planteadas por Luis Bonaparte, padre del novio.
Rápidamente abandonada por su comanditario debido a la reprobación de su joven esposa, María Clotilde de Saboya, el edificio es vendido en 1866, degradado durante la Comuna en 1871 y destruido en 1891.


María Clotilde de Saboya
La princesa Clotilde fue la hija primogénita de Víctor Manuel II (1820–1878), Rey de Cerdeña y del Piamonte, y después Rey de Italia, y de la archiduquesa Adelaida de Austria (1822–1855). Tuvo por hermanos a Humberto I, rey de Italia, a Amadeo I, rey de España, y a María Pía, reina consorte de Portugal.
Su marido: Napoleón José Carlos Pablo Bonaparte, Príncipe Napoleón (Trieste, 9 de septiembre de 1822 - Roma, 17 de marzo de 1891) fue un general francés, hijo del príncipe Jerónimo Bonaparte y de la princesa Catalina de Württemberg.
Reflejo del eclecticismo de la época, esta estrafalaria construcción lindaba con la casa morisca de Jules de Lesseps ubicada en el número 22 de la avenida Montaigne y con el palacio neogótico del arquitecto Jean-Baptiste Lassus en el número 20 de la misma avenida.

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