miércoles, 15 de noviembre de 2017

(II) LOS MEJORES DIRECTORES DE CINE - ¿Que era el toque Lubitsch? - Gary Cooper - Marlene Dietrich

(1) Ernst Lubitsch "El --toque--, el padre de la comedia", pincha aqui

¿Que era el toque Lubitsch?
Como decía su colega y admirador Billy Wilder, "durante veinte años todos nosotros intentamos encontrar el secreto del toque Lubitsch. De  vez en cuando, con un poco de suerte, lográbamos algún que otro metro de película que brillaba momentáneamente como si fuera de Lubitsch, pero no era realmente suyo". El toque Lubitsch era como el aroma de un buen vino que todo el mundo detecta y degusta pero que nadie acierta a explicar del todo. Estaba compuesto por un argumente elegante y sofisticado, por un refinamiento que se deslizaba a menudo hacia la ironía fina.

Refiriéndose a Lubitsch, Francois Truffaut escribió que para él lo esencial era no tratar nunca un tema de forma directo y que de lo que se trataba era de no contar la historia e incluso de buscar el modo de no contarla del todo, y añadía: si nos quedamos fuera de la puerta de una habitación cuando todo ocurre dentro, si nos quedamos en el “office” cuando la acción ocurre en el salón, y en el salón cuando tiene lugar en la escalera, y en el teléfono cuando sucede en la bodega, es porque Lubitsch se ha roto la cabeza para permitir a los espectadores construir por sí mismos, con él, el guión mientras ven la película proyectada. Truffaut remataba su razonamiento diciendo: En el Gruyere Lubitsch cada agujero es genial. Maestro en el arte de divertir a los espectadores haciéndoles descubrir a ellos mismos las cosas y convirtiendo el cine de participación, Lubitsch fue acusado a veces por sus actores de prestar más atención a las puertas que a ellos, cuando en una ocasión había declarado que las puertas son tan importantes como los actores. Pero no solo de jugar con puertas se trata, aunque la puerta es una perfecta metáfora de lo que constituía la esencia de su trabajo: adivina primero lo que está ocurriendo al otro lado y veamos después si acertaste.
En cada escena era tanto lo que se sugería como loo que se mostraba y, en muchas de sus películas, subyacía un erotismo tan sutil, que los censores nunca podían cortarlo, porque no se puede cortar un aroma.
Artista obsesionado por los misterios de las relaciones entre hombre y mujer, la guerra de los sexos se convertiría en el tema central de su obra.
Maestro absoluto de la elipsis, Lubitsch supo burlar las estúpidas normativas censoras de su tiempo (las de cualquier tiempo son igualmente estúpidas) recurriendo a una sugestiva manera de que el espectador reconstruyese con su imaginación cuando la moralina de la época le escamoteaba.

Ernst Lubitsch: el toque mágico de la sugerencia -- Als Ich Tot (1916)
Fue Billy Wilder quien dijo de Lubitsch que "era capaz de decir más con una puerta cerrada que un director moderno con una bragueta abierta"

Estupendo dialoguista y creador de situaciones comprometidas y picantes, que siempre resolvía con una elegancia insuperable, Lubitsch fue un creador que exigía un espectador que supiese leer entre líneas y apreciase el sabroso arte de reconstruir con su imaginación aquellas situaciones que Lubitsch dejaba apenas en boceto. Y es que Lubitsch, como inmenso artista del medio, establecía una comunicación entre el espectador y su arte como pocos directores han sido capaces de plantear, y mucho menos conseguir.
Se ha dicho que los conflictos sexuales y humanos son abordados por Lubitsch en sus comedias de una manera tan elegante, y que los modos y reacciones de sus personajes son tan finos, que sus películas no transcurren en este mundo, sino en un universo paralelo al nuestro llamado "Lubitschlandia"

