Chanel odiaba a su familia. "No me gusta. Se nace en ella pero no con ella. No conozco nada más espantoso que la familia". Un desprecio que se convirtió en el motor de su triunfo: liberar a las mujeres del rígido guardarropa de la belle époque. Durante los años veinte y treinta, armada con sus tijeras, acortó faldas, desplumó sombreros, rasgó ballenas, deshizo rellenos... En su lugar, impuso el humilde vestuario de una hospiciana: los jerséis de punto de los marineros, los pantalones de los mozos de cuadra, la piel morena de las campesinas, el vestido negro de las incluseras... El uniforme de la mujer moderna, que aún perdura.
Coco Chanel en 1928, vestida con una marinière y pantalones masculinos. |
Nunca escribió sus memorias. Con 80 años, sin apenas amigos, amargada y comida por la artrosis y la morfina, se entrevistó una y mil veces con periodistas para que trazaran su biografía. Con la misma energía con la que cortaba sus vestidos, el mito de la costura tejía recuerdos de la niñez frente a la grabadora. Envuelta por el humo de su cigarrillo dibujaba un padre tierno y cosmopolita, ociosas tías rentistas, brillantes mansiones de campo, eternas tardes frente al piano... Una urdimbre de fantasías con las que intentaba enterrar su verdadero origen.
Gabrielle Chanel nació en el hospicio de Saumur, el 18 de agosto de 1883, hija natural de una tuberculosa y de un vendedor ambulante, que desaparecía largas temporadas carretera adelante sin dejar más rastro que olor a alcohol, deudas de juego y sospechas de infidelidad. Con 12 años, tras la muerte de su madre, su padre la aparcó en el hospicio de Obazine. Gabrielle nunca superó aquel abandono. "Quería suicidarme. Durante mi infancia sólo ansié ser amada. Todos los días pensaba en cómo quitarme la vida, aunque, en el fondo, ya estaba muerta. Sólo el orgullo me salvó". Un orgullo que, años después, le llevó a su venganza. Transformar su humillante uniforme negro del orfelinato en bandera del buen gusto: un Chanel.
Después de adquirir conocimientos básicos de costura durante seis años en Aubazine, al cumplir 18 años Chanel fue enviada a un internado religioso en la ciudad de Moulins, donde residían sus abuelos paternos. Allí coincidió con su joven tía Adrienne, apenas dos años mayor que ella, que se convirtió en su amiga y cómplice.
Las dos jóvenes, tía y sobrina, encontraron empleo en una pañería y como ayudantes de un sastre de Moulins de Allier.
Para 1906, se hallaba en Vichy, una ciudad turística que contaba con una gran cantidad de salas de concierto, teatros y cafés donde esperaba encontrar el éxito como intérprete.
En Moulins, Chanel conoció al oficial de caballería y rico heredero textil francés, Étienne Balsan. Con 23 años se convirtió en su amante. Durante los siguientes tres años, vivieron juntos en su castillo Royallieu cerca de Compiègne, una zona destacada por su bosque de senderos ecuestres y la vida de caza y polo. Este estilo de vida permitió a Chanel llevar una vida de riqueza y ocio, y fomentar su carácter social en fiestas de alto prestigio.
La primera boutique de Gabriella Chanel en Deauville, 1913 |
Boutique Chanel Joaillerie, 18, place Vendôme, Paris |
Capel, un miembro rico de la clase alta inglesa, la instaló en un apartamento en París y financió sus primeras tiendas.
La pareja pasó tiempo en diversos centros turísticos de moda tales como Deauville pero Capel nunca le fue fiel. Permanecieron juntos durante nueve años e incluso continuaron su relación luego del casamiento de Capel con la aristócrata inglesa lady Diana Wyndham en 1918.
En perfumes, Coco Chanel aportó con su creación Chanel Nº 5 (el número de la calle de su primera tienda en París) que es todo un hito. |
La prematura muerte de Capel en un accidente automovilístico a fines de 1919 fue uno de los acontecimientos más devastadores para Chanel. Abatida por el dolor, comenzó a utilizar prendas negras en señal de luto y al poco tiempo diseñó el denominado «pequeño vestido negro», que se presentó en 1926 y fue calificado por la revista Vogue como el «atuendo que todo el mundo usará». El vestido negro, disponible sólo en ese color, fue inmediatamente un éxito y ha sido el epítome de la elegancia sencilla desde entonces
«Su muerte fue un golpe terrible para mí. Al perder a Capel, lo perdí todo.
