viernes, 22 de octubre de 2021

Listado de los Doce Olímpicos - Nacimiento del arte griego - Teoría de la generación del mito


Metamorfosis - ARTE y MITO - Los lienzos para la Torre de la Parada - Ovidio - Las metamorfosis , PINCHA AQUI


El Olimpo o monte Olimpo (el luminoso») es la montaña más alta de Grecia y la segunda de los montes Balcanes (tras el Musala de Bulgaria, 2925 m), con 2918 m2​ de altitud. Situado entre las regiones griegas de Tesalia, cerca de Larissa y Macedonia, es reserva natural griega desde 1938 y patrimonio natural de la Unión Europea desde 1981, en su categoría de reserva de la biosfera.
Para la mitología griega, el Olimpo era el hogar de los dioses olímpicos, los principales dioses del panteón griego, presididos por Zeus. Los antiguos griegos creían que en las cumbres del monte había construidas mansiones de cristal en las que moraban los dioses. El Olimpo quedó destruido después de la guerra de los Dioses, y la mitología dice que cuando se destruyó dejó dos rastros divinos en forma de hombre y mujer, los cuales deberán juntarse para dar a luz al hijo hombre que dé vida otra vez al Olimpo. El número e identidad de los dioses que habitaban ese Olimpo (el llamado «Concilio de los dioses) parece ser de doce

Teoría de la generación del mito

Si bien en Roma existía una religión politeísta originaria y campesina, a partir del siglo v a. C. comenzó la «importación» de las deidades griegas, fundamentalmente a través de los etruscos.

En el siglo III a. C. el poeta Quinto Ennio estableció en sus escritos una equivalencia de doce dioses, seis femeninos y seis masculinos: Júpiter (Zeus); Juno (Hera); Minerva (Atenea); Vesta (Hestia); Ceres (Deméter); Diana (Artemisa); Venus (Afrodita); Marte (Ares); Mercurio (Hermes); Neptuno (Poseidón); Vulcano (Hefesto) y Febo (Apolo).

Esta suerte de «humanización de los dioses» o historicista de la mitología se conoció como «evemerismo».

El evemerismo es una teoría hermenéutica de la interpretación de los mitos creada por Evémero de Mesene (s. IV a. C.) en su obra Inscripción sagrada (ἱερα ανάγραφη Hiera anágrafe), de la que solamente quedan resúmenes, y según la cual los dioses paganos no son más que personajes históricos de un pasado mal recordado, magnificados por una tradición fantasiosa y legendaria.

 Los doce dioses y diosas que figuran entre los doce con más frecuencia.

Júpiter y Tetis, por Jean Auguste Dominique Ingres (1811)
Jean-Auguste-Dominique Ingres (Montauban, 29 de agosto de 1780-París, 14 de enero de 1867) fue un pintor francés. No fue, en sentido estricto, neoclásico ni académico, sino un ferviente defensor del dibujo. Resulta a la vez neoclásico y romántico.​ Ingres constituye un claro exponente del romanticismo en cuanto a los temas, el trazo abstracto y los tonos planos de intenso colorido.

Rey de los dioses y gobernante del monte Olimpo; dios del cielo y el trueno. Hijo menor de los titanes Crono y Rea. Los símbolos incluyen el rayo, el águila, el roble, el cetro y la balanza. Hermano y marido de Hera, aunque tuvo muchas amantes, tanto diosas como mortales.

Su equivalente griego es Zeus, aunque esta deidad latina no fue tomada de la mitología griega, como sí ocurrió en otros casos. Sus atributos son el águila, el rayo, y el cetro.

Estatua de Juno en el Museo del Louvre

En la mitología romana, Juno era una diosa, equivalente a la Hera griega, diosa del matrimonio y reina de los dioses. Hija de Saturno y Ops, hermana y esposa de Júpiter, con el que tuvo dos hijos, Marte y Vulcano y una hija, Lucina. Juno fue una deidad mayor de la religión romana y formó parte, junto a Júpiter y Minerva, de la Tríada Capitolina, un importante culto romano. En la mitología romana Juno representa a la maternidad.

Neptuno es un dios de la mitología romana, pero proveniente de la mitología griega, hijo de los dioses Saturno y Ops, hermano de Júpiter y Plutón. Gobierna todas las aguas y mares y cabalga las olas sobre caballos blancos. Todos los habitantes de las aguas deben obedecerlo y se le conoce como Poseidón en la mitología griega.