 Billy Wilder - Nació el 22 de junio de 1906 en la ciudad polaca de Sucha, que entonces formaba parte del Imperio Austro-Húngaro.
¿Cómo lo haría Lubitsch? Mantra indiscutible de Billy Wilder. Su gran maestro, el padre de la comedia, aquel que le enseñó todo lo que sabía y a quién, según él, se pasó toda la vida intentando imitar, sin éxito. Todo empieza y acaba con Lubitsch. Todo empieza con "Ninotchka", su primera colaboración juntos, Lubitsch a los mandos, Wilder al bolígrafo.
Dice de él nuestro director de cine, Trueba: "Wilder era un Dios".
En su lápida reza la inscripción «Soy escritor, pero nadie es perfecto», en alusión al final de ‘Con faldas y a lo loco’. Sin embargo, en los años ochenta ya había dejado caer otro posible epitafio: «Quiero que se me considere un cínico de lengua ácida, no quiero parecer un blandengue».
Falleció el 27 de marzo de 2002 a los 95 años, víctima de una neumonía.
Fue con la llegada del sonoro cuando Lubitsch empezó a deslumbrar de verdad, por su brillante utilización de los diálogos, en títulos como El desfile del amor. Destaca también en el terreno del musical con Paramount on Parade. Tras El teniente seductor fracasa espectacularmente con el drama El remordimiento, por lo que decide centrarse en comedias como la especialmente memorable Un ladrón en la alcoba.

'Remordimiento', contra la estupidez de la guerra
El  21 de noviembre 2008 se puso a la venta 'Remordimiento', el único drama sonoro rodado por ese genio llamado Ernst Lubitsch.
'Remordimiento' es pura emoción, un drama que te mantiene todo el tiempo con un nudo en el estómago y que contiene uno de los mejores discursos antibelicistas que he visto nunca en una película; de una sencilla brillantez que te deja sin habla.
La historia de 'Remordimiento' ('Broken Lullaby' o 'The Man I Killed', 1932) se centra en Paul Renard, un joven soldado francés que vive atormentado por el recuerdo de haber matado, en el transcurso de la Primera Guerra Mundial, a un soldado alemán, Walter Holderlin. Desesperado, acude a Alemania para ver a la familia del soldado muerto y pedirles perdón, pero su voluntad se lo impide cuando conoce a los padres y la prometida del fallecido.
Remordimiento. Lubitsch. Escena 23, pincha aqui
Frantz, de Francoise OzonLa película es una adaptación que hace el director francés, Francois Ozon, de la película estadounidense “Broken Lullaby” (Remordimiento) de 1932, dirigida por Ernst Lubitsch.
2016
Una pequeña ciudad alemana, poco tiempo después de la I Guerra Mundial. Anna va todos los días a visitar la tumba de su prometido Frantz, caído en la guerra, en Francia. Un día, Adrien, un misterioso joven francés, también deja flores en la tumba. Su presencia suscitará reacciones imprevisibles en un entorno marcado por la derrota de Alemania.
El eje temático central es la idea del perdón, de la culpa y de la redención por el amor.
El segundo leit-motiv de la película es la idea de la mentira como vehículo para hacer digerible situaciones insuperables.
Frantz es una película de amor, estructurada a partir del sufrimiento por la pérdida del ser querido
Quien a su vez se había inspirado en la obra de teatro  L’homme que j’ai tué (El hombre que yo maté, 1925),  de Maurice Rostand.
Ozon comienza por la lectura de la obra de Rostand y descubre la película de Lubitsch.
Ozon es fiel al original, aunque varía el punto de vista. El punto de vista de Ozon es el de Anna, la novia del soldado muerto, alemana, que cobra centralidad.
Lubitsch lo hacía desde la perspectiva francesa, en 1932.
“Desde un principio, después de leer la obra de teatro, pensé en contar la historia desde el punto de vista de Anna. De esa forma se crea el suspense porque, al igual que el espectador, Anna no conoce los motivos de la visita de Adrien a Alemania”, relata Ozon.
Un ladrón en la alcoba - Ernst Lubitsch, pincha aqui

Lily (Miriam Hopkins), una carterista que se hace pasar por condesa, conoce en Venecia al famoso ladrón Gaston Monescu (Herbert Marshall), quien a su vez se hace pasar por barón, y se enamoran. Gaston roba al aristócrata François Fileba y huye con Lily antes de que le descubran. Casi un año después, en París, Gaston roba un bolso con diamantes incrustados a la viuda Mariette Colet, pero se lo devuelve y la cautiva de tal forma que lo contrata como secretario.
Tras la llegada de los nazis al poder, Lubitsch acaba nacionalizándose estadounidense. En 1935 se une a la actriz Vivian Gaye (con la que tendrá un bebé), tras divorciarse de Helene Kraus. Ese mismo año, le nombran supervisor de Paramount, cargo que aprovechó para dar trabajo a algunos compañeros que tuvieron que huir de Alemania. Enseguida deja el cargo y entra en su etapa de plenitud creativa, con sus películas más redondas, como Ángel, con Marlene Dietrich, como una mujer que tiene una aventura extraconyugal en París, o La octava mujer de Barba Azul, redondísima comedia con Claudette Colbert y Gary Cooper, que tenía como coguionista a Billy Wilder.

