martes, 10 de febrero de 2015

El Museo de Navarra (Pintores navarros) - Julio Martín Caro - Jorge de Oteiza Enbil - Mariano Royo Jiménez - Pedro Salaberri Zunzarren - Juan José Aquerreta Maeztu - Pedro Manterola Armisen

Arte Contemporáneo

La cuarta, y última planta, se dedica al arte del siglo XX, fundamentalmente navarro o e artistas vinculados a Navarra, entre los que nombramos a Julio Martín Caro, Jorge Oteiza, Mariano Royo, Pedro Salaberri, Juan José Aquerreta o Pedro Manterola.

Julio Martín Caro

Pintor navarro, nacido en Pamplona en 1933 y fallecido en Madrid el 30 de abril de 1968.

Inició sus estudios de pintura a la edad de veinte años con don Manuel Gutiérrez Navas, ampliándolos dos años después con don Pancho Cossio. Este artista ha sido considerado por la crítica como artista refinado y culto, ensayando con fortuna varios ismos, estudiando las técnicas expresivas más variadas y, como grabador, mereció ser catalogado como excelente. Su obra es más conocida en el extranjero, especialmente en los Estados Unidos, que entre nosotros.

Martín Caro, "Autorretrato" 

Celebró numerosas exposiciones personales, destacando las celebradas en Pamplona (1957), Salamanca (1957), Madrid (1956), San Sebastián (1960), Valladolid, Rimini, Venecia, Yugoslavia, Alejandría, etc., etc. También expuso, varias veces y con buen éxito, en México, Copenhague y Nueva York. Y viajó por Francia, Austria e Italia.


En 1959 obtuvo una Beca extraordinaria Príncipe de Viana y pensión de la Fundación March para estudiar durante un año en el extranjero. En 1960 fue ayudante en la Cátedra de Pintura al Fresco del pintor Bruno Saetti, en Venecia.

Sus obras se encuentran en importantes colecciones de Caracas, Estados Unidos, Italia y España. 

“Al pie de la Cruz”, de Julio Martín-Caro.

Martín-Caro utiliza el tema de la crucifixión como símbolo de un sufrimiento propio que intentaba conjurar mediante la pintura. Con esta obra conseguirá una tercera medalla y el Premio del Ayuntamiento de Madrid en el Salón de Otoño de ese mismo año.

Al salir de un cinematógrafo de la Gran Vía, de Madrid, se sintió repentinamente indispuesto y cayó al suelo. Fue auxiliado por varios transeúntes y trasladado a la casa de socorro más cercana, donde nada pudieron hacer por él los facultativos, pues era ya cadáver. Contaba treinta y cinco años de edad.

Julio Martín-Caro Soto, Pintura de la serie "Formas de la Angustia", 1966. Museo de Navarra

Jorge de Oteiza Enbil 

(Orio, Guipúzcoa, 21 de octubre de 1908 - San Sebastián, Guipúzcoa, 9 de abril de 2003) fue un escultor español. Se le considera uno de los máximos exponentes de la Escuela Vasca de Escultura.


Si quieres saber más de Jorge de Oteiza pincha aquí

Mariano Royo Jiménez

Pintor y promotor cultural nacido en San Sebastián en 1949, pero residente en Pamplona desde los quince años. Murió en Pamplona el 10 de diciembre de 1985.

Estudió en la Escuela de Artes y Oficios. Expuso por primera vez en el Museo de Navarra (1968) junto con Pedro Salaberri, Luis Garrido y Alicia Osés. Tuvo unos primeros años difíciles, desempeñando diversos oficios como ayudante de chapista, trapero, etc... Conoció en la Escuela de Artes y Oficios a pintores de su generación como Azqueta, Salaberri, Javier Morrás, Osés, Joaquín Resano y Juan José Aquerreta, que formaban la "Escuela de Pamplona" según denominación del crítico Moreno Galván. De allí pasó a la Academia de San Fernando de Madrid, pero muy pronto la abandonó. Fue un artista fundamentalmente autodidacta.



