lunes, 19 de agosto de 2019

(VIII) Egipto - Tierra de Faraones - - El templo de Sobek y Haroeris (Kom ombo) - Época ptolemaica - Período helenístico - Cleopatra VII

(VII) Egipto - Tierra de Faraones - El templo de Edfu, pincha aqui

Kom Ombo es una villa agrícola de Egipto de unos 60.000 habitantes, situada en la ribera oriental del río Nilo, cuarenta kilómetros al norte de Asuán y 165 kilómetros al sur de Luxor. Existe una numerosa población nubia procedente del sur, desplazada por la construcción del lago Nasser. El emplazamiento es conocido en la actualidad por su singular templo de época ptolemaica.



En su origen, fue un asentamiento llamado Nubt, del egipcio nbt, que significa "Ciudad de Oro". Por su situación, disfrutaba del control sobre las rutas comerciales que se dirigían desde Nubia a través del Valle del Nilo, si bien su importancia creció con la construcción del templo en el siglo II a. C.

En la época griega, la ciudad estaba en la Tebaida, y era la capital del nomo Ombita (el nomo I del Alto Egipto), en la ribera oriental del Nilo. Ombos fue una fortificación militar bajo todas las dinastías egipcias, con los faraones, hasta los ptolomeos y los romanos, y disfrutaba de mucha fama por la grandiosidad de sus templos y su tradicional enemistad con los habitantes de Tentyris (Dendera).
La dinastía ptolemaica fue fundada por Ptolomeo I Sóter, general de Alejandro Magno. Esta dinastía gobernó en el Antiguo Egipto durante el período helenístico desde la muerte de Alejandro hasta el año 30 a. C., en que se convirtió en provincia romana. También se le conoce con el nombre de dinastía lágida, pues Lagos se llamaba el padre (o presunto padre) de Ptolomeo I.
Ptolomeo I estableció la capital de este reino en Alejandría, un pequeño pueblo en aquella época que se transformó en el principal centro comercial e intelectual de la antigüedad.
Esta dinastía adoptó desde el principio las costumbres egipcias y fue una constante enemiga de la dinastía macedonia seléucida. Durante el reinado de uno de sus monarcas (Ptolomeo V) fue cuando se publicó (en el 197 a. C.) un decreto en tres tipos de escritura sobre una piedra negra que se conoce hoy en día como Piedra de Rosetta.
En algunos momentos de su historia, la dinastía dominó Cirenaica (al noreste de la actual Libia), así como el sur de Canaán y Chipre.
Su último gobernante fue Cleopatra VII. Tras su muerte y la de su hijo, Cesarión (Ptolomeo XV), la dinastía concluyó y Egipto fue anexionado por Augusto al Imperio romano.
Ptolomeo I Sóter (367 a. C.-283 a. C.), el Salvador, fue un general grecomacedonio al servicio de Alejandro Magno y uno de los tres diádocos que se disputaron el control de su extenso imperio. Ptolomeo se convirtió en gobernante de Egipto entre 323 y 282 a. C. y allí inició una dinastía, también conocida como Lágida,​ que controló el país del Nilo en los siguientes tres siglos. Egipto se convirtió así en un reino helenístico y la ciudad de Alejandría en uno de los centros de la cultura griega. Asimiló algunos aspectos de la cultura egipcia y se coronó como faraón en 305 a. C. , aunque este título tan solo lo usaba ante los ciudadanos egipcios, mientras que para los extranjeros se presentaba como basileus, tal y como se puede comprobar en las monedas que se acuñaron bajo su mandato.