Vivian Gaye - Ernest Lubitsch

Ángel (1937), Ernst Lubitsch, pincha aqui


Marie Magdalene Dietrich, conocida por su nombre artístico Marlene Dietrich (Schöneberg, Berlín, 27 de diciembre de 1901 - París, 6 de mayo de 1992), fue una actriz y cantante alemana que adoptó la nacionalidad estadounidense. Es considerada como uno de los más eminentes mitos del séptimo Arte, y también como la novena mejor estrella femenina de todos los tiempos según el American Film Institute.
Maria es la esposa de Sir Frederick Barker, aristócrata británico que hace tiempo que no le presta atención. Enfadada, se va a París sin decírselo a su marido. Maria conoce allí a Anthony Halton, un americano con quien cena y visita los monumentos de la ciudad...
“Lubitsch era el mejor guionista que haya habido nunca. Recuerdo que en La octava mujer de Barbazul (1938) había una escena en el guión en la que Gary Cooper entra en una tienda en Niza y ve unos carteles. Uno de ellos dice: ‘Se habla español’, en otro pone: ‘Se habla inglés’. Lubitsch cogió un bolígrafo y escribió debajo: ‘Se entiende el americano’. Un chistecito que lo decía todo”, contaba Billy Wilder.
 La octava mujer de Barba Azul, en El Callejón de las Maravillas, pincha aqui

Michael Brandon es un millonario americano que ha ido a pasar unos días a la Costa Azul. Allí conoce a Nicole, hija de un marqués arruinado que intenta meter a Michael en un turbio negocio.Nicole se enamora de él y el día de la pedida de mano, con toda la familia reunida, descubre que no es la primera mujer en su vida, sino la octava.
Frank James Cooper, más conocido como Gary Cooper (Helena, Montana, 7 de mayo de 1901-Los Ángeles, California, 13 de mayo de 1961), fue un actor estadounidense de ascendencia inglesa. Ganó el premio Óscar en tres ocasiones; el último le fue concedido en reconocimiento a toda su carrera.
Su gran popularidad se basaba en su estilo sobrio y natural a la hora de actuar. Era alto y desgarbado, encarnando mejor que nadie al "americano ideal", hombre íntegro y caballeroso.
Mantuvo una buena amistad con Picasso y con Ernest Hemingway, con quien coincidió en el rodaje de Adiós a las armas.
Fue miembro de la asociación anticomunista de actores Motion Picture Alliance for the Preservation of American Ideals. Pero a pesar de tener ideas conservadoras evitó delatar a sus compañeros de profesión durante la famosa Caza de brujas.
Aunque tuvo muchos romances, sólo se casó una vez, con la actriz Verónica Balfe. En especial, mantuvo una fuerte relación sentimental con la actriz Patricia Neal, desde que rodaron juntos El manantial (The Fountainhead), en 1949, idilio que finalizó tras protagonizar la pareja la película El rey del tabaco (Bright Leaf, 1950), dado que la mujer del actor se negó a concederle el divorcio.
Murió el 13 de mayo de 1961, a los 60 años, víctima de un cáncer, como consecuencia de su adicción al tabaco.
En los años 40, Lubitsch acumula títulos memorables como El bazar de las sorpresas, o El diablo dijo no. Aunque su gran especialidad siguen siendo las críticas políticas, a través de ingeniosas sátiras. Le dan juego especialmente los totalitarismos: el comunismo (Ninotchka) y el nacionalsocialismo (Ser o no ser). También le sacó mucha punta a las costumbres tradicionales británicas en El pecado de Cluny Brown.

