domingo, 14 de noviembre de 2021

IX - Júpiter (Zeus) - Juno (Hera) - Saturno - Ónfalo - Pausanias - Olimpia - El Templo de Zeus Olímpico en Olimpia - El templo de Hera en Olimpia

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Juno (mitología)

En la mitología romana, Juno era una diosa, equivalente a la Hera griega, diosa del matrimonio y reina de los dioses. Hija de Saturno y Ops, hermana y esposa de Júpiter, con el que tuvo dos hijos, Marte y Vulcano y una hija, Lucina. Juno fue una deidad mayor de la religión romana y formó parte, junto a Júpiter y Minerva, de la Tríada Capitolina, un importante culto romano. En la mitología romana Juno representa a la maternidad.


Saturno devorando a su hijo, de Peter Paul Rubens (1636)

Saturno  es un dios de la agricultura y la cosecha de la mitología romana. Fue identificado en la Antigüedad con el titán griego Cronos.

Saturno obtuvo de su hermano mayor Titán el favor de reinar en su lugar pero puso una condición: «Saturno no debía criar hijos». Se casó con Ops (Rea), con quien tuvo varios hijos, pero por causa del pacto que había suscrito con su hermano decidía devorarlos. Ops ocultó a Júpiter.

Con Ops es padre de Juno, Júpiter, Neptuno, Plutón, Ceres y Vesta. También fue padre de Veritas y Pico, aunque se desconoce el nombre de la madre.

Durante tres años a partir de 1642, Claes Berchem se instaló en Italia donde se interesará por la escuela clasicista. En ese tiempo realizará estudios y bocetos que le servirán de inspiración a su regreso a Amsterdam, creando un estilo totalmente contrario a Rembrandt y sus discípulos. Las escenas mitológicas y los paisajes pintados por Berchem le convierten en uno de los más destacados pintores "italianizantes" de su generación. En este lienzo se nos presenta a Cibeles cuidando a escondidas a su hijo Zeus ya que su padre, Saturno, devoraba a todos sus descendientes porque el oráculo había pronosticado que sería derrocado por uno de sus hijos. Zeus consiguió crecer y al final acabó con el tirano reinado de su padre y se convirtió en el padre de los dioses olímpicos. La bella figura de la diosa, con sus carnes blanquecinas, contrasta con la tonalidad oscura de la vaca y su propio esposo, creando contrastes lumínicos gracias a la luz cálida y dorada que aplica el artista. Las figuras se encuentran ante un paisaje proyectado en profundidad por la zona izquierda, obteniendo un ambiente idealizado de gran belleza.

La Cabra Amaltea es una escultura barroca de Gian Lorenzo Bernini. Bajo el patrocinio del cardenal Borghese, sobrino del papa Pablo V, sus primeras obras eran piezas para decorar los jardines del cardenal. Esta obra destaca por ser la primera de Bernini, realizándola con tan solo 18 años.
El mito de la cabra Amaltea es una leyenda heredada de la mitología griega y, posteriormente adaptada por los romanos, que dicen que Amaltea es la cabra que alimentó con su leche a Júpiter, el dios Zeus en la mitología griega como un niño y que jugando con ella, el pequeño dios había roto uno de sus cuernos. En agradecimiento al cuidado desinteresado que tuvo con él, Júpiter transformó este cuerno en cornucopia, que es el cuerno de la abundancia, como un símbolo asignado a la mayoría de personificaciones romanas, el cual es visible en los reversos de las monedas.

Ónfalo

El ombligo ha sido, desde tiempos remotos en el Viejo Mundo, el símbolo del centro. A partir de ese centro se creía que se había realizado la creación del mundo. Se sabe de la existencia de este símbolo en muy diversos pueblos. Su colocación en un lugar escogido otorgaba su sacralización y lo convertía en el centro del mundo. El historiador y geógrafo griego Pausanias escribió sobre el ónfalo y decía de él que era el símbolo del centro cósmico donde se crea la comunicación entre el mundo de los hombres, el mundo de los muertos y el de los dioses

El ónfalo (del griego antiguo ὀμφαλός omphalós, 'ombligo') es un antiguo betilo o artefacto pétreo de uso religioso originario del ádyton del oráculo de Delfos, en la Antigua Grecia. Según la mitología, sería la piedra (según algunas versiones, la misma que su padre Crono había engullido en su lugar) dejada por Zeus en el centro (ombligo) del mundo.