Tetradracma
Ptolomeo V Epífanes  (210-181 a. C.) fue rey de Egipto desde los cinco años. Pertenece a la dinastía ptolemaica. Fue el último de los grandes reyes lágidas, tras él las luchas dinásticas y civiles (junto al intervencionismo romano) caracterizaron el fin de la dinastía ptolomeica.
Julio César realizó numerosas conquistas amorosas y utilizó en su propio beneficio, político o económico, a todas las mujeres que conoció
El general romano conoció a Cleopatra cuando, persiguiendo a su rival Pompeyo, llegó a Egipto. En el siglo XVIII, Tiépolo recreó el episodio en esta pintura. Museo Arkhangelskoye, Moscú.
Giambattista (o Giovanni Battista) Tiepolo (Venecia, 5 de marzo de 1696-Madrid, 27 de marzo de 1770) fue un pintor y grabador italiano, considerado el último gran pintor de la era barroca. Es una de las figuras más importantes del rococó italiano.
Julio Cesar (100-44 a. C.) fue un político y militar romano del siglo I a. C. miembro de los patricios Julios Césares que alcanzó las más altas magistraturas del Estado romano y dominó la política de la República tras vencer en la guerra civil que le enfrentó al sector más conservador del Senado.
Nacido en el seno de la gens Julia, una familia patricia de escasa fortuna, estuvo emparentado con algunos de los hombres más influyentes de su época, como su tío Cayo Mario, quien influiría de manera determinante en su carrera política.
Período helenístico (o alejandrino) es un término acuñado a mediados del siglo XIX por el historiador alemán Johann Gustav Droysen para designar el período histórico comprendido entre la muerte de Alejandro Magno (323 a. C.) y la de Cleopatra y Marco Antonio tras su derrota en la batalla de Accio (30 a. C.).
Escultura romana de Cleopatra con una diadema real, de mediados del siglo I a. C. (época de sus visitas a Roma en 46-44 a. C.) encontrada en una villa italiana en la Vía Apia, actualmente expuesta en el Altes Museum.
Consorte Ptolomeo XIII (posiblemente), Ptolomeo XIV, Julio César y Marco Antonio
Cleopatra Filopator Nea Thea, conocida como Cleopatra VII, fue la última reina de Egipto y con ella también terminó la dinastía Ptolemaica y la era Helenística de Egipto, que comenzó con Ptolomeo I Sóter, general de Alejandro Magno, casi dos siglos antes. Vivió desde pequeña la crueldad y la desconfianza, algo que la marcó para siempre. No en vano tuvo que huir con su padre a Roma, con tan sólo 11 años, para escapar de su hermanastra, que había matado a su madre y a su marido, para posteriormente arrebatarle el trono al padre de ambas. La bella egipcia, que estaba completamente decidida a ocupar el poder y devolverle a Egipto su antiguo esplendor, no dudó un solo momento en utilizar su inteligencia y sus armas de mujer para buscar los mejores aliados para la causa. El primero en caer en sus redes fue Julio César, el hombre más poderoso del momento, y a su muerte le sucedió Marco Antonio, que tampoco pudo evitar su embrujo.
‘Cleopatra y César’, óleo de Jean-Leon-Gerome pintado en 1866. (Public Domain)
Jean-Léon Gérôme (Vesoul, 11 de mayo de 1824-París, 10 de enero de 1904) fue un pintor y escultor francés academicista, cuyas obras son, por lo general, de tema histórico, mitológico, orientalismo, retratos y otros temas, con lo que lleva al Academicismo tradicional a un clímax artístico. Es considerado uno de los pintores más importantes de este período académico, y además de ser pintor y escultor, fue también un maestro con una larga lista de estudiantes.
