domingo, 1 de diciembre de 2019

(XXIII) El placer de coleccionar arte - Enlaces: El gusto de Felipe II por El Bosco - Patinir y la invención del paisaje - Rogier van der Weyden (El Descendimiento) - Matthias Grünewald - El Bosco - Tríptico de las Tentaciones de san Antonio - Tríptico de la Adoración de los Magos - Tríptico del carro de heno - La alquimia en el Bosco - "El jardín de las delicias" - ¿Dónde está la relación de los adamitas con El Bosco?

(XXII) (Continuación) El placer de coleccionar arte - Juana de Austria - María de Austria o Habsburgo - El convento de las Descalzas Reales - Francisco de Borja y Aragón, pincha aqui

El gusto de Felipe II por El Bosco - La Biblia de los pobres, pincha aqui

El paso de la laguna Estigia o Caronte cruzando la laguna Estigia es quizá la obra más famosa del pintor flamenco Joachim Patinir. Fue realizada hacia el año 1520. Es un cuadro sobre tabla de 64 cm de alto y 103 cm de ancho. Se conserva en el Museo del Prado de Madrid, España.
En la mitología griega, Estigia  era una oceánide, hija de Océano y Tetis o, según Higino, una diosa hija de Érebo (las tinieblas) y Nix (la noche). Personificaba un río del Hades (el inframundo griego): el río Estigia.
Patinir y la invención del paisaje - Quentin Massys, pincha aqui

El descendimiento de la cruz  es considerada la obra maestra del pintor flamenco Rogier van der Weyden. Es un óleo sobre tabla, pintado con anterioridad al año 1443, probablemente hacia 1435. Mide 220 cm de alto y 262 cm de ancho. Se exhibe actualmente en el Museo del Prado de Madrid. Es conocido, generalmente, como El descendimiento.
Van der Weyden se enfrenta con el problema de encajar un gran número de personajes y una escena de gran complejidad en una tabla de dimensiones no muy grandes estipulada por el comitente.
Otra muestra del preciosismo de la pintura flamenca, gracias a los avances de la técnica del óleo, se muestra en las calidades de los objetos. Hasta este momento las técnicas utilizadas en la pintura eran el temple y el fresco o pintura mural.
Lo fantástico en el arte - Rogier van der Weyden - El Descendimiento (Prado) - Rolin, Nicolás, pincha aqui

Colmar se encuentra en el corazón de la bella región de Alsacia al este de Francia. Un sinfín de valles fértiles salpicados por pequeños pueblitos y montañas bajas coronadas de castillos. Su riqueza natural (hoy en día está llena de viñedos) y ubicación pudo haber sido lo que motivara que sea una zona siempre en disputa. Como veremos, Colmar cambió de manos constantemente a lo largo de la historia.
La primera mención de Colmar en un texto data del año 823 donde era un simple poblado. Mucho más tarde, en 1226 ganaría mucha más importancia al recibir el título de “ciudad imperial” por parte de Federico II Hohenstaufen, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico.
En los tres siglos siguientes Colmar gozó de una relativa paz y prosperidad bajo la protección imperial. Casi todas las mansiones, casas e iglesias que visitamos hoy en día pertenecen a este período de crecimiento entre los siglos XIV y XVII. Luego sobreviene una época de conflictos bélicos en los que Colmar y toda la zona de Alsacia se transforma en un pasamanos. Principalmente entre Francia y Alemania.
En 1632, al término de la Guerra de los 30 Años, Colmar queda bajo dominio Sueco. Esto sin embargo no dura demasiado y en 1673 es conquistada por las tropas francesas al mando de Luis XIV (el mismo de la película “La máscara de hierro”). Así permanece dentro de Francia casi 200 años hasta que en 1871 vuelve al Imperio Germano tras la derrota francesa en la guerra Franco-Prusiana.
Tras la derrota alemana en la Primera Guerra Mundial, Francia recupera Colmar cuando se firma el tratado de Versalles. Pero en 1940 los nazis vuelven a recuperar el control de la zona. Finalmente en 1945, tras una sangrienta batalla, Colmar es la última ciudad en ser liberada y retorna a Francia.
La Pequeña Venecia es (junto con el distrito de los pescadores) la zona más linda y retratada de Colmar. Esto se debe a que por esta zona pasa el pequeño río Lauch y las casitas de colores con entramados de madera se asoman sobre él. Además hay canteros llenos de flores y balconcitos para comer o tomar algo. Solía ser un barrio habitado por productores de vinos, jardineros y barqueros. Hoy viven algunas de las personas más ricas de la región.
El Museo de Unterlinden (en francés, musée d'Unterlinden) se encuentra en Colmar, Francia, en la región de Alsacia. El museo, situado en un convento de monjas dominicas del siglo XIII, alberga el Retablo de Isenheim, obra de Matthias Grünewald.
Matthias Grünewald - El Retablo de Isemheim  (Su obra maestra), pincha aqui

En el panel derecho el Bosco representa el Infierno de forma igualmente novedosa. A diferencia de sus otros Infiernos, este está construyéndose aún. Los demonios se afanan por concluir la torre circular como si fueran albañiles, transportando el material por la elevada escalera -situada en la misma posición que la que se apoya sobre el carro de heno- o preparando la argamasa para seguir levantando en altura sus muros. Atentos a su labor, están de espaldas a los demonios, que siguen trayendo a nuevos pecadores para sufrir su castigo.
En el panel izquierdo se muestra su origen, desde la caída de los ángeles rebeldes hasta la expulsión del Paraíso. Digno de destacar es el modo en que el pintor representó a esos seres angélicos que, al desobedecer a Dios, fueron arrojados del cielo y experimentaron una metamorfosis que acabó por convertirlos en monstruosas figuras híbridas. En primer plano, el Bosco hizo también hincapié en la expulsión de Adán y Eva del Paraíso. El arcángel, con su espada levantada, les impide franquear la elevada puerta antropomorfa que separa el Paraíso -escenario de la creación de Eva y de su tentación por la serpiente- del mundo en el que transcurrirá la vida del hombre tras su pecado.
Lo fantástico en el Arte - El Bosco - Grünewald - La catedral de San Juan de Bolduque,  pincha aqui