En su obra se pueden distinguir tres etapas fundamentales:

1.- Figurativa: Denuncia de la realidad y atención a la expresión urbana de Pamplona. Es aquí donde se expresa el impacto entre la novedad incipiente y la tradición en vías de desintegración. Se trata de una pintura estática que algunos llamarán realismo mágico, formas que emplean grandes masas y colores planos, dulces y neutros. El uso de pintura acrílica aplicada en tabla o lienzo se convertirá en un sistema muy personal.

2.- En 1973 se aleja de las bases establecidas por la "Escuela de Pamplona" para marcar pautas más individuales. Continúa interesado en los efectos nocivos que cierto tecnicismo y la contaminación de la Naturaleza provocan en el hombre, pero cierto intimismo se plasma en su obra sin renunciar a una simbología mágica. Se vale de objetos cotidianos dispuestos de maneras peculiares, especialmente de mal gusto. Emplea distintas gamas de colores intensos para reflejar sus estados de ánimo.

3.- A partir de 1976 su intimismo avanza hacia un terreno surrealista, maravilloso, caracterizado por el uso de colores suaves y vivaces, que, mediante una luz intemporal, introducen la perspectiva que remarcará lo fantástico. Este tipo de pintura se combina con otra más vibrante, de tonos fuertes (rojos y negros) que provocan choques violentos. Los cuadros de esta última tendencia son una contraposición de hechos y símbolos para la creación de una situación compleja, distinta de la delicada atmósfera cromática que otras obras del mismo tiempo presentan.

Lienzo de Mariano Royo
Mariano Royo fue un pintor expresionista y muy vital. 

Pedro Salaberri Zunzarren

Pintor navarro contemporáneo, nacido en Pamplona en 1947.

Pedro Salaberri Zunzarren

Realiza su primera exposición en 1968 en el Museo de Navarra, habiendo expuesto numerosas veces en su ciudad natal, así como en Bilbao, San Sebastián, Vitoria, Santander, Madrid, Sevilla, Barcelona, Praga, Varsovia y en Estella, Tafalla, Tudela, Sunbilla, Burlada y Altsasu.


Su obra puede encontrarse en museos y colecciones como el Ayuntamiento de Pamplona y el de Vitoria, Caja de Ahorros Municipal de Pamplona, Caja de Ahorros de Navarra, Caja Vital Kutxa, Gobierno de Navarra, Gobierno Vasco, IVAM, Museo de Bellas Artes de Álava, Parlamento de Navarra y Museo de Navarra.


Juan José Aquerreta Maeztu

Pintor navarro nacido en Pamplona en 1946.

Juan José Aquerreta Maeztu

Entre 1962 y 1964 estudió en la Escuela de Artes y Oficios de Pamplona en los cursos de dibujo y pintura. En 1966 ingresó en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Desde 1983 y hasta la actualidad imparte clases de pintura y dibujo en la Escuela de Arte de Pamplona. Aquerreta es uno de los pintores navarros contemporáneos con mayor proyección. Su fichaje hace ya unos años por la galería Malborough fue sin duda su impulso definitivo hacia el exterior. Con esta prestigiosa galería Aquerreta ha participado en las últimas ediciones de la Feria Arco siendo uno de los pintores más valorados por la crítica.

Imagen del lienzo de J.J. Aquerreta.

Fue el regalo de bodas del Gobierno de Navarra al Príncipe Felipe y a Doña Letizia
La obra es un óleo que representa un paisaje de los lindes meridionales de Pamplona, con una perspectiva de formas geométricas (triángulos, rectángulos y círculos) en la que coexisten construcciones urbanas y paisaje rural, y está pintado en colores verdes, grises, amarillos y ocre, de tonos muy suaves y difuminados, que transmiten un sentimiento de sosiego no exento de melancolía.

Pero la trayectoria profesional de Juan José Aquerreta, un pintor interesado sobre todo por el hombre y la naturaleza, comenzó hace varias décadas en Pamplona, en unos años en los que lo social se imponía como un elemento más de la pintura. En los comienzos de los años 70, el trabajo de Aquerreta se vinculó a la llamada Escuela de Pamplona un término acuñado por el crítico de arte José María Moreno Galván en un artículo que escribió en la revista Triunfo y de la que formaban parte nombres como Pedro Salaberri, Xabier Morrás, Pedro Osés, Joaquín Resano, Luis Garrido, Pello Azketa y Mariano Royo. Sin embargo, Aquerreta nunca se ha sentido identificado dentro de ese grupo, a pesar de que la crítica lo sigue vinculando. Tal vez porque siempre ha sido un pintor solitario, ajeno a las modas, los grupos y las propuestas más o menos establecidas.