Neptuno eligió el mar como morada y en sus profundidades existe un reino de castillos dorados. Con su poderoso tridente agita las olas, hace brotar fuentes y manantiales donde quiera y encausa su ira provocando los temibles sismos o terremotos.

Febo es un apodo o epíteto del dios Apolo en la mitología clásica. Probablemente su significado originalmente era "brillante".
Los poetas clásicos latinos también aplicaban el apodo Febo al dios sol, de ahí las referencias comunes en la poesía europea posterior a Febo y su carro como una metáfora del sol.
Los símbolos incluyen el sol, la lira, el arco y la flecha, el cuervo, el delfín, el lobo, el cisne y el ratón. Hijo menor de Zeus y Leto. ​Hermano gemelo de Artemisa. Líder de las musas inspiradoras.

En la mitología romana, Minerva es la diosa de la sabiduría y las artes, además de la protectora de Roma y la patrona de los artesanos. Se corresponde con Atenea en la mitología griega, aunque se le destituye el rango de diosa guerrera, siendo sustituida por Belona, la diosa romana de la guerra, que se corresponde a Enio en la mitología griega.

Venus fue la diosa del amor, la belleza y la fertilidad de la mitología romana a quien se adoraba y festejaba en muchas fiestas y mitos religiosos romanos. Desde el siglo III a. C., la creciente helenización de las clases altas romanas la identificó con la diosa griega Afrodita. Era la esposa de Vulcano. Julio César la adoptó como su protectora y Virgilio, como halago a su patrón Augusto y a la gens Julia, señaló que Venus era el ancestro femenino del pueblo romano a través de su legendario fundador Eneas y su hijo Ascanio
Los símbolos incluyen la paloma, el pájaro, la manzana, la abeja, el cisne, el mirto y la rosa.
Su nombre proviene del griego αφρο 'afro', surgida de la espuma del mar después de que la sangre de Urano goteara sobre la tierra y el mar tras ser castrado por su hijo Crono.


Marte o Ares villa Hadriana
Dios de la guerra, la fuerza, la virilidad masculina, y el derramamiento de sangre. Protector del olimpo y de los ejércitos. Los símbolos son la lanza y el escudo. También los son la antorcha, el jabalí, la serpiente, el perro, el buitre. Hijo de Zeus y Hera, amante preferido de Afrodita, su aliada en la guerra y sanadora. Su nombre romano Marte, nos dio la palabra marcial, martes (día de la semana) y el mes de marzo.

Baco o Dionisio
Dios del vino, las celebraciones y el éxtasis. Dios patrón del arte del teatro. Los símbolos incluyen la vid, la hiedra, la copa, el tigre, la pantera, el leopardo, el delfín y la cabra. Hijo de Zeus y de la mortal princesa de Tebas Sémele. Casado con la princesa cretense Ariadna. El olímpico más joven, así como el único nacido de una mujer mortal.

Diana o Artemisa
Diosa virgen de la caza, la virginidad, el parto, el tiro con arco y todos los animales. Los símbolos incluyen la luna, el ciervo, el perro de caza, la osa, la serpiente, el ciprés y el arco y la flecha. Hermana gemela de Apolo. Hija mayor de Zeus y Leto.


Vulcano o Hefesto
Maestro herrero y artesano de los dioses; dios del fuego y la forja. Los símbolos incluyen el fuego, el yunque, el hacha, el burro, el martillo, las tenazas y la codorniz. Hijo de Hera, con Zeus o sin él. Después de que él naciera, sus padres le arrojaron fuera del monte Olimpo, aterrizando en la isla de Lemnos. Casado con Afrodita, aunque a diferencia de la mayoría de los maridos divinos, raramente fue licencioso. Su nombre latino, Vulcano, nos dio la palabra "volcán".

Ceres o Démeter
Diosa de la fertilidad, la agricultura, la naturaleza y las estaciones del año. Los símbolos incluyen la amapola, el trigo, la antorcha y el cerdo. Medio hija de Crono y Rea. Su nombre latino, Ceres, nos dio la palabra "cereal".

Mercurio o Hermes 
Mensajero de los dioses; dios del comercio y la retórica. Los símbolos incluyen el caduceo (vara entrelazada con dos serpientes), las sandalias y el casco alados, la cigüeña y la tortuga (cuyo caparazón usó para inventar la lira). Hijo de Zeus y la ninfa Maia. El segundo olímpico más joven, apenas mayor que Dioniso. Se casó con Dríope, hija del rey Dríope, y su hijo Pan se convirtió en el dios de la naturaleza, el señor de los sátiros, el inventor de la flauta y el compañero de Dioniso.