Tras regresar a Egipto con su padre y un numeroso ejército con el que recuperaron de nuevo el trono, Cleopatra no podía arriesgarse de nuevo a ser apartada de su gran sueño y por ello, a la muerte de su padre, la que fuera última Reina de Egipto accedió al trono tras casarse con su hermano, Ptolomeo XIII. Pero nada salió como Cleopatra esperaba y tras enterarse de que su marido quería deshacerse de ella para reinar en solitario, huyó a Siria para salvar la vida. Al enterarse de que Julio César estaba en Egipto persiguiendo a su enemigo Pompeyo, viajó a escondidas desde Siria para poner en marcha un maquiavélico plan que ella creía que le devolvería el poder. En este momento es cuando tiene lugar uno de los encuentros más memorables de la historia, ya que se presentó ante él enrollada en una alfombra para entrar en palacio sin ser reconocida, con el único fin de ganar sus simpatías y salvar su vida recuperando a la vez el trono de Egipto. Julio César cayó rendido ante los encantos de Cleopatra, que no sólo era una mujer bella y sensual sino que, además, era una mujer muy culta, conocedora de nueve idiomas, interesada por la astronomía y amante de los libros que llenaban la Biblioteca de Alejandría. La historia cuenta que Cleopatra consiguió sus objetivos y que, tras pasar la noche juntos, César lo arriesgó todo para embarcarse en una Guerra Civil en Egipto y subir a Cleopatra al trono como una reina independiente. Eso sí, no pudo compartir con ella el esplendor del reino, ya que su acción fue desaprobada en Roma y allí acabó con su vida el propio Senado que juró protegerle. Fue realmente Marco Antonio el que conquistó el corazón de la mujer más poderosa de la época. Este apuesto militar y político romano de la época final de la República vivió una juventud disoluta, debido a la falta de autoridad paterna, hasta que entró al servicio de su tío Julio César. A él le ayudó a imponerse sobre la oligarquía romana durante la Guerra de las Galias y la Guerra Civil. Tras el asesinato de Julio César en el 44 a. C., Cleopatra, que había tenido un hijo suyo durante su estancia con él en Roma, vio peligrar su vida y no tuvo más remedio que regresar a Egipto para maquinar una nueva maniobra que la ayudara a mantener su poder.
A su llegada le ofrece a Marco Antonio la revelación de un mundo divino en la que ella es el centro, como una nueva Isis que se presenta ante el conquistador, un nuevo Osiris. Juntos formarían una pareja real capaz de resucitar la edad de oro y hacer renacer un Egipto digno de su grandeza y esplendor pasados. De esa manera Marco Antonio, por amor, abandonó no sólo sus obligaciones familiares sino también las políticas y militares, para vivir una fastuosa vida en Egipto llena de lujos con su amada Cleopatra. Cleopatra tampoco fue inmune a los encantos de Marco Antonio y ella también se enamoró de ese hombre fuerte y valiente que, aunque no tan inteligente como Julio César, le ofrecía todo su poder para mantenerla al frente de un reinado que, al menos en sus deseos, sería cada vez más próspero. Marco Antonio tuvo que regresar a Roma para casarse con Octavia, como parte del acuerdo político que intentaba lograr Octavio para que no se destruyera del todo el triunvirato. Con ella tuvo dos hijas, Julia Antonia la Mayor y Julia Antonia la Menor, pero ni siquiera ellas consiguieron hacerle olvidar a Cleopatra y, cuatro años después, repudió a su esposa y regresó a Egipto para reencontrarse con “su reina” y casarse con ella. El amor de la pareja se materializó en los tres hijos que nacieron fruto de su unión.
El final de estos amantes fue tan dramático y trágico como era de esperar y llegó de la mano de una terrible derrota en el campo de batalla, unida a un malentendido que, a la postre, resultó ser mortal. El enfrentamiento final de la llamada ‘Guerra Ptolemaica’ (32-30 a. C.), por la que Octavio Augusto llevó hasta Egipto su lucha contra Marco Antonio, se produjo en la batalla naval de Actium. En ella cayó derrotada la flota de Marco Antonio al ser abandonado por las tropas egipcias, aunque consiguió huir y refugiarse con Cleopatra en Alejandría.