Pausanias, fue un viajero, geógrafo e historiador griego del siglo II de la era común (c. 110-180), contemporáneo de los emperadores romanos Adriano, Antonino Pío y Marco Aurelio.

Es reconocido por su extensa obra Descripción de Grecia que describe la antigua Grecia a partir de sus propias observaciones; y en la cual proporciona información crucial para establecer vínculos entre la literatura clásica y la arqueología moderna.

Cronos (Saturno) era el más jóven de los Titanes, hijos de la Madre Tierra y Urano (la tierra y el cielo). Urano, odiaba a sus hijos y los escondió en la Madre Tierra causándole gran dolor. Como venganza fabricó una hoz para Cronos y le convenció de que diese muerte a su padre. Cuando cumplió sus deseos, se desposó con su hermana Rea, pero temeroso de que sus propios hijos se levantasen en su contra, se los tragaba en cuanto nacían: primero Hestia, luego a Deméter, Hera, Hades y Posidón. Sin embargo, cuando Zeus, su sexto hijo, estaba por nacer, Rea lo alumbró en el silencio de la noche y lo confió a los cuidados de su madre, la Madre Tierra. En lugar de entregarle al bebé, le dió a Crono una piedra para que se la comiera. Cuando Zeus creció, pidió ser el copero de Cronos.. le preparó pues a su padre una poderosa sustancia que le hizo vomitar a la piedra y a sus otro cinco hijos mayores. Zeus, luego condujo a sus hermanos a la guerra contra los Titanes, a los que vencen y destierran al Tártro, en el mundo subterraneo. En adelante, Zeuz reinaría como el jefe supremo de los dioses.

Juno y Júpiter: El mito de amor
Como esposa de Zeus, Hera se convirtió en la protectora del amor conyugal, la familia y las relaciones legítimas, así como, por extensión, del hogar y de todos los que lo habitaban. La importancia que tuvieron en el mundo antiguo de elementos como las estructuras familiares ordenadas o la fertilidad femenina explican que los cultos dedicados a Hera sean de los más antiguos que hemos documentado en la historia de Grecia.

Zeus de Esmirna, desenterrado en el año 1680 (Louvre). (S.II)
En la mitología griega, Zeus es una divinidad a la que se denomina a veces con el título de «padre de los dioses y los hombres», que gobierna a los dioses del Olimpo como un padre a una familia, de forma que incluso los que no eran sus hijos naturales se dirigen a él como tal. Es el rey de los dioses y supervisa el universo.​ Es el dios del cielo y el trueno y por ende de la energía. Entre sus atributos se incluyen el cetro y la corona (como símbolos de su poder), el rayo, el águila, el toro y el roble. 

 
 
 
 
 
 
 
Urano
 
 
 
Gea
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Rea
 
Crono
 
Otros Titanes
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Hera
 
Poseidón
 
Zeus
 
Hades
 
Hestia
 
Deméter
 

Zeus era hermano y marido de Hera, con quien tuvo a Ares, Hebe y Hefesto, aunque algunas fuentes dicen que Hera tuvo a Hefesto sola. 

Olimpia es un sitio arqueológico situado en la unidad periférica de Élide, en Grecia. En la Antigüedad era la sede de un importante santuario y además el lugar donde se celebraban los Juegos Olímpicos. Se encontraba al pie del monte Cronio y en el lado derecho del río Alfeo.


Además de por su santuario, Olimpia fue célebre desde la Antigüedad por haber sido la sede de los Juegos Olímpicos, que se celebraban cada cuatro años y tenían una importancia comparable a los Juegos Píticos que se celebraban en Delfos. Los primeros de los que se tiene constancia se celebraron en 776 a. C.

En el periodo clásico se construyó el templo de Zeus, con su gigantesca estatua de oro y marfil de Zeus hecha por Fidias, la cual era considerada una de las Siete Maravillas del Mundo. Cerca del templo de Zeus, excavaciones arqueológicas han encontrado el taller de Fidias, con numerosas herramientas del escultor.