Nacimiento del arte griego

La historiografía del arte ha identificado varios estilos que periodizan el arte de la Antigua Grecia:
  • Geométrico (siglos IX y VIII a. C.); hay muy pocos datos del periodo anterior, conocido como Edad Oscura, a la que precedió el arte de las civilizaciones prehelénicas (arte cicládico, arte minoico y arte micénico)
  • Orientalizante (final del siglo VIII y comienzos del VII a. C.)
  • Arcaico (siglos VII y VI a. C.), en la decoración pictórica de la cerámica se caracteriza por las figuras negras.
  • Severo (finales del VI y comienzos del V a. C.), en la decoración pictórica de la cerámica se caracteriza por los vasos bilingües.
  • Clásico (siglos V y IV a. C). –de las Guerras Médicas al reinado de Alejandro Magno-, en la decoración pictórica de la cerámica se caracteriza por el uso de las figuras rojas, que se prolonga en el periodo posterior.
  • Helenístico (final del siglo IV y siglos III y II a. C.), prolongado por el arte romano a partir de la conquista romana de Grecia (146 a. C.).
Kílix ático (siglo V a.C.) que representa un amante  besando a su amado . Las representaciones de escenas pederastas son abundantes en el arte griego.
La cerámica ática designa la producción de cerámica en esta región, con centro en Atenas. Con cerca de 20 000 piezas áticas de figuras negras, que constituye el más largo y al mismo tiempo la colección de cerámicas más significativa, seguido únicamente de la cerámica ática de figuras rojas.

A partir del siglo VI a. C. el centro político de la polis se convierte en un lugar de gran relevancia artística, convirtiéndose la plaza pública o ágora en el corazón de las actividades cívicas de la sociedad. Entre todas ellas sobresale la de la ciudad de Atenas, impulsada por el legislador Solón y monumentalizada en la época de los Pisistrátidas.

El culto religioso desempeñó también un papel fundamental en la sociedad griega de este periodo, de manera que todas aquellas ciudades que dispusieron de medios económicos suficientes promovieron la construcción de edificios religiosos en piedra, los cuales cumplieron un importante papel a la hora de cohesionar las diferentes clases de la nueva sociedad, menos igualitaria que la de siglos anteriores. Se crean ahora santuarios panhelénicos, como Delfos y Olimpia, donde los distintos tiranos realizan grandes ofrendas votivas para exhibir su poder, y se fomentan nuevos cultos populares, al tiempo que surgen mitos relacionados con dioses y héroes locales, lo que incrementa las identidades políticas de las distintas polis que necesitan sentirse independientes y destacar sobre el resto.

La arquitectura griega fijó las formas del templo, que se fue desarrollando en las acrópolis o ciudadelas elevadas de cada ciudad; así como en los santuarios panhelénicos

Triglifos y metopas del friso del Templo C de Selinunte, dedicado a Poseidón. Hacia 580 a. C. Las esculturas representan el carro de Helios, la decapitación de Medusa por Perseo y a Heracles capturando a los Cercopes.

miércoles, 20 de octubre de 2021

Metamorfosis - ARTE y MITO - Los lienzos para la Torre de la Parada - Ovidio - Las metamorfosis

ARTE y MITO

Loggia di Psiche, 1518-19, fresco de Rafael. En imagen, sección del techo donde se representa el concilio de los dioses, principalmente los doce olímpicos, recibiendo a Psique.

El rapto de Psique de William-Adolphe Bouguereau
Psique (en latín Psyche, en griego Ψυχή), divinidad griega y protagonista de un mito latino, es la personificación del alma.
Según la historia, inmortalizada por Apuleyo en su Metamorfosis (El asno de oro), Psique era la menor y más hermosa de tres hermanas, hijas de un rey de Anatolia. Afrodita, celosa de su belleza, envió a su hijo Eros (Cupido) para que le lanzara una flecha que la haría enamorarse del hombre más horrible y ruin que encontrase. Sin embargo, Eros se enamoró de ella y lanzó la flecha al mar; cuando Psique se durmió, se la llevó volando hasta su palacio. Para evitar la ira de su madre, una vez que tiene a Psique en su palacio, Eros se presenta siempre de noche, en la oscuridad, y prohíbe a Psique cualquier indagación sobre su identidad. Cada noche, en medio de la oscuridad, se amaban.