Cuando Cleopatra, a la que Octavio Augusto pretendía llevar a Roma como botín de guerra, se enteró de la muerte de su amor quiso dejarse morir, rota de dolor por el amor perdido.
Cleopatra, negándose a la humillación de compartir el triunfo de Octavio, se vistió con sus mejores galas, pidió que su cuerpo fuese sepultado junto al de Antonio y se quitó la vida cumpliendo con el procedimiento ritual egipcio de hacerse morder por un áspid (una cobra egipcia). Corría la mitad del mes de agosto del año 30.a.C. y Cleopatra aún no había cumplido los cuarenta años de edad.
En venganza por no poder llevar prisionero a ninguno de los dos en su regreso triunfal, Octavio se llevó a los tres hijos de Marco Antonio y Cleopatra a Roma como trofeos de guerra. Allí se los entregó la viuda legal de Marco Antonio, Octavia, que además era su hermana, para que fuera ella la que los tutelara. Aunque de los varones no se ha sabido nada más, sí se conoce que Cleopatra Selene se casó con el rey africano Juba II de Numidia y estableció su residencia en Mauritania hasta su muerte. 
Algunos historiadores denominan período grecorromano de Egipto a la época que transcurre desde la entrada de Alejandro Magno en el país hasta las últimas fases de la dominación romana de Egipto, que concluye tras la muerte de Teodosio I el Grande.
Mapa de la máxima extensión del imperio de Alejandro, con hoja de ruta. Desde Grecia, mares Egeo y Mediterráneo, Asia Menor, Media, Egipto, Mesopotamia, Persia, Asia Central e India.
Alejandro III de Macedonia (Pela, Grecia; 20 o 21 de julio de 356 a. C. - Babilonia; 10 o 13 de junio de 323 a. C.),más conocido como Alejandro Magno o Alejandro el Grande, fue rey de Macedonia (desde 336 a. C.), Hegemón de Grecia, Faraón de Egipto (332 a. C), Gran rey de Media y Persia (331 a. C), hasta la fecha de su muerte.
En sus treinta y dos años de vida, su Imperio se extendió desde Grecia, hasta el valle del Indo por el Este y hasta Egipto por el Oeste, donde fundó la ciudad de Alejandría. Fundador prolífico de ciudades, esta ciudad egipcia habría de ser con mucho la más famosa de todas las Alejandrías fundadas por el también faraón Alejandro. De las setenta ciudades que fundó, cincuenta de ellas llevaban su nombre.
Teodosio el Grande (Cauca o Itálica, 11 de enero de 347-Milán, 17 de enero de 395), fue emperador de los romanos desde 19 de enero de 379, como Dominus Noster Flavius Theodosius Augustus, hasta su muerte, deificado como Divus Theodosius. Promovido a la dignidad imperial tras el desastre de Adrianópolis, primero compartió el poder con Graciano y Valentiniano II. El 15 de mayo de 392, Teodosio reunió las porciones oriental y occidental del Imperio, siendo el último emperador en gobernar todo el mundo romano. Después de su muerte, las dos partes del Imperio se separaron definitivamente. Con respecto a su política religiosa, continuó con la persecución a los paganos y tomó la trascendental decisión de hacer del cristianismo niceno o catolicismo la religión oficial del Imperio mediante el Edicto de Tesalónica de 380.
Los templos
Perduran dos templos, construidos con piedra obtenida de las canteras vecinas. El más notorio de los dos se yergue sobre una colina arenosa y parece haber sido una especie de Panteón dado que, de acuerdo con las inscripciones conocidas, le había sido dedicado a Haroeris (Apolo) y las demás deidades del nomo Ombita por los soldados acuartelados allí. El templo más pequeño, en el noroeste, estaba dedicado a Isis.