La primera exposición de Aquerreta se celebró en la galería Sen de Madrid en 1973 y desde entonces ha recorrido diversas salas de toda España, destacando su participación en la feria de Arco en varias ediciones. Asimismo ha formado parte de más de 50 exposiciones colectivas de todo tipo. Entre los premios destaca en 1967 el segundo premio en el Certamen de Pintura Vasca en San Sebastián, en 1972 el Segundo premio Ciudad de Pamplona o el Primer premio en 1983 en el certamen de Pintura Vasca de San Sebastián. Sus cuadros forman parte de importantes colecciones como las del Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid, el Museo San Telmo de San Sebastián, el Museo de Bellas Artes de Álava, el Museo de Navarra, la Colección La Caixa, Fundación Endesa o la Colección de Arte Contemporáneo del Ayuntamiento de Pamplona. Una de sus obras más sorprendente es el Cristo resucitado, del año 2000. Premio Nacional de Artes Plásticas 2001 como reconocimiento a toda su trayectoria, en 2002 recibió el Premio Nacional de las Artes Plásticas y en mayo de 2003 el Premio Príncipe de Viana.


Pintor del silencio, de la intimidad, de la soledad, de lo intemporal; pintor de lo humano entendiendo al hombre no como ser social sino como ser individual por su propia condición natural. Aquerreta es un pintor clásico en la técnica pero innovador en el resultado. Pinta al aire libre o en estudio; dibuja y luego matiza y colorea. Sus obras a veces son como escenarios soñados a medio camino entre lo irreal y lo inventado, lo mismo que sus figuras humanas, como la obra Huida del esclavo de Saturno (1990), de la colección Municipal de Arte Contemporáneo Ayuntamiento de Pamplona, Apolo ingrávido (1989)o la serie de Autorretratos. Obras todas ellas que distan mucho de aquellos cuadros compartidos con Osés, como Mayo del 68 con un aire de reivindicación y protesta. En su trabajo destacan también los bodegones o naturalezas muertas y los dibujos, género al que se ha dedicado con intensidad y las esculturas, más esporádicas pero igualmente vinculadas a la persona.


Impresionante cuadro hecho a base de manchas y poco más. Está perfectamente plasmado el ambiente de un día de invierno con neblina.

Pedro Manterola Armisen

Artista plástico y profesor. Nacido en Pamplona en 1936.

Doctorado en Bellas Artes con la tesis Sobre la relación entre arte y sacrificio en la pintura y escultura vascas, Pedro Manterola ha ejercido una larga carrera docente: profesor titular de la UPV-EHU fue decano de la facultad de Bellas Artes en esta misma universidad entre 1981 y 1984 y entre los años 2002-2007 dirigió la Cátedra Jorge Oteiza en la Universidad Pública de Navarra.


Pedro Manterola Armisen

Experto en la obra de Jorge Oteiza ocupa el puesto de director del Museo Oteiza desde julio de 2004 hasta febrero de 2008 y es nombrado presidente del Patronato de esta entidad en 2009.

Desde 1984 a 1991 es también Asesor de Cultura en el Departamento de Educación y Cultura del Gobierno de Navarra.
Obra de Pedro Manterola Armisen
Ha publicado diversas obras de investigación como El paisaje y la mirada (1987), El Jardín de un caballero. La escultura vasca de la posguerra en la obra y pensamiento de Mendiburu, Oteiza y Chillida (1993), La pasión de Jorge Oteiza (1996), Peripecia de Ulises (1999) o La escultura de Jorge Oteiza. Una interpretación (2007). Además de múltiples artículos en revistas especializadas y prensa.

Pedro Manterola, Bandera 2, 1975
Como pintor irrumpe en el panorama artístico en la década de los 60 con una obra de tendencia expresionista con elementos surrealistas y neofigurativos.

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