Fragmento de un relieve helenístico (siglo i a. C. - siglo i) representando los doce olímpicos con sus atributos en procesión; de izquierda a derecha, Hestia (cetro), Hermes (casco alado y bastón), Afrodita (velo), Ares (casco y lanza), Deméter (cetro y gavilla de trigo), Hefesto (bastón), Hera (cetro), Poseidón (tridente), Atenea (búho y casco), Zeus (rayo y bastón), Artemisa (arco y carcaj) y Apolo (cítara) (procedente del Walters Art Museum).

En la religión de la antigua Grecia, los dioses olímpicos eran los principales dioses del panteón griego, que moraban en el monte Olimpo (el más alto de Grecia). A ellos les fueron consagrados tanto templos, como festividades cívicas, actividades artísticas y deportivas, siendo considerados los más importantes dentro del amplio conjunto de las deidades de la mitología griega. En sus orígenes, los primeros cultos se remontan aproximadamente hace 5000-6000 años, hacia el 3500 a. C.​ El culto a las deidades de la Antigua Grecia permanece vigente en el Helenismo.

Árbol genealógico de los dioses olímpicos. En los casos de Afrodita, Ares, Dioniso, Atenea, Hefesto y Urano para este gráfico se ha tomado como modelo la versión de la Teogonía de Hesíodo. En azul, los que siempre se consideran olímpicos, en amarillo los variables, y en negro, los demás dioses. La línea continua indica relación padre-hijo y la discontinua la pareja

Los mitos son relatos que recogen historias de dioses y semidioses y su relación con los hombres. De ahí que se hallen presentes en todas las culturas y sociedades antiguas. De origen incierto en la mayor parte de las ocasiones, tradicionalmente se transmitían de forma oral, modificándose paulatinamente con nuevos añadidos y diferentes versiones. En el caso de los mitos griegos, los primeros testimonios escritos no se remontan más allá del siglo VIII a. C.

Los protagonistas de esos mitos eran los dioses del Olimpo, que no sólo regían el destino de los hombres, sino que bajaban a la Tierra e interactuaban con ellos, adoptando en ocasiones una apariencia humana que los hacía más cercanos. Sus historias también servían para explicar todo tipo de fenómenos de la naturaleza o del universo que les rodeaba. Surgieron así infinidad de divinidades que personificaban montañas, fuentes, ríos, mares, vientos, constelaciones…, también todo tipo de árboles y de especies animales que convivían con los hombres.

A lo largo de la historia, la mitología clásica ha sido una constante fuente de inspiración para numerosos artistas, y esas fabulosas narraciones quedaron recogidas en cerámicas, bloques de mármol, medallas, tablas y lienzos 

Los mitos son relatos maravillosos situados fuera del tiempo histórico y protagonizados por personajes de carácter divino o heroico. La mitología, por su parte, es el conjunto de mitos y, al mismo tiempo, su estudio.

Gracias a los mitos, griegos y romanos pudieron ofrecer una interpretación sobre el origen del mundo y sobre diversos fenómenos de la naturaleza o del universo. Surgieron así infinidad de divinidades que personificaban montañas, fuentes, ríos, mares, vientos, constelaciones…, pero también todo tipo de árboles y especies animales. Dioses y semidioses —siempre con apariencia humana, salvo en el caso de los monstruos— dejaron junto a los héroes una huella perenne en el curso del mundo como protagonistas de sucesos ejemplares, en los que el componente simbólico es esencial.

En un primer momento los mitos fueron narraciones no escritas, que se iban transmitiendo de forma oral y modificándose paulatinamente con nuevos añadidos. Homero y Hesíodo, en el siglo VIII a. C., fueron los primeros en poner por escrito esas historias, dando nombres a los dioses y señalando sus particularidades. Pero no podríamos conocer y entender los mitos clásicos sin las aportaciones de otros autores posteriores, tanto griegos como romanos. Cabe destacar, entre otros, a Apolodoro, Luciano de Samósata, Diodoro de Sicilia, Filóstrato, Virgilio y, especialmente, a Ovidio, autor de las Metamorfosis, que constituyen un auténtico manual de mitología grecorromana.

El acercamiento a los mitos clásicos tiene un importante obstáculo: la terminología. Algunos dioses son conocidos por sus nombres griegos pero otros son más reconocibles por sus nombres romanos.

Apolo persiguiendo a Dafne - 636 - 1638. Óleo sobre lienzo, 193 x 207 cm.