El Templo de Zeus Olímpico en Olimpia, construido entre los años 470 y 456 a. C., fue el modelo de los templos clásicos griegos de orden dórico.​ El templo se alzó sobre el santuario más famoso de toda Grecia, que había sido dedicado a las deidades panhelénicas locales y probablemente se había establecido hacia fines del período micénico. Era, en su momento, el Templo Griego más importante de la Grecia Antigua.

Se trata de un templo de orden dórico, períptero hexástilo (con seis columnas en la fachada y trece a los lados) que consta de pronaos, naos o cella y opistódomos.
Todas las columnas se construyeron de piedra caliza local, estucada con polvo de mármol blanco para dar la impresión de mármol. Eran las columnas de mayor tamaño de Grecia, cada columna medía 10,53 metros de alto, 2,25 metros de diámetro en la base y 2,65 metros en los capiteles.

Ilustración efectuada en 1908 de la posible apariencia del templo en el siglo V a. C
Planta del templo de Zeus en Olimpia.

Sitio Arqueológico de Olimpia - Se encuentra en la provincia de Élide, en la zona noroccidental de la Península del Peloponeso, a orillas del caudaloso río Alfeo, en cuya orilla norte se encuentra la pequeña elevación del monte Crónico (de Cronos, padre de Zeus). - Está rodeado por un gran bosque de pinos y consta de: - «Altis» o recinto sagrado, que contenía los templos y los edificios relacionados con la administración de los Juegos. - Zona deportiva, dispuesta en forma de U alrededor del «Altis», que contenía espacios destinados a los atletas, para que pudieran alojarse, entrenar y competir (palestra, estadio, hipódromo, gimnasio, etc.).

Con sus dimensiones de 64,12 x 27,68 metros el Templo de Zeus en Olimpia es el mayor templo de todo el Peloponeso.
El Templo de Zeus fue construido por el arquitecto Libón de Élide en el Siglo V a.C. (entre los años 470-457 a.C.) en honor de Zeus Olímpico, con el botín conseguido por los Eleos en la guerra contra Pisa y Trifilia.

El visitante después de cruzar el «pronaos» entraba en la «cella» donde se encontraba con la grandiosa estatua crisoelefantina de Zeus Olímpico de doce metros de altura realizada por el genial Fidias, una de las siete maravillas de la antigüedad.
Interior del Templo de Zeus con la magnífica estatua crisoelefantina de Zeus Olímpico

Casi todas las columnas están caídas por el recinto del templo, pero se conserva prácticamente intacta la decoración escultórica de sus doce metopas y sus dos frontones, esculpidos en mármol. Las doce metopas del templo representan los doce trabajos de Hércules. El frontón oriental representa la mítica carrera de carros entre Pélope y Enómao y el occidental la lucha entre lapitas y centauros.

Hércules y el Toro de Creta en metopas del templo de Zeus de Olimpia.

Las metopas - El pronaos y el opistodomos, el pórtico de entrada y el falso pórtico trasero que servía para dar equilibrio al diseño, se construyeron in antis, con seis metopas en cada extremo, grabados con los doce trabajos de Heracles, donde el héroe derrota a una serie de criaturas y monstruos que amenazan el orden de los justos

Representación de Apolo en el frontón occidental del templo de Zeus de Olimpia.
El frontón occidental mostraba la Centauromaquia, el enfrentamiento durante la boda de Pirítoo entre lápitas y centauros, quienes habían transgredido la xenia, las normas sagradas de hospitalidad sobre los que se apoyan las conductas sociales. Apolo​ se hallaba parado en el centro, flanqueado por Pirítoo y Teseo. Los lápitas representaban el orden olímpico civilizado, mientras que los centauras representaban la naturaleza primitiva de los seres ctónico; el friso también recordaba a los griegos del siglo V a. C. su victoria sobre los persas, la amenaza «foránea» al orden helénico

La conquista de Grecia por los romanos en el siglo II antes de Cristo, trajo un paulatino decrecimiento de aquellas competiciones.