Las tentaciones de San Antonio, por El Bosco. Museo del Prado, Madrid, España
San Antonio o Antón Abad (Heracleópolis Magna, Egipto, 251 – Monte Colzim, Egipto, 356) fue un monje cristiano, fundador del movimiento eremítico. El relato de su vida, transmitido principalmente por la obra de san Atanasio, presenta la figura de un hombre que crece en santidad y lo convierte en modelo de piedad cristiana. También figura en el Calendario de Santos Luterano. El relato de su vida tiene elementos históricos y otros de carácter legendario; se sabe que abandonó sus bienes para llevar una existencia de ermitaño y que atendía a varias comunidades monacales en Egipto, permaneciendo eremita. Se dice que alcanzó los 105 años de edad.
De acuerdo con los relatos de san Atanasio y de san Jerónimo, popularizados en La leyenda dorada del dominico genovés Santiago de la Vorágine en el siglo XIII, Antonio fue reiteradamente tentado por el demonio en el desierto. La tentación de san Antonio se volvió un tema favorito de la iconografía cristiana, representado por numerosos pintores de importancia.
Lo fantástico en el Arte - El Bosco (II) - Tríptico de las Tentaciones de san Antonio, pincha aqui

El Anticristo, a la puerta del pesebre -bajo la forma de una cabaña de Brabante-, apenas cubre su cuerpo con una capa y un velo transparente. Prueba del carácter maléfico que otorga el pintor a este personaje es el búho que se oculta por encima de él, en la parte superior del henil, mirando al ratón muerto que se convierte en su presa. También le dan un cariz maligno los personajes que están a su lado en el interior de la cabaña, entre ellos una mujer de rasgos feos, deformados por su expresión, que lleva un tocado antiguo al igual que algunos demonios representados por el Bosco. 
Tríptico de la Adoración de los Magos (El Bosco), pincha aqui

Escena que representa la expulsión de los ángeles rebeldes, liderados por Lucifer, del Cielo. El pintor nos muestra la figura de Cristo entronizado y en actitud de bendecir, a su alrededor los ángeles luchan y expulsan a los rebeldes hacia la Tierra. Estos últimos, al caer, abandonan su aspecto angelical y se convierten en seres monstruosos, reptiles, insectos, sapos...
El Bosco - Hijo pródigo - Tríptico del carro de heno - Gótico flamenco, pincha aqui

La extracción de la piedra de la locura - 1501 - 1505. Óleo sobre tabla de madera de roble, 48,5 x 34,5 cm.
En el centro de una superficie rectangular el Bosco trazó un círculo en cuyo interior representó la escena de la Extracción de la piedra de la locura. El pintor creó un espejo en el que se pudiera ver la necedad y la locura humana y lo situó en el mundo rural, opuesto al de la nobleza y la vida urbana; de ahí que ambiente la escena en el campo, en medio de un paisaje. Como se hacía en las miniaturas, dispuso alrededor del círculo una decoración de lazos dorados sobre fondo negro y una inscripción en letras góticas, también doradas, en la parte superior: Meester snijt die keye ras (Maestro, quítame pronto esta piedra); y en la parte inferior: Myne name is lubbert das (Mi nombre es Lubbert Das)
La tradición popular asociaba la locura a una piedra alojada en el cerebro. Tomando la metáfora en sentido estricto, los más ingenuos trataban de librarse de esa supuesta piedra haciendo que se la extirparan. El Bosco representa la escena al aire libre, sobre un pequeño promontorio que se alza sobre una llanura con dos ciudades en la lejanía. Muestra al paciente, un campesino, viejo, gordo y desprovisto de sus zuecos, atado a un sillón. El charlatán o falso cirujano que hace la operación lleva un embudo invertido en la cabeza. Es el símbolo del engaño, que pone al descubierto que no es un sabio, sino un estafador. 
La alquimia en el Bosco - Ciríaco de Ancona, pincha aqui

"El sufrimiento que se muestra en este panel no sólo es físico, sino también psicológico: las almas se están volviendo locas por el miedo, la ansiedad, el caos y la angustia".
"El jardín de las delicias" El Bosco - Una de las obras más fascinantes, misteriosas y atrayentes de la historia del arte, pincha aqui


El rastro de los adamitas llega hasta la época del pintor. En el año 1411, un siglo antes de que pintara en la ciudad francesa de Cambrai, muy cerca de Flandes, El jardín de las delicias, el obispado de la zona abrió un proceso contra esta secta condenando a la hoguera a algunos de sus máximos responsables. A raíz de los interrogatorios que se hicieron se sabe que practicaban sus ritos en cavernas esperando la llegada del fin de los tiempos. Así pues, confiando que estaba próximo, ese día demostrarían a todo el mundo que eran los verdaderos hijos de Adán.
El hombre vestido señala con su índice a una mujer desnuda que sostiene una manzana, está claro que se trata de Eva en su Edén. Pero no se acaba aquí. Apoyado en su hombro derecho, en la sombra, sumiso, se entrevé una cara, ¿quizás la del propio el Bosco?
El Bosco enigma sin fin - ¿Dónde está la relación de los adamitas con El Bosco? - Ars moriendi («El arte de morir») - Visión de Tundal, pincha aqui

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