Ovidio cuenta la transformación de Dafne en árbol en el libro I de las Metamorfosis (452-552:) "(...) El primer amor de Febo fue Dafne, la hija de Peneo, un amor que no produjo el ignorante azar, sino la cruel ira de Cupido. (...) Apolo se disponía a seguir hablando cuando huye en temerosa carrera la hija de Peneo y lo dejó con la palabra en la boca(...). Agotadas sus fuerzas, palideció ella y vencida por el esfuerzo de la rápida huída dijo mirando a las aguas del Peneo: "¡Ayúdame, padre, si los ríos sois divinidades, echa a perder, cambiándola, esta figura con la que he gustado demasiado"! Apenas acabó su plegaria, un pesado sopor invade sus miembros: una delgada corteza ciñe su tierno pecho, sus cabellos crecen como hojas, sus brazos como ramas, sus pies ha poco tan veloces se adhieren en raíces perezosas, en lugar del rostro está la copa: sólo la belleza queda en ella". Este episodio, tal y como indica Ovidio, es consecuencia de la burla que Apolo le dedicó a Cupido después de que el primero hubiera vencido a la serpiente Pitón (P1861).

El cuadro estuvo atribuido a Cornelis de Vos hasta 2017, fecha en que se localizó la firma de Van Thulden.

Los lienzos para la Torre de la Parada fueron realizados en torno a 1636-1638 aproximadamente, siguiendo la correspondencia entre el Cardenal Infante Don Fernando, gobernador de Flandes en el momento del encargo, y su hermano el rey Felipe IV. La decoración de la Torre de la Parada, en cuyo proyecto también participaron otros autores como Velázquez, fue el mayor encargo que Rubens recibió de Felipe IV. A partir de 1636 se enviaron desde Amberes a Madrid más de sesenta obras para esta casa de recreo situada en los montes del Pardo. La mayor parte de las escenas narraban las pasiones de los dioses, según fueron descritas en las Metamorfosis del poeta romano Ovidio y otras fuentes clásicas.

Para llevar a cabo un proyecto tan amplio, Rubens realizó pequeños bocetos sobre tabla, donde capta la esencia moral de las historias y las actitudes de los personajes. Estos bocetos sirvieron de base para la elaboración de los lienzos definitivos. El Museo del Prado conserva diez de los bocetos de Rubens, nueve de ellos donados en 1889 por la duquesa de Pastrana, y uno adquirido en el año 2000. El Prado también conserva la mayoría de los lienzos realizados a partir de los diseños de Rubens para la decoración de este lugar (muchos de los cuadros fueron pintados por otros artistas).

La Torre de la Parada en un lienzo de Félix Castelo (c. 1640).
Félix Castelo o Castello (Madrid 1595- ibidem 1651), fue un pintor barroco español, miembro de una dinastía de artistas italianos encabezada por su abuelo, Giovanni Battista Castello, llamado el Bergamasco, quien se trasladó a España en tiempos de Felipe II, y continuada por su padre, Fabricio Castello, y su tío Nicolás Granello, formados en El Escorial, donde participaron en la decoración de la Basílica. Aunque su apellido suele aparecer castellanizado como Castelo, él firmó sus obras indistintamente de un modo y otro.

La Torre de la Parada fue un pabellón de caza que se ubicaba a las afueras de Madrid, en el Monte de El Pardo (Parque regional de la cuenca alta del Manzanares), no lejos del Palacio de El Pardo. Hacia 1635-40 fue uno de los principales proyectos arquitectónicos y decorativos del rey Felipe IV, gran aficionado a la caza, que deseaba un caserón de descanso en la zona para las largas jornadas cinegéticas.

Felipe IV de España, llamado «el Grande» o «el Rey Planeta» (Valladolid, 8 de abril de 1605-Madrid, 17 de septiembre de 1665), fue rey de España desde el 31 de marzo de 1621 hasta su muerte, y de Portugal desde la misma fecha hasta diciembre de 1640. Su reinado de 44 años y 170 días fue el más largo de la casa de Austria y el tercero de la historia española, siendo superado solo por Felipe V y Alfonso XIII, aunque los primeros dieciséis años del reinado de este último fueron bajo regencia.
Durante la primera etapa de su reinado compartió la responsabilidad de los asuntos de Estado con don Gaspar de Guzmán, conde-duque de Olivares, quien desplegó una ambiciosa política belicista en el exterior y reformista en el interior que buscaba mantener la hegemonía española en Europa. Tras la caída de Olivares, se encargó personalmente de los asuntos de gobierno, ayudado por cortesanos muy influyentes, como Luis Méndez de Haro, sobrino de Olivares, y el duque de Medina de las Torres.