En el año 393, el emperador Teodosio abolió los Juegos Olímpicos. La concepción cristiana de la época consideraba inmoral el culto al físico.

Busto de Teodosio I en la localidad segoviana de Coca (España), donado por Cándido López Sanz
.Teodosio I (11 de enero de 347-Milán, 17 de enero de 395), también conocido como Teodosio el Grande, fue emperador romano desde el 19 de enero de 379,1​ investido como Dominus Noster Flavius Theodosius Augustus y deificado tras su muerte como Divus Theodosius.​ Promovido a la dignidad imperial tras el desastre de Adrianópolis, primero compartió el poder con Graciano y Valentiniano II. El 6 de septiembre de 394, Teodosio reunió las porciones oriental y occidental del Imperio, siendo el último emperador en gobernar todo el mundo romano. Después de su muerte, las dos partes del Imperio se separaron definitivamente.

Cerca de 20 siglos después, el barón francés Pierre de Coubertin quiso recuperar los valores que inspiraron los primeros Juegos Olímpicos con la voluntad de estrechar lazos fraternales entre las diversas naciones. La actividad deportiva de aquel entonces era sólo privilegio de las clases adineradas. Consideró entonces la necesidad de popularizarla reconociendo sus beneficios en el desarrollo de la madurez, la nobleza, la capacidad de trabajo y el bienestar físico que generaba el esfuerzo y la sana competencia.

En junio de 1894 se reunió el Congreso Atlético Internacional de París y se aprobó el restablecimiento de los Juegos Olímpicos acordándose la creación del Comité Olímpico Internacional (COI).

El COI nacía con 14 países y tenía su sede en la prestigiosa universidad parisina de la Sorbona. Se estableció que los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna tendrían lugar en Atenas, del 6 al 18 de abril de 1896.

Desde entonces, los Juegos Olímpicos se han venido celebrando cada cuatro años con la excepción de las ediciones de 1916 (suspendida a causa de la Primera Guerra Mundial) y las de 1940 y 1946 (por la Segunda Guerra Mundial).

Mapa del yacimiento arqueológico de Olimpia: #4 Templo de Hera marcado en morado (en la parte superior del centro).

El templo de Hera en Olimpia (el Hereo de Olimpia) era un templo griego erigido en torno al año 600 a. C. sobre los restos de un edificio anterior. 

Se trataba de un edificio períptero (rodeado por los cuatro costados de seis por dieciséis columnas). Su planta estaba dividida en pronaos, cella y el opistodomos más antiguo conocido actualmente, que mantenía en sus extremos sus columnas «en doble antis» (cuando las paredes laterales de la cella se encontraban encerradas por 3 columnas, así como en el opistodomos).

En la descripción que hace del interior del templo destaca la imagen de Hera sentada en un trono. A su lado estaba una estatua de Zeus de pie. Había también imágenes de las Horas, de Temis, de las Hespérides, Atenea, Coré, Deméter, Apolo, Ártemis, Leto, Tique, Dioniso y Niké, todas ellas criselefantinas.

Templo de Hera

Entre los numerosos exvotos que se hallaban en el templo, había una estatua de mármol de Hermes con el niño Dioniso, atribuida a Praxíteles. En el siglo XIX se encontró entre los restos del templo esta célebre estatua. También había otra estatua de bronce de Afrodita realizada por Cleón de Sición y otra de un niño desnudo atribuida a Boeto de Cartago. Otros exvotos que se hallaban en el templo eran el cofre de Cípselo, un lecho adornado en marfil, el llamado disco de Ífito, donde se hallaba inscrita la tregua que se realizaba por los juegos olímpicos y una mesa de marfil y oro realizada por Colotes, donde se ponían las coronas para los vencedores.

Hermes con el niño Dioniso es una escultura griega de mármol con una altura de 213 centímetros que se encuentra en el Museo Arqueológico de Olimpia. Su autoría se atribuye al escultor Praxíteles del período clásico final o bien, según otros autores, se trataría de una copia del siglo I de un original del mismo artista del 350-330 a. C. Se encontró en el año 1877 entre las ruinas del templo dedicado a Hera donde servía como ornamentación. Se trata de una obra escultórica exenta, inspirada en la mitología griega.

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