Ambos poseen una arquitectura imponente y todavía conservan los brillantes colores con los que los adornaron sus constructores. Datan de la época ptolemaica, con la excepción de una entrada de piedra caliza construida dentro de un muro de adobe. Constituía una parte de un templo construido por Tutmosis III en honor del dios, encarnado en cocodrilo, Sobek.

Estatua oferente del faraón Thutmose III. Museo de El Cairo.
Tutmosis III,es el sexto faraón de la dinastía XVIII de Egipto; gobernó de c. 1479 a 1425 a. C., (1504 a. C. al 1450 a. C. -según la High Chronology-)​ siendo uno de los monarcas más importantes y poderosos de los tres mil años de civilización faraónica. En el transcurso de su reinado, el Imperio Egipcio alcanzó su máxima extensión territorial.
Sobek: bajorrelieve del templo de Kom Ombo.
Sobek fue el dios cocodrilo, de carácter benéfico, creador del Nilo que habría surgido de su sudor; dios de la fertilidad, la vegetación y la vida en la mitología egipcia. Está relacionado con el punto cardinal Norte.

El templo de Sobek y Haroeris
El templo de Kom Ombo, conocido también como templo de Sobek y Haroeris está en ruinas, pero resulta imponente, especialmente por su ubicación, que lo hace destacar al lado del Nilo.



Fue excavado por Jacques de Morgan hacia 1893. Es un edificio inusual, completamente simétrico, con dos entradas, dos salas hipóstilas y dos santuarios. Esto se debe a que está dedicado a dos dioses: el lado izquierdo al dios halcón Haroeris (Horus el viejo o el grande) y el derecho a Sobek, divinidad local con cabeza de cocodrilo.

Lo comenzó a construir Ptolomeo VI en el siglo II a. C., siendo Kom Ombo capital del primer nomo del Alto Egipto, y lo terminó Ptolomeo XII en el siglo I a. C. El emperador romano Augusto le añadió el pilono de la entrada hacia 30 a. C. En el local hubo un santuario más pequeño de la época de Tutmosis II encontrándose vestigios que datan de la Dinastía XVIII (c. 1550 a 1300 a. C.)

Ptolomeo VI Filométor, "el que ama a su madre"  faraón perteneciente a la dinastía ptolemaica de Egipto que gobernó entre 181 y 145 a. C

Una estatua de piedra caliza del rey Ptolomeo XII, Encontrado en el Templo de Cocodrilo, Fayum. Museo grecorromano, Alejandría, Egipto
(h.112 – 51 a. C.) más conocido como Auletes (el flautista), y también como Nothos (el bastardo). Faraón de la dinastía ptolemaica del Antiguo Egipto (80 – 58 a. C. y 55 – 51 a. C.).
La planta, parecida a la del templo de Edfu, consta de un patio, dos salas (una de ellas, el pronaos) y tres vestíbulos (en vez de los dos de Edfu). Tiene, sin embargo, dos ambulacros (corredores) misteriosos (sólo hay uno en Edfu), dispuestos en tres lados, alrededor de las cámaras.

Kom Ombo. Detalle de columna con el cartucho de Tiberio.
Tiberio Julio César, nacido con el nombre de Tiberio Claudio Nerón;(16 de noviembre de 42 a. C.-16 de marzo de 37 d. C.), fue emperador del Imperio romano desde el 18 de septiembre del año 14 hasta su muerte, el 16 de marzo del año 37. Fue el segundo emperador de Roma y perteneció a la dinastía Julio-Claudia. Era hijo de Tiberio Claudio Nerón y Livia Drusila, miembro por tanto de la gens Claudia.
En 26 Tiberio se autoexilió de Roma y dejó la administración en manos de sus dos prefectos pretorianos Sejano y Quinto Nevio Cordo Sutorio Macro. Tiberio adoptó a su nieto Calígula para que le sucediera en el trono imperial.
El patio está en ruinas, con los muros laterales y el pilono destruidos. En las dos puertas que conducen al interior hay inscripciones y relieves con el nombre de Tiberio. A ambos lados de la doble puerta hay representaciones de Ptolomeo XII Neo Dionisio siendo purificado por Horus y Thot en presencia de Sobek (a la derecha) y de Haroeris (a la izquierda).


Desde él, dos puertas llevan a la primera sala hipóstila, el pronaos. En ella, hay grabadas escenas protagonizadas por Haroeris en el muro izquierdo y por Sobek en el derecho. Las columnas están talladas con lotos del Alto Egipto y papiros del delta del Nilo.