Una de sus amistades más largas y duraderas fue con Misia Sert, persona destacada de la élite parisina y esposa del pintor español José María Sert. No sólo se convertirían en amigas inseparables sino que Misia la introdujo en los círculos artísticos más de moda en la época. Gracias a Misia, Coco pudo conocer a grandes nombres de la cultura. De algunos de ellos sería su amante.
El primero de ellos fue Sergei Diaguilev, un empresario al que ayudó a financiar el ballet La consagración de la primavera y a raíz del cual conoció a Igor Stravinsky, comopitor de la música del ballet. A pesar de estar casado, Igor y Coco iniciaron un idilio que no duraría demasiado.
Otro hombre de origen ruso entró en el corazón de Coco en el año 1922, el duque Dimitri Pavlovitch, primo del zar Nicolás II, una relación que duraría apenas un año.
En 1923 Coco Chanel cumplía 40 años. Para celebrarlo, la gran diseñadora inició la comercialización de su emblemático perfume, el Chanel Nº5, sin duda su número de la suerte.
Aquel mismo año Coco conocería al que se convertiría en su nuevo amante, el duque de Westminster. Durante 10 años mantuvieron una idílica relación llena de lujos y vida disipada. Pero el deseo del duque de tener un heredero varón, algo que no le habían dado sus esposas, Coco tampoco lo pudo hacer realidad. Tenía entonces 42 años y remotas posibilidades de ser madre.
Coco Chanel junto a Arthur Grosvenor, duque de Westminster |
En 1923, Vera Bate Lombardi, supuestamente hija ilegítima del marqués de Cambridge, le proporcionó a Chanel la entrada a los más altos niveles de la sociedad británica. Le presentó ese mismo año en Monte Carlo al duque de Westminster, Hugh Richard Arthur Grosvenor, conocido en la intimidad como «Bendor». Durante el romance de diez años que mantuvo con el aristócrata, Chanel recibió joyas extravagantes y una casa en el prestigioso distrito londinense de Mayfair. Otros rumores indican que el príncipe de Gales Eduardo de Windsor (posterior rey de Gran Bretaña Eduardo VIII) mantuvo un breve amorío con la diseñadora a pesar de la implicancia con su primo, el duque.
En 1931, durante su estadía en Monte Carlo, conoció a Samuel Goldwyn a través de Demetrio Románov, primo del zar de Rusia Nicolás II. Goldwyn ofreció a Chanel una propuesta laboral de un millón USD que incluía diseñar el vestuario para las estrellas de MGM dos veces al año en Hollywood. Luego de aceptar la oferta, viajó acompañada de Misia Sert a Estados Unidos, donde confeccionó la ropa de Gloria Swanson en Tonight or Never (1931, Esta noche o nunca) y de Ina Claire en The Greeks Had A Word for Them (1932, Tres rubias). Por otra parte, Greta Garbo y Marlene Dietrich se convirtieron en clientas privadas
En 1931 Coco se embarcó en la aventura americana de la mano del dueño de la productora cinematográfica Metro Goldwyn Mayer. Su primera colaboración en una película de Hollywood sería en Esta noche o nunca, en la que vistió a Gloria Swanson. A pesar de que vistió a muchas otras grandes actrices, su estilo sobrio no llegó a encajar con la imagen espectacular que se esperaba de las estrellas de Hollywood.
De vuelta a París, Coco conoció a Pablo Iribarnegaray, conocido como Paul Iribe, un artista vasco casado con el que mantendría una relación. De nuevo su idilio terminaría de manera dramática y prematura. Un infarto en medio de un partido de tenis terminaría con la nueva ilusión de Coco; volvía a estar sola, a los 52 años. Incapaz de conciliar el sueño, recurrirá a la morfina. Su única compañía desde entonces.
Iribe, Paul (1883-1935) Ilustrador, pintor y director artístico francés, nacido en Angulema en 1883 y fallecido en 1935, cuyo verdadero nombre fue Paul Iribarnegaray. |
Cuando los vientos de guerra volvieron a sacudir a Europa, Chanel clausuró su tienda. "Tenía la sensación de que terminaba una época y de que jamás volverían a hacerse vestidos". Sus sospechosas relaciones amorosas y políticas con diplomáticos alemanes durante la guerra prolongaron su retiro durante 15 años.