El film se inicia con la llegada al infierno del envejecido protagonista, Henry Van Cleve, quien está tan convencido de que no le aceptarán en el cielo que ni se ha molestado en probar suerte ahí. Sin embargo, el Diablo no conoce la razón por la que Van Cleve deba ir al infierno, así que le pide que le cuente la historia de su vida para poder juzgar si debe entrar o no. A partir de aquí se inicia un relato en flashback de la biografía de Henry Van Cleve centrado en su relación con las mujeres.
Como no podría ser de otra manera con Lubitsch, la vida de Henry Van Cleve nos es narrada a través de su relación con el amor comenzando por la divertida escena en que su madre y su abuela disputan por cuidarlo y acaban dejándole abandonado mientras se pelean. El momento más importante y que seguramente era especialmente importante para el director llega cuando un adolescente Henry es instruido en las nuevas reglas que rigen el mundo sexual de su época por una criada que, cómo no, es francesa. 
El diablo dijo no~español completa, pincha aqui

Cuando muere a los 70 años, Henry Van Cleve va al Infierno, donde lo recibe un caballero bien vestido que le exige que confiese sus delitos. Henry comienza entonces a contar su historia: desde niño, su acaudalada familia le proporcionó todos los lujos y satisfizo todos sus caprichos. Siendo ya adulto, llevó una vida disipada, entregado a la bebida y a las mujeres. Pero su vida cambió radicalmente el día en que conoció a Martha Strabel, la mujer de sus sueños. Tras escuchar su relato, el caballero le hace saber que en el Infierno no se aceptan personas como él. 
Ninotchka (Ernst Lubitsch, 1939). Guión de Billy Wilder (escena con el mayordomo), pincha aquí

Los camaradas Iranoff, Buljanoff y Kopalski han sido enviados a París para obtener dinero para el Gobierno ruso mediante la venta de las joyas confiscadas a la gran duquesa Swana, que vive en la capital francesa. Los tres camaradas se instalan en un hotel de lujo mientras los tribunales franceses deciden quién es el verdadero propietario de las joyas. El Gobierno ruso envía a Nina 'Ninotchka' Ivanovna Yakushova a arreglar las cosas.
Ser o no ser (1942) Ernst Lubitsch, película completa pincha aqui

Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Varsovia, durante la ocupación alemana. El profesor Siletsky, un espía al servicio de la Gestapo, está a punto de entregar una lista con el nombre de los colaboradores de la Resistencia. Joseph Tura, actor polaco, intérprete de Hamlet y esposo de María Tura, también conocida actriz, intentará evitarlo. Con la ayuda de los actores de su compañía, se hará pasar por el cruel coronel Erhardt y por Siletsky para entrar en el cuartel general de las SS. 
Continúo trabajando hasta su muerte en Los Angeles durante el rodaje de la opereta "La dama de armiño" 1948 que terminó Otto Preminger

Otto Ludwig Preminger (n. Wiznitz; 5 de diciembre de 1905 - f. Nueva York; 23 de abril de 1986) fue un director de cine estadounidense de origen judeo-austríaco.
Es considerado uno de los primeros directores que quebrantaron la censura en los Estados Unidos.
En total participó en alrededor de 30 películas como actor y 40 como director en su periodo alemán, y otras 30 películas solo como director en la etapa americana.
Opereta que narra dos historias paralelas que tienen lugar en el pequeño ducado italiano de Bérgamo: una ambientada en el siglo XIX, y la otra en el XVI. Como Lubitsch murió durante el rodaje, la película fue terminada por Otto Preminger. 
El 13 de marzo de 1947, Hollywood le dedicó un Oscar especial por toda su carrera. En el escenario sufrió un súbito dolor en el pecho. Logró recuperarse, pero ocho meses más tarde, el 30 de noviembre de 1947 otro ataque al corazón (según parece) un infarto poscoital (si sexto que le daba en los últimos años), acabó con él, después de hacer el amor con una candidata a actriz. Tenía 55 años.
“Nos hemos quedado sin Lubitsch”, le dijo Billy Wilder a William Wyler en su funeral. “Peor aún, nos hemos quedado sin las películas de Lubitsch”, replicó éste. Por desgracia, tenía razón y ya no se hacen películas como las suyas.
Premios destacados: Nominado al Oscar como mejor director en tres ocasiones por las películas "!El patriota" 1930, "El desfile del amor" 1930 y "El diablo dijo no" (1944), nunca lo ganó en competición.

1947 Oscar honorífico

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