Delante del templo se encuentra el Mammisi, o templo del nacimiento de Horus, construido por Ptolomeo VIII Evérgetes II, muy deteriorado por la humedad del Nilo. La capilla de Hathor está también al sur del templo y en ella hay varios cocodrilos momificados que provienen de una necrópolis de cocodrilos próxima al templo. En el séptimo año de Domiciano fue decorado en honor de la diosa Hator, la Afrodita griega.
Ptolomeo VIII Evérgetes II​ (182 a. C. – 26 de junio de 116 a. C.), apodado Fiscón (barrigón) por su obesidad, fue faraón de la dinastía ptolemaica de Egipto en 170 a. C. - 163 a. C. y 145 a. C. - 116 a. C..
Mammisi romano en Dendera
Mammisi (en idioma copto lugar de nacimiento​) es un término arquitectónico ideado por Jean-François Champollion en el siglo XIX para denominar las casas de nacimiento divino, Per-Mes en antiguo egipcio, edificios singulares vinculados a los templos egipcios. Los ejemplos más célebres se pueden aún visitar y se datan, la mayoría, en las épocas ptolemaica y romana.
Era costumbre dedicar el templo a una tríada de dioses, padre-madre-hijo, ya que el mammisi era una versión arquitectónica del mito del nacimiento divino y su eterna repetición: matrimonio, nacimiento, crianza y entronización del sucesor.

En su forma desarrollada y conocida, el mammisi más antiguo es el que construyó el faraón de la dinastía XXX, Nectanebo I, en Dendera. 
Retrato del autor. Léon Cogniet (1831). Museo del Louvre
Jean-François Champollion, conocido como Champollion el Joven (Figeac, departamento de Lot; 23 de diciembre de 1790-París, 4 de marzo de 1832), fue un historiador (lingüista y egiptólogo) francés, considerado el padre de la egiptología por haber conseguido descifrar la escritura jeroglífica gracias principalmente al estudio de la piedra de Rosetta. Se doctoró en Historia Antigua por la Universidad de Grenoble.
Nectanebo (nombre griego), fue el primer faraón de la dinastía XXX, durante el periodo tardío de Egipto. Reinó de aproximadamente 378 a.C. a 361 a.C.  a. C., la citada Crónica Demótica le atribuye dieciséis años de reinado. Se trata de uno de los últimos faraones de origen egipcio.
Esfinges del dromo del templo de Luxor, de época de Nectanebo I.
Tito Flavio Domiciano (Roma, 24 de octubre de 51-ibídem, 18 de septiembre de 96), comúnmente conocido como Domiciano, fue emperador del Imperio romano desde el 14 de octubre de 81 hasta su muerte el 18 de septiembre de 96. Fue el último emperador de la dinastía Flavia, la cual reinó sobre el Imperio romano desde el año 69 hasta el año 96 y abarcó los reinados de su padre, Tito Flavio Vespasiano (69-79), de su hermano mayor Tito (79-81) y finalmente el suyo propio (81-96).
Caracalla (188-inmediaciones de Edesa, 217), fue un emperador romano (211-217) de la dinastía de los Severos, con el nombre oficial de Marco Aurelio Severo Antonino Augusto (Marcus Aurelius Severus Antoninus Augustus). El sobrenombre de «Caracalla» hace referencia a una capa larga de origen galo cuyo uso introdujo en Roma; aunque dicho sobrenombre nunca se utilizó oficialmente, es por el que se le conoce en toda la historiografía.
El Imperio romano en 210.
Al norte del templo se encuentran los restos de una capilla dedicada a Sobek, construida por Caracalla. También hay unas ruinas coptas.


Museo del Cocodrilo
En las proximidades del templo se encuentra el denominado Museo del Cocodrilo (The Crocodile Museum) donde se exponen esculturas y momias de época del Antiguo Egipto, relacionadas con el dios Sobek, halladas en diversas excavaciones. Fue inaugurado en enero de 2012. 

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