XXXV - Recordando: Catalina de Médici - Maximiliano II - Felipe II de España - La Liga Santa - La cuarta guerra otomano-veneciana 1570-1573

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Recordando

• Venecia y España se disputaron la posesión de Castelnuovo, lo que puso fin a la primera Santa Liga
• En 1540 Solimán I firmó un tratado con Venecia. Habria paz entre las dos potencias si Venecia reconocía las conquistas turcas, sus barcos pedían permiso para atracar en un puerto otomano y pagaba 300.000 ducados de oro.
• En 1543 Solimán I firmó una tregua con Carlos I.

Catalina de Médici (Florencia, 13 de abril de 1519 - Castillo de Blois, 5 de enero de 1589) fue una noble italiana, hija de Lorenzo II de Médici y Magdalena de la Tour de Auvernia. Como esposa de Enrique II de Francia, fue reina consorte de Francia desde 1547 hasta 1559.

Maximiliano II (Viena, 31 de julio de 1527-Ratisbona, 12 de octubre de 1576) fue un emperador electo del Sacro Imperio Romano Germánico, rey de Hungría entre 1564 y 1576, rey de Bohemia entre 1564 y 1576.

Felipe II de España, llamado «el Prudente» (Valladolid, 21 de mayo de 1527-San Lorenzo de El Escorial, 13 de septiembre de 1598), fue rey de Españai​ desde el 15 de enero de 1556 hasta su muerte, de Nápoles y Sicilia desde 1554 y de Portugal y los Algarves —como Felipe I— desde 1580, realizando la tan ansiada unión dinástica que duró sesenta años. Fue asimismo rey de Inglaterra e Irlanda iure uxoris, por su matrimonio con María I, entre 1554 y 1558.

La Liga Santa o Santa Liga fue una coalición militar integrada por la Monarquía Hispánica, los Estados Pontificios, la República de Venecia, la Orden de Malta, la República de Génova y el Ducado de Saboya para luchar contra el Imperio otomano en 1571. La batalla más importante de la Liga Santa fue la batalla de Lepanto, en la cual derrotaron a los turcos.

Querían recuperar Chipre, eran muchos más que la armada turca.

En 1566, tras la muerte de Soliman I, "el Mágnifico" subió al trono su hijo, Selim II (1566-1574). La noticia parecía excelente para la cristiandad: Selim II era un hombre indolente, entregado a los placeres de la carne y sin interés por el gobierno o la milicia. Pero heredó de su padre a su gran visir, Sokollu Mehmet, un extraordinario administrador que llegó a servir a tres sultanes.

El Imperio acababa de firmar la paz con Selim II. Francia contaba ambién con una vieja alianza con los turcos, y la reina regente, Catalina de Médicis, tenía demasiados problemas en su propia casa como para embarcarse en aventuras ultramarinas, mientras que Portugal ya libraba su propia guerra en el Índico.

Sólo el papa (Pío V) y Felipe II prestaron atención a las demandas de Venecia. Pero ambos lo hicieron con reluctancia.

En la primavera de 1570 una flota enviada por los aliados  se concentró en Candía (Heraklion) en Creta.

• 136 galeras venecianas
• 12 galeras pontificias mandadas por Marco Antonio  Colonna
• 50 galeras españolas mandadas por Juan Andrea Doria

Con la llegada de la primavera se pusieron en marcha las operaciones militares, pero las flotas españolas y papal se movieron con tal lentitud, que no llegaron a Creta hasta setiembre. Para cuando comenzaron a acercarse a Chipre, una parte importante de la isla incluida Nicosia, la capital, ya había caído en manos turcas. Aún así, en lugar de encarar al enemigo antes de que se hiciera todavía más fuerte, la flota cristiana decidió abandonar el Mediterráneo Oriental con el compromiso de regresar un año después.

Los chipriotas quedaron, por tanto, solos para detener el avance otomano. Los esfuerzos venecianos se concentraron en Famagusta, la segunda ciudad en importancia de la isla que contaba con unas defensas formidables construidas por la propia República.

El asedio a Famagusta, defendida por el veneciano Marcantonio Bragadin, comenzó en setiembre de 1570.

El 1 de agosto de 1571 hicieron ondear sobre las murallas una bandera blanca, y pidieron parlamentar con los turcos. Los comandantes otomanos se comprometieron a permitir que todo aquel que lo deseara abandonara libremente la ciudad, se embarcara en galeras venecianas y partiera a Creta. Aquellos que se quedaran no sufrirían ningún daño. 

Todos fueron ejecutados.

El asedio fue espantoso, pero Famagusta resistió durante un año y se llevó la vida de más de 50.000 turcos. Los venecianos habían perdido la mayoría de los 8.000 hombres que protegían la ciudad. Quedaban menos de 900, la mayoría heridos o muertos de hambre.
Su única esperanza era el prometido regreso de la flota cristiana

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Llegó enero de 1570 cuando los turcos comunicaron a los venecianos que Chipre se consideraba una isla otomana.

La cuarta guerra otomano-veneciana, también conocida como la guerra de Chipre (en italiano: Guerra di Cipro), fue peleada entre 1570 y 1573. Enfrentó al Imperio otomano con la República de Venecia, a quien en 1571 se unió la Liga Santa, una coalición de Estados cristianos formada bajo los auspicios del Papa, que incluyen a España (con Nápoles y Sicilia), la República de Génova, el Ducado de Saboya, los Caballeros de Malta, el Gran Ducado de Toscana y otros Estados italianos.

El estandarte de la Liga Santa, ondeado por Juan de Austria en su buque insignia Real . Está realizado en damasco azul entretejido con hilo de oro, de 7,3 m de largo y 4,4 m de ancho en el polipasto. Muestra al Cristo crucificado sobre los escudos de armas de Pío V, de Venecia, de Carlos V y de Juan de Austria. Los escudos de armas están unidos por cadenas que simbolizan la alianza. El estandarte fue entregado a la Catedral de Toledo en 1616 por Felipe III de España. Fue trasladado al Museo de Santa Cruz en 1961.

La Santa Liga de 1571 fue organizada por el Papa Pío V e incluía a las principales potencias católicas del sur de Europa ( Península Ibérica e Italiana ), específicamente el Imperio español también, como las potencias marítimas italianas . Tenía la intención de romper el control del Imperio Otomano del Mar Mediterráneo oriental y se concluyó formalmente el 25 de mayo de 1571.

Los firmantes se comprometían a luchar contra los turcos otomanos y sus vasallos sarracenos en el norte de África y aportar cada año, 200 galeras, 100 barcos de transporte, 50.000 soldados de infantería y 4.500 de caballería. Estos efectivos estarían listos en primavera para atacar anualmente bases otomanas.

La primera remesa se reunió con rapidez, y en agosto, se encontraba concentrada en Messina, en la costa oriental de Sicilia. Fue en ese momento cuando llegaron las noticias de la caída de Famagusta, del espantoso destino de los defensores y de la pérdida de Chipre.

164 barcos españoles, 20.000 soldados, 134 barcos venecianos, 8.000 soldados, 18 barcos pontificios, 2.000 soldados y 9 de Malta. Era mucho más poderosa que la armada turca que asediaba Famagusta.

La cólera y un cierto sentimiento de culpabilidad se extendieron entre los integrantes de la flota; los ánimos estaban encendidos y la ocasión de vengarse se presentó casi de inmediato.

Los despojos de Bragadino fueron depositados con honores en una urna en san Zanipolo, la iglesia de los dominicos, el panteón de los grandes dogos de Venecia.

En 1961 se abrió la urna y encontraron su piel entera. Todo verdad.