Sin embargo, Chanel no había dicho su última palabra. En 1954 inició su desembarco. Tenía 71 años, y Christian Dior con sus corsés se había adueñado del trono de París. Con su instinto de siempre, Chanel volvió al contraataque. Su estrategia, la misma que en los años veinte: liberar el movimiento de las mujeres. Tranquilamente rehizo la línea Chanel. Por segunda vez en su vida modificaba el armario femenino e imponía su estilo en las calles.
El término de «pequeño vestido negro» es catalogado a menudo como una contribución de Chanel al léxico de la moda y como una prenda de ropa que se ha utilizado hasta la actualidad.
Pero Chanel no era ya la jovencita modosa de sus comienzos. Avejentada, maquillada como una trasnochada actriz de cine mudo y resentida por sus fracasos sentimentales, aprovechaba cualquier entrevista para cortar cabezas. Atacaba a De Gaulle -"Me gustaría verlo bajar encadenado por los Campos Elíseos"-; a Brigitte Bardot -"Lleva medias ordinarias y viste con harapos. Es repulsiva"-; a Orson Welles -"Rocambolesco"... pero también aplicaba su látigo contra los otros modistos, los homosexuales, la minifalda, las mujeres...
Coco Chanel hacia 1970 |
Sólo cuando se encerraba en su casa, una habitación del hotel Ritz, volvía la Chanel frágil del hospicio de Obazine. Una huérfana de 88 años que se anclaba frente al televisor hasta la madrugada para no reunirse con los fantasmas. "Es como una enfermedad. No me decido a despegar el culo del asiento. Me horroriza ir a acostarme. Hace diez años que no me han besado en la boca...". El 10 de enero de 1971 terminó su largo reinado sobre la moda. "Seré una mala muerta. Cuando esté bajo tierra me agitaré, y sólo pensaré en regresar para volver a empezar".
Después de un multitudinario funeral en la Madeleine de Paris, la reina de la moda fue enterrada en Lausana, como ella había pedido.
Betty Boop es un personaje de dibujos animados que apareció en la serie Talkartoon, producida por Max Fleischer (Fleischer Studios) y lanzada por la Paramount Pictures. Por su abierta sexualidad, Betty Boop tuvo mucho éxito en el cine.
Fue el primer dibujo animado de una chica flapper. Hizo su primera aparición el 8 de agosto de 1926, en el dibujo animado Dizzy Dishes, en la sexta entrega de las series Fleischer's Talkartoon. Grim Natwick, animador veterano de los estudios de Walt Disney y Ub Iwerks, fue principalmente el responsable de crear el personaje animado, modelado con base en la figura de Helen Kane, cantante y actriz estadounidense contratada por Paramount Pictures, el estudio que distribuía los dibujos animados de Max Fleischer. Siguiendo la práctica común, Grim Natwick hizo un nuevo personaje animal, en este caso su nuevo personaje animado era un perro caniche francés. Empezando con este dibujo animado, la voz del personaje fue representada por varias actrices de voces diferentes, hasta que Mae Questel consiguió al fin el papel, en 1931, y lo mantuvo por el resto de la serie.
Sin embargo, el desarrollo de Betty todavía estaba incompleto. El hermano de Max Fleischer, Dave, alteró el personaje aún más, haciéndola más sensual y más femenina. La famosa personalidad de Betty entró finalmente en el corto de 1932, Minnie the Moocher, donde Cab Calloway y su orquesta prestaron sus talentos. En la película, Betty corre sola fuera de sus padres arriesgándose a perderse con Bimbo en una cueva por una morsa (rotoscopio de Calloway). El número musical asustadizo del Fantasma impide a Betty huir hacia la seguridad de casa. El retrato de los padres de Betty, aparentemente judíos ortodoxos, ha llevado a muchos asumir que Betty pensó y actuó públicamente como personaje judío. Sin embargo, en los episodios posteriores, como en 1936, en el corto "Be Human", aparece retratando el cronómetro del tiempo, en el estilo de las películas del Viejo Oeste. En agosto de 1932, la serie de Talkartoon cambió su nombre oficial por el de Betty Boop Cartoons.