Su finalidad última fue la de servir de descanso al monarca durante las largas jornadas cinegéticas a las que fue tan aficionado. El edificio, en forma de torre con pequeños añadidos, se cubría con tejados de pizarra y un elaborado chapitel y se rodeaba de un muro perimetral como una fortaleza.

La torre fue destruida casi en su totalidad en 1714 por el incendio que provocaron las tropas austríacas durante la Guerra de Sucesión Española​ y apenas subsisten imágenes suyas en pinturas de la época. Actualmente sólo permanecen las ruinas.

El principal atractivo del edificio radicó en la extensa serie de pinturas mitológicas, siguiendo el relato de Ovidio, encargada a Rubens en 1636. El ciclo constaba de sesenta y tres lienzos de gran formato y fue realizado por diversos pintores en Amberes conforme a los bocetos aportados por Rubens. El maestro se reservó la ejecución de catorce pinturas, y las restantes se deben a algunos de los colaboradores habituales del maestro flamenco: Jacob Jordaens, Theodor van Thulden, Erasmus Quellinus II, Jan Cossiers, Peeter Symons y otros.

(Publio Ovidio Nasón, en latín Publius Ovidius Naso; Sulmona, actual Italia, 43 a.C. - Tomis, hoy Constanza, actual Rumania, 17 d.C.) Poeta latino. Educado en las artes de la política, Ovidio estudió en Roma y completó su formación en diversas ciudades del mundo griego, pero pronto abandonó la política para dedicarse por entero a la poesía, convertido en un hombre adinerado tras heredar la hacienda de su padre.

Tuvo numerosas amantes, y se casó tres veces (con dos divorcios), y algunas de sus peripecias amorosas aportaron el material poético para sus Amores, una serie de poemas que narran los incidentes de sus relaciones con Corina, personaje en el que seguramente condensó diversas figuras femeninas.

Augusto desterró a Ovidio, autor de las ‘Metamorfosis’, a los confines del imperio por causas que aún no se han aclarado

Ovidio perteneció a una serie de poetas que no conocieron las guerras civiles que asolaron Roma durante el siglo I a. C. Los antiguos poetas augusteos, como Virgilio y Horacio, con sus valores patrióticos y su estética clasicista, estaban ya muy lejos de la generación de Ovidio, heredero de la estética helenística que representa el gusto por la erudición y por la despreocupación política y social.

En Roma, donde residió hasta los cincuenta años de edad, se relacionó con la más alta sociedad, incluido el emperador Octavio Augusto. Sin embargo, en el año 8 d. C. cayó en desgracia y fue desterrado hasta su muerte en Tomis, en el Ponto Euxino, cerca del Mar Negro, sin que se sepa cuál fue exactamente el motivo; el propio Ovidio supone que se debió al tono libertino de algunas de sus obras, que se habría interpretado como un ataque a la política de reforma moral y a la estética del emperador Augusto, quien llegó a castigar el adulterio como si fuese una ofensa contra el Estado o la religión, incluso más allá de la propia tradición romana. Sin embargo, estas obras circulaban desde hacía tiempo, por lo que se ha especulado también con la posibilidad de que el poeta conociera un escándalo en el que estaba implicada la hija del emperador.

Las metamorfosis 

Del poeta romano Ovidio, es un poema en quince libros que narra la historia del mundo desde su creación hasta la deificación de Julio César, combinando con libertad mitología e historia. Fue terminado en el año 8 d. C.

Esta obra literaria es considerada como una obra maestra de la edad de oro de la literatura latina. Una de las obras clásicas más leídas durante la Edad Media y el Renacimiento, Las metamorfosis inspiró a múltiples artistas, como Tiziano, Velázquez y Rubens, y continúa ejerciendo una profunda influencia en la cultura occidental.

Octavio Augusto
(Cayo Julio César Octaviano, también llamado Augusto o César Augusto; Roma, 63 a. C. - Nola, Nápoles, 14 d. C.) Primer emperador romano. Procedía de una rica familia del orden ecuestre de Veletri (su abuelo fue banquero y su padre, pretor de Macedonia). Por parte de madre era sobrino-nieto de Julio César, el cual le adoptó en el 45 a. C. y le designó su heredero.


La maravillosa villa de la emperatriz Livia en Prima Porta - La estatua de Augusto - El Palazzo Massimo alle Terme, pincha aqui

El placer de coleccionar arte - Mecenas, el amigo de Augusto y de los poetas - Los Horti de Mecenas - Auditorium de Mecenas - Periégesis. pincha aqui